Moneo recibe en Tokio el mayor galard¨®n japon¨¦s a la arquitectura

Para agradecer la entrega del Praemiun Imperiale, el equivalente japon¨¦s al premio Princesa de Asturias, el arquitecto navarro Rafael Moneo (Tudela, 1937) salud¨® con una reverencia a los asistentes a la ceremonia y luego les mand¨® un beso al aire. En privado y con los medios de comunicaci¨®n, el cuarto espa?ol en recibir el galard¨®n que otorga la Japan Art Association, se declara admirador de la arquitectura japonesa y compara el santuario sinto¨ªsta de Ise con el Parten¨®n. Moneo, que ha recibido el galard¨®n hoy, mi¨¦rcoles, subraya la sabidur¨ªa oriental de hacer templos de madera y reciclarlos cada veinte a?os desde hace siglos y los compara con las construcciones de piedra que sufren con el paso del tiempo. ¡°La vejez parece que se siente m¨¢s en la p¨¢tina de las construcciones europeas que en esta capacidad [japonesa] de hacer presente el pasado¡±, explica.

Moneo asegura sentir orgullo de que un pa¨ªs a la vanguardia de la arquitectura mundial lo haya elegido para su m¨¢ximo galard¨®n a las artes. El premio fue creado en honor al fallecido pr¨ªncipe Takamatsu, t¨ªo del actual emperador Akihito, y tiene una dotaci¨®n de 15 millones de yenes (113.000 euros). Se otorga desde 1989 en campos de la cultura no cubiertos por el premio Nobel. Junto a Moneo fueron galardonados otros cuatro veteranos del arte mundial: el bailar¨ªn ruso-estadounidense Mikhail Baryshnikov, la creadora visual iran¨ª Shirin Neshat, el escultor ghan¨¦s El Anatsui y el m¨²sico senegal¨¦s Youssou N¡¯Dour.

En la historia de los premios figuran nombres como Federico Fellini, Philip Glass, Richard Serra o Pina Bausch. Se suele recibir tras una larga carrera dedicada a la excelencia.

Casi la mitad de los arquitectos que han recibido el Praemium Imperiale fueron reconocidos, como Moneo en 1996, con el Pritzker, calificado como el Nobel de la profesi¨®n, creado por la familia del mismo nombre en Chicago (Estados Unidos) en 1978.

Entre las razones para premiar a Moneo el comit¨¦ de selecci¨®n del Praemium Imperiale mencion¨® el respeto al entorno de sus edificios y ¡°la gran sensibilidad para crear obras de una belleza duradera¡±. El arquitecto espa?ol, conocido por construcciones como el Museo Romano de M¨¦rida, la Fundaci¨®n Pilar i Joan Mir¨®, en Palma de Mallorca; el Kursaal de San Sebasti¨¢n y la madrile?a estaci¨®n de Atocha, cultiva amistad con arquitectos japoneses de primera l¨ªnea como Tadao Ando y Arata Isozaki. En esta visita, su tercera a Jap¨®n, ha recorrido los barrios c¨¦ntricos de la capital, como Ginza, para constatar el ¡°consumismo intenso de los japoneses¡±, y Omotesando, donde se maravill¨® con el equilibrio entre tradici¨®n y presente del Museo Nezu, del arquitecto Kengo Kuma.

En nombre de los cinco premiados en esta edici¨®n del Praemium Imperiale, la n¨²mero 29, Mikhail Baryshnikov pronunci¨® un discurso en el que hizo referencia ¡°al miedo y la ansiedad que abundan en los tiempos actuales¡±. A continuaci¨®n elogi¨® el acierto de los premios que ¡°reconocen la importancia de las artes en momentos de inestabilidad¡±.

Antes de Moneo los espa?oles laureados fueron el tenor Pl¨¢cido Domingo, en 2013; el escultor Eduardo Chillida, en 1991, y el pintor Antonio T¨¤pies en 1990.

Moneo Tokio