Teodor Currentzis: ¡°Hablo con ese sordo loco que era Beethoven¡±
El iconoclasta director de orquesta grecorruso dirige la integral de las sinfon¨ªas de Beethoven en el Festival de Salzburgo

Desde la periferia todo se contempla con m¨¢s claridad. Esther Kinsky lo plantea en Hain (Suhrkamp, 2018), su reciente ¡°novela de descampados¡±. Un hipn¨®tico relato de viajes donde la escritora alemana revisa la esencia de varias ciudades italianas. Evita lo convencional para subrayar lo rec¨®ndito. Y el resultado es revelador. Esa misma idea subyace en las grabaciones del director de orquesta Teodor Currentzis (Atenas, 1972) para Sony Classical, como la trilog¨ªa de ¨®peras de Mozart y Da Ponte: Le nozze di Figaro, Cos¨¬ fan tutte y Don Giovanni. Las registr¨® entre 2013 y 2015 y se refiere a ellas como tatuajes aparentemente inalterables. ¡°Mi intenci¨®n ha sido crear un nuevo arquetipo para cada ¨®pera¡±, afirma. Para ello, el director grecorruso deja a un lado las opciones interpretativas habituales y pone el foco en aspectos insospechados que considera m¨¢s relevantes. Sus legendarias exigencias art¨ªsticas apuntan hacia la esencia de cada compositor. Incluso oblig¨® a su sello discogr¨¢fico a repetir toda la grabaci¨®n de Don Giovanni: ¡°No pretend¨ªa encontrar la perfecci¨®n, sino el esp¨ªritu de Mozart. Saber lo que realmente quer¨ªa. Y la intuici¨®n es superimportante para comunicarme con ¨¦l¡±, aclara.
El director grecorruso recibi¨® a Babelia hace pocas semanas en su despacho del Teatro de ?pera y Ballet de Perm, una localidad industrial rusa situada al pie de los montes Urales, en el borde mismo entre Europa y Asia. ¡°Los grandes centros musicales han capitulado a ciertas tradiciones¡±, afirma al hablar de la lejan¨ªa y el poco atractivo del lugar donde trabaja. Y prosigue: ¡°En la periferia, si te dan las condiciones id¨®neas, puedes crear el mejor p¨²blico posible e incluso tambi¨¦n transformar una ciudad. Esto es mejor que luchar contra el sistema ya establecido en M¨²nich o en Viena. Hasta Perm nadie viene por su arquitectura, sino por nuestra dedicaci¨®n a la m¨²sica¡±, sostiene.
Habla con pasi¨®n de su magn¨ªfica orquesta de instrumentos de ¨¦poca, musicAeterna, una especie de comuna de incondicionales que cre¨®, en 2004, cuando estaba al frente de la ?pera de Novosibirsk. ¡°Es un grupo de entusiastas surgido de mi filosof¨ªa sobre la interpretaci¨®n musical. Aqu¨ª nos preparamos durante una semana para tocar un acorde. Y nadie dedica tanto tiempo para encontrar la verdad¡±, aclara. No hay duda de su implicaci¨®n con el director grecorruso, pues todos sus integrantes se han trasladado a vivir a Perm. ¡°Crear esta orquesta ha sido para m¨ª como formar una familia, pues no s¨®lo nos conocemos, sino que tenemos las mismas ideas y respiramos juntos¡±, reconoce. Y en esa ¡°familia¡± orquestal no faltan varios espa?oles, como el trombonista Gerard Costes, la flautista Laura Pou y el contrabajista Carlos Navarro. ¡°Adoro a los m¨²sicos espa?oles y siento una gran complicidad art¨ªstica con ellos¡±, a?ade.
Justicia para Ser¨¦brennikov
No le gusta hablar de pol¨ªtica ni de Putin, pero Currentzis es claro ante lo que considera una injusticia. Y el arresto domiciliario del director de cine y teatro Kirill Ser¨¦brennikov, en agosto de 2017, por un supuesto fraude, le hizo reaccionar p¨²blicamente. "Pienso que es algo injusto. Nadie lo puede comprender. Incluso entre personas cercanas al Gobierno. Es para volverse loco", afirma. El director musical grecorruso teme que este tipo de injusticias pueda minar la creaci¨®n art¨ªstica en Rusia. "La gente empezar¨¢ a tener miedo en un trabajo que implica libertad de expresi¨®n y b¨²squeda de nuevos lenguajes", a?ade. Currentzis recuerda su amistad y sus colaboraciones con el director de la pel¨ªcula Leto en el festival Territorio de Mosc¨². "Ambos crecimos juntos como artistas y lo que le est¨¢ ocurriendo es superhorrible", remata.
