La Polla Records: ¡°Hace tiempo que nos vendimos al capital¡±
El grupo vasco vuelve 16 a?os despu¨¦s con un disco recopilatorio, un nuevo tema y una gira por grandes recintos de Espa?a y Latinoam¨¦rica
Los componentes de La Polla Records se han vuelto a juntar, y hay algo que a Evaristo P¨¢ramos, su cantante, le reconcome: "Tiene cojones que mis letras tengan ahora m¨¢s sentido que en el siglo pasado. Significa que estamos yendo para atr¨¢s. Lo normal ser¨ªa que mis canciones hubieran dejado de tener sentido, y yo me hubiera puesto a tocar un instrumento".
La banda referencial del punk patrio canta "contra el capitalismo, contra el fraude de los pol¨ªticos, contra la droga publicitaria, contra la violencia machista". Su vocalista lamenta: "Y todo esto est¨¢ hoy peor a¨²n que cuando lo dejamos". Los cinco miembros de La Polla Records, tres de ellos originales, regraban las canciones de sus tres primeros discos (Salve, Revoluci¨®n y No somos nada), y lanzan un recopilatorio, Ni descanso, ni paz!, en el que incluyen un tema nuevo, el que da nombre al ¨¢lbum, un tratado de guitarras tan afiladas como su letra: "El sistema est¨¢ muerto / la tercera guerra mundial dura demasiado tiempo / la tecnolog¨ªa nos ha derrotado / el capitalismo te va a devorar". La Polla en estado puro. Y ya han anunciado fechas para una gira, en la que cambian los locales y garitos por los grandes recintos: el 21 de septiembre en la plaza de toros de Valencia; el 12 de octubre en el Wizink Center de Madrid; el 19 en el Bilbao Arena, y el 26 de octubre en el Palau Sant Jordi de Barcelona. Les acompa?ar¨¢ El Drogas, de Barricada, y la gira se extender¨¢ posteriormente por varios pa¨ªses de Latinoam¨¦rica, donde tienen una nutrida parroquia.
A sus 59 a?os, P¨¢ramos es consciente de que no tiene la energ¨ªa de sus inicios a finales de los setenta, aunque adelanta que sus conciertos ser¨¢n todo lo explosivos que puedan, mientras el cuerpo aguante. "Yo empiezo a tope. Y si a la cuarta canci¨®n veo que no doy m¨¢s de m¨ª, pues me siento y ya est¨¢. No ser¨¢ la primera vez que doy un concierto en una silla, con una mesa delante y una garrafa de vino".
A la pregunta de por qu¨¦ han vuelto a grabar las canciones de sus tres primeros discos, en vez de remezclarlos, como suelen hacer otras bandas resucitadas, P¨¢ramos es tajante: "Las discogr¨¢ficas que ten¨ªan nuestros temas ya hab¨ªan hecho remezclas, y son una puta mierda".
El cantante es consciente de que llegar¨¢n algunas cr¨ªticas por su cambio a los grandes estadios. "No es muy diferente de lo que hac¨ªamos antes. No s¨¦ qu¨¦ d¨ªa sucedi¨®, pero yo ya me vend¨ª al capital cuando empec¨¦ a tocar en discotecas donde te cobran una entrada, no se puede fumar, hay seguratas y unas vallas de protecci¨®n delante del escenario". Reconoce que le gustar¨ªa volver al circuito de gaztetxes y casas okupa de sus inicios, pero por el momento, no lo ve posible. "Me encantar¨ªa si no tuviera problemas de dinero. Pero hoy por hoy, no me lo puedo permitir". Con todo, lleva a gala el ser de pueblo (el grupo se form¨® en Salvatierra, ?lava), como recuerda varias veces durante la conversaci¨®n. "Si me hubiera ido a vivir a una gran capital no habr¨ªa sobrevivido, y no estar¨ªamos hablando ahora. Yo de joven la liaba mucho, era muy expansivo. Y cuando eres muy expansivo y hay mucha gente a tu alrededor, te terminas tocando y llegan los l¨ªos".
P¨¢ramos es consciente de que la libertad de expresi¨®n est¨¢ en tela de juicio desde la ley mordaza, que no exist¨ªa cuando lo dejaron en 2003. Y que algunas de sus letras puede que no pasen el filtro. "No vamos a cambiar ni una coma. Pero yo estoy acostumbrado a meterme en l¨ªos", dice, en relaci¨®n a cuando lo retuvo la Guardia Civil el a?o pasado despu¨¦s de dar un concierto en Jerez con su otro grupo, Gatillazo, porque, presuntamente, insult¨® a los agentes all¨ª presentes. "Hab¨ªan venido 400 personas a vernos, y lo dimos todo. No pienso en las consecuencias. Tampoco en si tendremos represalias por nuestras letras, como Valtonyc o Def Con Dos". Y zanja: "Vamos a tirar p'alante, y ya se ver¨¢".
Babelia
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