La doma del pudor

"Hace unos meses rele¨ª con mis alumnos de la Universidad de Iowa la magn¨ªfica novela Se?ora de rojo sobre fondo gris, de Miguel Delibes. Y no me emocion¨® tanto como la primera vez que la le¨ª, cuando se public¨® en 1991. En esta relectura me sobr¨® el pudor con que Delibes oscurece la naturaleza autobiogr¨¢fica de los hechos que all¨ª se narraban escondi¨¦ndose tras el personaje de un pintor. Delibes se neg¨® a decir 'soy yo, y esto que narro es lo que creo que pas¨®'. No lo hizo por pudor, tal vez un pudor de posguerra. No me molest¨® ese pudor en 1991; pero en este 2018, s¨ª. El pudor se hab¨ªa hecho viejo, pens¨¦. Es all¨ª donde el pudor es una carga, en el momento en que puede erosionar la fuerza art¨ªstica de una obra".

El escritor Manuel Vilas reflexiona este s¨¢bado en Babelia sobre la doma del pudor -"una construcci¨®n del catolicismo espa?ol que se asienta en la p¨¦rdida de prestigio social"- y sobre c¨®mo, con la conquista de las libertades, va desapareciendo, de tal manera que lo autobiogr¨¢fico se convierte en escritura natural. "Los autores espa?oles de mediana edad ya no necesitan parapetarse en estrategias de oscurecimiento de la vida", se?ala, en un texto en el que cita, entre otros, los ¨²ltimos libros de Antonio Mu?oz Molina, Marta Sanz, Luisg¨¦ Mart¨ªn, Carlos Pardo y Vicente Molina Foix. Y observa que los escritores exhiben ya sin tapujos el amor por sus padres, impulsados por "una obsesiva curiosidad" por su vida.

Vilas profundiza en un debate en el que tambi¨¦n tercia Laura Fern¨¢ndez, que dice tajante: "Toda literatura es literatura del yo". "Dig¨¢moslo alto y claro, escribir es exponerse. Cualquiera que no pretenda exponerse deber¨ªa recoger sus b¨¢rtulos y largarse".?

Babelia propone estas reflexiones en un n¨²mero en el que ofrece, adem¨¢s, un adelanto de La mujer singular y la ciudad, de Vivian Gornick (Sexto Piso), y una entrevista con Gerald Murnane, el escritor australiano -m¨¢s apasionado por la h¨ªpica que por la literatura-, cuyo nombre lleva a?os sonando para el Nobel. Jos¨¦ Luis de Juan le visita en su refugio en Goroke y le pone ante el espejo. "Todo lo he escrito para entender un poco el significado de mi experiencia".

A estos contenidos hay que sumar el an¨¢lisis de la exposici¨®n en el MOMA de Tarsila do Amaral, acicate de la modernidad brasile?a que se estren¨® con el Manifesto Antrop¨®fago, la cr¨ªtica teatral de Que rebetin els actors, escrita y dirigida por Gabriel Calder¨®n y las columnas semanales de Antonio Mu?oz Molina y Manuel Rodr¨ªguez Rivero.