¡®Estoy vivo¡¯, una peculiar mezcla que funciona

Andr¨¦s Vargas es un inspector de polic¨ªa que muere cuando persigue al asesino en serie conocido como el Carnicero de Medianoche. Pero en vez de morir y ya, o de ir al cielo o al infierno, se despierta en un lugar de tr¨¢nsito, una especie de universo futurista de ciencia ficci¨®n donde le comunican que, en realidad, no deber¨ªa haber muerto y tiene la opci¨®n de regresar a la Tierra. Eso s¨ª, lo har¨¢ en el cuerpo de otra persona, sin poder decir a ninguno de sus conocidos o familiares qui¨¦n es, y con la supervisi¨®n de un Enlace, una especie de ¨¢ngel que le acompa?a en este trance. As¨ª, Andr¨¦s regresa cinco a?os despu¨¦s de su muerte con el cuerpo de otro inspector, Manuel M¨¢rquez, que, para m¨¢s inri, es el nuevo compa?ero de patrulla de la hija de Andr¨¦s.

Este es el peculiar punto de partida de Estoy vivo, la nueva serie con la que TVE quiere intentar recuperar parte de la audiencia perdida en los ¨²ltimos a?os. Una apuesta arriesgada por la peculiar mezcla de g¨¦neros. Porque la serie arranca sin llegar a definir del todo su tono: comienza como un polic¨ªaco muy marcado para pasar despu¨¦s a incluir efectos visuales en el paso del protagonista por ese lugar de tr¨¢nsito y combinar el drama con la comedia en el resto del cap¨ªtulo.

Aunque la mezcla suene extra?a, el resultado funciona bastante bien y el primer episodio invita al espectador a continuar para saber por d¨®nde ir¨¢ realmente la historia y cu¨¢l ser¨¢ finalmente el tono de la serie. El arranque es suficientemente entretenido como para enganchar (como en todas las series espa?olas, sobran minutos, aunque en este caso no es un problema demasiado acuciante). Las interpretaciones, con Roberto ?lamo en los primeros minutos, Javier Guti¨¦rrez, muy bien en un papel que le encaja a la perfecci¨®n, Alejo Sauras y Anna Castillo, elevan la serie. Y la producci¨®n, a cargo de Globomedia, est¨¢ muy cuidada. Estoy vivo invita a tener paciencia para descubrir hacia d¨®nde quiere ir y que le dejemos tiempo para descubrirse a s¨ª misma. Estoy vivo quiere vivir.