Patolog¨ªa
Si la exhibici¨®n de la serie ¡®Stranger (Secret Forest)¡¯ ha sido universal, quiz¨¢ sea porque los asuntos que muestra tambi¨¦n lo son
?Vicio o patolog¨ªa? Probablemente las dos, pues sin dichos conceptos no se puede explicar el ver en tres d¨ªas una serie surcoreana en versi¨®n original subtitulada de 16 cap¨ªtulos y alrededor de 15 horas de emisi¨®n. Stranger (Secret Forest) se ha podido contemplar simult¨¢neamente en su pa¨ªs de origen y en todo el mundo en Netflix en junio y julio de este a?o. ?Es la globalizaci¨®n, est¨²pido!
Algunas consideraciones sobre la vida actual en Se¨²l, informaci¨®n y efecto colateral de las series de televisi¨®n contempor¨¢neas: no es posible ver a ning¨²n ciudadano sin utilizar constantemente el m¨®vil, artefacto multiusos. No es posible ver ning¨²n veh¨ªculo que no sea de la marca Hyundai y es absolutamente imposible contemplar alg¨²n gesto maleducado incluso en los momentos m¨¢s tensos: si el jefe se despacha a gusto con alg¨²n subordinado, el subordinado se despedir¨¢ siempre con una reverencia, la misma con la que acudi¨® a la llamada del jefe. Es una cuesti¨®n de respeto y cortes¨ªa, m¨¢s que de sumisi¨®n. Impresionante.
Un fiscal y una polic¨ªa encabezan los equipos que tratar¨¢n de resolver una serie de cr¨ªmenes entremezclados con una serie de tramas corruptas. Y si la exhibici¨®n de Stranger (Secret Forest) ha sido universal, quiz¨¢ la justificaci¨®n sea el que los asuntos que muestra tambi¨¦n lo son. Evasi¨®n de impuestos, adjudicaciones empresariales ama?adas, maniobras burs¨¢tiles en la oscuridad... artima?as, al parecer, globalizadas.
Los protagonistas de las series de intriga suelen ser hier¨¢ticos (los de todos los C.S.I. alcanzan la cumbre de la inexpresividad), pero en el caso surcoreano se justifica adem¨¢s porque el fiscal Hwang Shi Mok sufri¨® en su infancia una operaci¨®n en el cerebro para solucionar unas terribles migra?as que le anul¨® la mayor parte de sus emociones, aunque no su voluntad y constancia en descubrir a los asesinos y desenmascarar a los grandes delincuentes de cuello blanco.
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