Superl¨®pez, ahora contra los yihadistas
El peculiar h¨¦roe dibujado por Jan cumple 45 a?os, se encuentra a punto de llegar al cine por primera vez y roza los 80 ¨¢lbumes con una nueva historieta pegada a la actualidad
Resulta dif¨ªcil imaginarse al estirado Superman interpretado por Henry Cavill saliendo de casa, a medio peinar y medio dormido, para tomarse un caf¨¦ con leche y un cruas¨¢n en el bar o, lo m¨¢s habitual, pedirlo en la ventanilla de las taquillas del metro si el sue?o aprieta. Pero para el dibujante Jan, un superh¨¦roe a la espa?ola debe compartir esa castiza imagen de las ma?anas de tantos conciudadanos de la piel de toro. As¨ª que, rozando ya los 80 ¨¢lbumes, Superl¨®pez se levanta de nuevo: Nuevas aventuras de Mambr¨² trata de un atentado yihadista, un asunto, el reclutamiento de j¨®venes para esta causa, que ya abord¨® en Mambr¨² se fue a la guerra.
Como para la mayor¨ªa de los espa?olitos de a pie, las cosas nunca fueron f¨¢ciles para Superl¨®pez, que nac¨ªa en 1973 como un encargo para la colecci¨®n Humor del siglo XX, una serie en la que diferentes dibujantes crear¨ªan parodias de grandes iconos cinematogr¨¢ficos como Franciscostein, Tarzanilo o King Tongo. Chistes de apenas cuatro o cinco vi?etas donde un se?or con mostachito, m¨¢s pr¨®ximo a Jos¨¦ Luis L¨®pez V¨¢zquez que a Christopher Reeve, so?aba con vivir las haza?as del poderoso kryptoniano y donde el leon¨¦s Juan L¨®pez Fern¨¢ndez (Toral de los Vados, 1939) apenas pod¨ªa mostrar la calidad de su trazo y su inventiva. Se hab¨ªa formado como dibujante en la Cuba paterna, adonde lleg¨® en 1959 tras el ¨¦xito de la revoluci¨®n castrista para incorporarse a varias revistas infantiles, pero sobre todo en la renovada animaci¨®n cubana.
El mejor Superl¨®pez
Una de las discusiones m¨¢s enconadas entre los fans de Superl¨®pez es la que intenta definir cu¨¢l ha sido la mejor de las aventuras del personaje. Aunque el autor siempre ha indicado que su historia preferida es La caja de Pandora, los fans se dividen entre t¨ªtulos como Los cabecicubos, La gran superproducci¨®n o, sobre todo, El supergrupo, que recientemente volvi¨® a las librer¨ªas en dos nuevas aventuras firmadas por P¨¦rez Navarro y Jan, que tuvieron ¨¦xito suficiente como para dar lugar a un intento de nueva colecci¨®n, con dibujos de Nacho Fern¨¢ndez.
Pero quiz¨¢s todos estos debates desaparezcan con el paso a la gran pantalla del personaje, que tras cuatro d¨¦cadas de espera e intentos bald¨ªos es ya una realidad. Bajo la direcci¨®n de Javier Ruiz Caldera, el actor Dani Rovira dar¨¢ vida al personaje en una pel¨ªcula que se estrenar¨¢ a finales de a?o, y cuyas primeras im¨¢genes se han viralizado r¨¢pidamente en las redes sociales.
