La RAE recomienda desdoblar rey y reina en la Constituci¨®n
El informe elaborado por la Academia sobre lenguaje inclusivo a petici¨®n del Gobierno mantiene la doctrina de g¨¦nero neutro, pero con algunas excepciones
La palabra reina aparece en la Constituci¨®n de 1978 con un solo cometido: como consorte del rey. En el informe que cuatro fil¨®logos de la Real Academia Espa?ola (RAE) someter¨¢n al pleno de la instituci¨®n la pr¨®xima semana, recomiendan que en los art¨ªculos referentes a la corona se opte por rey o reina y pr¨ªncipe o princesa. El resto de la norma que rige la democracia apenas necesita cambios en ese sentido seg¨²n los criterios de los expertos. As¨ª se lo remitir¨¢n al Gobierno para que act¨²e como considere oportuno despu¨¦s de que lo aprueben en el pleno de la instituci¨®n.
Cuando en la jura del Consejo de ministros, gran parte de los miembros del Gobierno desdoblaron su compromiso ante el rey con aquella doble alusi¨®n a sus funciones, los miembros de la Real Academia Espa?ola supieron al instante que se plantear¨ªa el debate del lenguaje inclusivo. De hecho fue una de las primeras iniciativas que tom¨® la vicepresidenta y encargada de Igualdad, Carmen Calvo.
El 10 de julio, Calvo anunciaba en el Congreso de los Diputados que hab¨ªa solicitado un informe a la RAE para que estudiaran, dijo, ¡°la adecuaci¨®n de la Constituci¨®n espa?ola a un lenguaje inclusivo, correcto, verdadero y acorde a la realidad de una democracia que transita entre hombres y mujeres¡±. Se adelant¨® la vicepresidenta al hecho en s¨ª. Porque el encargo lleg¨® por carta al despacho del entonces director de la RAE, Dar¨ªo Villanueva, semanas despu¨¦s.
En la petici¨®n ya oficial, Calvo especificaba que las cuestiones de g¨¦nero y los asuntos del lenguaje inclusivo eran una de las prioridades del actual Gobierno y que, por tanto, reclamaban a los miembros de la instituci¨®n un informe al respecto. Inmediatamente despu¨¦s, Villanueva nombr¨® una comisi¨®n paritaria de cuatro miembros para elaborarlo. Los responsables elegidos fueron Paz Battaner, In¨¦s Fern¨¢ndez-Ord¨®?ez, Pedro ?lvarez de Miranda e Ignacio Bosque.
La doctrina Bosque
Cuando a los miembros de la RAE se les pregunta sobre el debate de la lengua inclusiva, todos suelen remitir a una posici¨®n com¨²n: la doctrina Bosque. As¨ª la llaman sin apenas importarles que el t¨¦rmino doctrina se adec¨²e poco al siglo XXI.
Pero lo hacen para evitar pol¨¦micas inc¨®modas cara a la luz p¨²blica que, sin embargo, son materia recurrente ¨Cy muy exacerbada, a veces- en los plenos. La doctrina Bosque qued¨® fijada en el informe de Ignacio Bosque Sexismo ling¨¹¨ªstico y visibilidad de la mujer. Fue elaborado para llamar la atenci¨®n acerca de las gu¨ªas de lenguaje no sexista publicadas en por diversas instituciones. Lo suscribieron los 26 acad¨¦micos de n¨²mero y sostiene que, si bien existen usos verbales sexistas, las recomendaciones de dichas gu¨ªas difunden usos ajenos a las pr¨¢cticas de los hablantes, conculcan normas gramaticales, anulan distinciones necesarias y obvian la realidad de que no hay discriminaci¨®n en la falta de correspondencia entre g¨¦nero y sexo. Su publicaci¨®n levant¨® fuertes debates que no se han diluido, sino reafirmado por parte de varios colectivos en diferentes ¨¢mbitos.
Sin embargo, la RAE no ha movido p¨²blicamente su posici¨®n, algo que vuelve a hacer ahora con el nuevo informe que elevar¨¢n en febrero al Gobierno.
