Bailar en la oscuridad

Escrib¨ªa Herv¨¦ Guibert tras ver Caf¨¦ M¨¹ller, una de las m¨¢s c¨¦lebres piezas de Pina Bausch, estrenada en 1985, que ese ritual de cuerpos danzantes sobre un escenario sembrado de obst¨¢culos serv¨ªa para recordar la realidad y vitalidad de la herida interior que cada uno de nosotros lleva en su coraz¨®n. En Con el viento, la debutante Meritxell Colell, formada en el terreno del documental, asocia la memoria de Caf¨¦ M¨¹ller a los tormentos interiores de su personaje protagonista, interpretado por la bailarina y core¨®grafa M¨®nica Garc¨ªa. La pel¨ªcula se abre con planos en principio indescifrables que acaban revelando la violencia y la convulsi¨®n de un cuerpo danzante. En las ¨²ltimas im¨¢genes de la pel¨ªcula, M¨®nica Garc¨ªa improvisa una danza en un paisaje monta?oso de la provincia de Burgos. De los cortantes y elusivos planos del comienzo se ha pasado a una imagen abierta, con el cuerpo de la bailarina dialogando con el paisaje natural: en la distancia entre unas y otras im¨¢genes se cifra el recorrido emocional de la protagonista de esta historia de reconciliaci¨®n y expiaci¨®n sobre el tel¨®n de fondo de un universo y una forma de vida que desaparecen.

Tras recibir aviso sobre la inminente muerte de su padre, M¨®nica vuelve de su autoexilio argentino al remoto pueblo de sus or¨ªgenes para acompa?ar a su anciana madre en el duelo y gestionar la venta de la casa familiar. Por supuesto, hay cuentas familiares pendientes: los reproches a la que se fue lejos, que cort¨® lazos afectivos y no acompa?¨® a sus seres queridos mientras la enfermedad avanzaba y la muerte se iba haciendo presente. Una madre, dos hijas y una nieta que alimenta tambi¨¦n un anhelo de emancipaci¨®n conforman el grupo humano de esta pel¨ªcula, fr¨¢gil y hermosa, que prefiere observar ¨Cy revelar- a dramatizar ¨Co impostar-.