Tras volver a Espa?a y pasar por varias editoriales, la creaci¨®n de Superl¨®pez quedaba entonces como una an¨¦cdota, retomada en 1974 para intentar fichar por la todopoderosa Bruguera, que le compr¨® el personaje, pero le oblig¨® a aceptar guiones ajenos a rega?adientes. Despu¨¦s de colaborar con escritores como Conti, Ribera o Francisco P¨¦rez Navarro, apenas un a?o despu¨¦s Jan se negaba a seguir dibujando el personaje, decepcionado por los resultados. Comenzaba entonces un largo deambular, que le llevar¨ªa de los cuentos infantiles troquelados a adaptar al c¨®mic series de animaci¨®n famosas como Heidi o Marco, pero tambi¨¦n historietas comprometidas para la revista Butifarra o el ¨¢lbum Nosotros los catalanes, donde se pod¨ªa vislumbrar su buen ojo para la s¨¢tira de actualidad. Finalmente, el cambio de direcci¨®n de Bruguera le dio una nueva oportunidad a Superl¨®pez en 1979, aprovechando el reciente estreno de la versi¨®n cinematogr¨¢fica de Superman de Richard Donner, pero esta vez desde el respeto a su libertad creativa. Se acompa?¨® del guionista Francisco P¨¦rez Navarro, Efep¨¦, buen conocedor del g¨¦nero de superh¨¦roes y que supo crear una parodia casi perfecta ya desde su primera historia, donde narra el periplo de un beb¨¦ bigotudo alien¨ªgena que llega desde el extinto planeta Chit¨®n a la Tierra. Ya crecidito, Superl¨®pez tiene que ganarse las lentejas con su personalidad secreta de Juan L¨®pez, oficinista an¨®nimo y algo mediocre, que comparte penurias con su amigo Jaime y su novia y compa?era, Luisa Lanas.
Con estos mimbres, Jan y Efep¨¦ firmaron varias historias que pronto ganaron el favor del p¨²blico, aunque el verdadero ¨¦xito de Superl¨®pez llegar¨ªa con las historietas de El supergrupo, donde los autores cruzar¨ªan al icono de la DC C¨®mics con los Vengadores de la Marvel, en una herej¨ªa suprema que se convertir¨ªa en la parodia ideal. Las historias de Superl¨®pez, el capit¨¢n Hispania, El bruto, La chica incre¨ªble, Latas y el Mago fueron un bombazo que lanzar¨ªan al personaje al Olimpo comiquero, rivalizando en popularidad con los mism¨ªsimos Mortadelo y Filem¨®n.
Pero Jan buscaba mucho m¨¢s para su personaje que ser una mera parodia: tras el ¨¦xito, decide seguir en solitario con la serie, abandonando a los compa?eros marvelianos para explorar su propio camino, que le permitir¨ªan expresar su lectura de la actualidad y sus ideas. Siempre atento a la realidad y buscando un mensaje social comprometido, Jan ha hecho feroces cr¨ªticas de las dictaduras tras el 23-F (Los cabecicubos, 1982); ha denunciado la exportaci¨®n de residuos al tercer mundo (El castillo de arena, 1992), el desastre del Prestige (Monster Chapapote, 2003) o los desahucios indiscriminados (El gran desahuciador, 2013). Critic¨® el mundo de Hollywood (La gran superproducci¨®n, 1982), avanz¨® el impacto de Internet (Los cibernautas, 1997) y supo tambi¨¦n re¨ªrse del futuro ¨¦xito de la telerrealidad (El dios del bit, 2001), pero nunca ha escondido su pasi¨®n por la ciencia y el rechazo de las supersticiones (La caja de Pandora, 1983). Ha sabido adaptar a cl¨¢sicos de la literatura a su particular universo, desde Tolkien (El se?or de los chupetes, 1980) a Asimov (T¨², robot¡, 2008) pasando por Borges (La biblioteca inexistente, 2009) y hacer que su personaje viaje por medio mundo real o imaginado, mostrando una tit¨¢nica labor de documentaci¨®n en su trabajo gr¨¢fico y una calidad que le ha valido ser uno de los dibujantes m¨¢s admirados y copiados. Y aunque el ¨¦xito le obligara a explotar a sus personajes creando a los supergemelos Jol¨ªn y Jolina (eso s¨ª, hijos naturales de una aventura amorosa de Superl¨®pez), no ha renunciado nunca a su compromiso y convicciones, que le llevaron a rechazar la Medalla de Oro al m¨¦rito en Bellas Artes.
Los personajes pintan ya canas, pero la labor de Jan mantiene el mismo esp¨ªritu, logrando que la Parchelona de sus aventuras refleje una realidad m¨¢s cercana al lector que la que dan los titulares de los peri¨®dicos.
Babelia
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.