Los cuatro han dedicado el verano y el oto?o a su elaboraci¨®n. En diciembre lo tuvieron listo, pero los plenos del pasado mes estuvieron dedicados a la elecci¨®n del nuevo director, Santiago Mu?oz Machado. En su primera comparecencia, este anunci¨® que el informe estaba preparado y que lo someter¨ªa al debate en el pleno a lo largo de enero. Una vez aprobado, lo elevar¨¢n al Gobierno y, seg¨²n el criterio de la RAE, debe ser el ejecutivo quien decida qu¨¦ hacer con ¨¦l.
El debate en el pleno est¨¢ previsto para el pr¨®ximo jueves 31 y se esperan cambios, matizaciones y un debate vivo sobre la propuesta. Pero el contenido del informe elaborado con el consenso total de los cuatro encargados de hacerlo apenas sugiere modificaciones en la norma. Ninguno de ellos desvela su contenido, pero, seg¨²n ha podido saber EL PA?S, lo m¨¢s relevante ser¨ªan los aspectos sugeridos acerca del T¨ªtulo II: la corona.
En este se alude casi a una ¨²nica posibilidad como figura encargada de la monarqu¨ªa parlamentaria: el rey. Por tanto, los acad¨¦micos sugieren que se desdoble el t¨¦rmino en ambos g¨¦neros: rey y reina. Lo mismo aplican para la l¨ªnea de sucesi¨®n. En el art¨ªculo 57 del mismo T¨ªtulo II se alude al pr¨ªncipe heredero. En este caso, la realidad ha ido por delante con la princesa Leonor y deber¨ªa ser reconocida as¨ª en el texto.
El resto del estudio sustenta la doctrina de la RAE en cuestiones de g¨¦nero. Fue fijada en el informe que hizo Ignacio Bosque bajo el t¨ªtulo de Sexismo ling¨¹¨ªstico y visibilidad de la mujer en 2012. Sirve como base a la posici¨®n de la Academia en todo el debate que se ha producido a lo largo de los ¨²ltimos a?os. En el mismo, Bosque indica que la estructura gramatical del espa?ol existe un g¨¦nero no marcado e inclusivo, que suele ser el masculino. Desdoblarlo afectar¨ªa a la econom¨ªa del lenguaje, cree.
Los miembros de la comisi¨®n han hecho adem¨¢s un estudio comparado con varias constituciones europeas e hispanoamericanas para ver c¨®mo se trata el lenguaje inclusivo en las mismas. La espa?ola, al parecer, no sale mal parada.
La RAE trata de mantenerse al margen como instituci¨®n de las pol¨¦micas que suscita el asunto. Pero debaten de forma habitual estos temas y se han sensibilizado acerca de algunas corrientes. La encarada de la elaboraci¨®n del Diccionario es Paz Battaner y en los ¨²ltimos a?os se ha realizado un peinado en multitud de definiciones que resultaban ofensivas y fuera de lugar.
La iniciativa del Gobierno les ha tocado de lleno y en la comisi¨®n formada se han reunido diferentes sensibilidades. La m¨¢s abierta a estas cuestiones es In¨¦s Fern¨¢ndez-Ordo?ez, que ha tenido diferentes encontronazos en los plenos con otros compa?eros m¨¢s cerrados a la flexibilidad del lenguaje en cuestiones de g¨¦nero. Es la acad¨¦mica m¨¢s joven del pleno y su empuje se nota. Pero no comenta el contenido del informe, m¨¢s all¨¢ de esto: ¡°La Constituci¨®n est¨¢ redactada en un tipo de lenguaje formal y administrativo que no es el del habla com¨²n de la calle en el que te puedes tomar m¨¢s licencias. Tiene sus propios c¨®digos, m¨¢s r¨ªgidos¡±.
Pedro ?lvarez de Miranda, autor de El g¨¦nero y la lengua (Turner), avisa de que no habr¨¢ grandes sorpresas que difieran de lo que en su d¨ªa plante¨® Bosque. ¡°Nuestro acuerdo en su d¨ªa respecto a los asuntos inclusivos fueron claros: la lengua no es materia ideologizable¡±, asegura el acad¨¦mico.
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