Currentzis dedica agosto a grabar y tocar las sinfon¨ªas de Beethoven. ¡°Para m¨ª es el compositor m¨¢s avanzado¡±, proclama. Tras debutar en los Proms el pasado 28 de julio, est¨¢ en Viena dedicado a la grabaci¨®n para Sony Classical de la Quinta y la S¨¦ptima . Entre el 15 y 23 de agosto har¨¢ el ciclo completo de las nueve sinfon¨ªas en el Festival de Salzburgo y terminar¨¢, el 25, en el Musikfest de Bremen. ¡°Creo que no hay grandes tradiciones interpretativas en Beethoven¡±, opina sin ocultar su admiraci¨®n por las grabaciones de Roger Norrington y John Eliot Gardiner. ¡°En mis interpretaciones pretendo dejar de lado la forma en que se ha tocado esta m¨²sica en los ¨²ltimos 200 a?os. Hablar mentalmente con ese sordo loco para comprender lo que quer¨ªa. Y recordar que el compositor de la Novena sinfon¨ªa fue el mismo que escribi¨® la Gran fuga¡±, se?ala.
Para el director grecorruso grabar discos es una misi¨®n. ¡°Despu¨¦s nos encanta escucharlos en un entorno especial¡±, confiesa. Se implica intensamente en el proceso de grabaci¨®n. ¡°Pienso que la industria musical puede ser una f¨¢brica, pero tambi¨¦n una boutique cuando se hacen bien las cosas¡±, admite. En ese af¨¢n artesanal ha optado por rescatar viejos procedimientos fonogr¨¢ficos. ¡°Para nuestra grabaci¨®n en Viena vamos a utilizar tecnolog¨ªa puramente anal¨®gica con cintas. Estoy convencido de que volveremos al vinilo. Creo que con el mundo digital e Internet se ha perdido la belleza y el romanticismo del pasado¡±, sostiene.
Ese romanticismo fue crucial para Currentzis cuando decidi¨® abandonar su Atenas natal, en 1994, para completar sus estudios musicales en San Petersburgo. ¡°Con la ca¨ªda del muro de Berl¨ªn todos los romanticismos que exist¨ªan en Europa se vinieron abajo. Se perdi¨® la energ¨ªa para luchar por algo¡±, opina. De Rusia le atrajo su tradici¨®n orquestal, pero tambi¨¦n su esp¨ªritu. ¡°Necesitaba encontrar un pa¨ªs donde perdurase el romanticismo. Un lugar con dificultades tras la ca¨ªda del tel¨®n de acero. Y San Petersburgo me pareci¨® superrom¨¢ntica¡±, reconoce. All¨ª se decant¨® por la direcci¨®n orquestal, aunque iba para compositor. ¡°Cuando descubr¨ª que ve¨ªa cosas en las partituras que otros no ve¨ªan, y que a m¨ª me parec¨ªan obvias, me dijeron que deb¨ªa dedicarme a la direcci¨®n orquestal¡±, recuerda. Sigue componiendo, aunque se niega a mostrar sus creaciones. ¡°No quiero que se acepten porque soy un director famoso. Quiz¨¢ deber¨ªa hacer carrera como compositor con otro nombre¡±, admite.
Currentzis actuar¨¢ en Madrid con musicAeterna a finales de noviembre, dentro de los ciclos de Iberm¨²sica. Ser¨¢ su regreso a la capital tras las actuaciones que dirigi¨® en el Teatro Real en 2012 y 2013. ¡°Me hace mucha ilusi¨®n volver a Madrid, pues tengo recuerdos muy bellos y una gran nostalgia de los meses que pas¨¦ all¨ª¡±, reconoce. No oculta su emoci¨®n al recordar a Gerard Mortier: ¡°Lo que hizo en Madrid fue incre¨ªble. Todav¨ªa se respira all¨ª otro aire gracias a ¨¦l¡±. Dirigir¨¢ la Cuarta sinfon¨ªa de Mahler, otro compositor que centra sus ansias creativas. Acaba de grabar su Primera sinfon¨ªa y en octubre Sony Classical lanzar¨¢ su grabaci¨®n de la Sexta, con la que est¨¢ encantado: ¡°Creo que es el mejor disco que hemos grabado hasta el momento¡±, revela. Despu¨¦s llegar¨¢ Wagner y su ¨®pera Trist¨¢n e Isolda. ¡°Necesito vivir en la atm¨®sfera de Trist¨¢n los dos pr¨®ximos a?os para llegar hasta el ADN del compositor¡±, concluye.
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