Un edificio del arquitecto Antonio Palacios se derrumba en Galicia

A principios de abril, el tejado a cuatro aguas del edificio m¨¢s olvidado de Antonio Palacios?(1874-1945) en Galicia, probablemente tambi¨¦n el m¨¢s abandonado de este arquitecto en Espa?a, se derrumb¨® por completo. Se vino abajo aparatosamente, arrastrando adem¨¢s en su ca¨ªda los tabiques y el corro¨ªdo suelo del primer piso y sepultando de cascotes el s¨®tano, una vieja planta de embotellado. Lo hizo a lo grande, como si quisiera pedir socorro y que le escuchasen de una maldita vez. La Fuente de Troncoso fue la primera surgencia de Mondariz-Balneario (Pontevedra) analizada e identificada en el siglo XIX por sus propiedades medicinales, pero tambi¨¦n la que siempre corri¨® peor suerte. Desde hace muchos a?os las arcadas del cuerpo s¨®lido, construido en granito, permanecen tapiadas; uno de los muros se agrieta y se abomba; y la gran marquesina de forja que envuelve la fuente se consume.

El edificio es propiedad de la actual empresa Balneario de Mondariz, SA, y seg¨²n afirma ahora el alcalde de la localidad hace casi dos a?os que se empez¨® a negociar la cesi¨®n al consistorio, que tiene "un proyecto de rehabilitaci¨®n". Pero el engranaje burocr¨¢tico se mueve lento y el desplome se le ha adelantado. Para el gobernante de Mondariz-Balneario, el ayuntamiento m¨¢s peque?o en superficie de Espa?a, el suceso no ha sido ninguna sorpresa. "Sab¨ªa que iba a pasar, era algo que intu¨ªamos", confiesa Jos¨¦ Antonio Lorenzo (PP), que lleva 36 a?os en el cargo. Seg¨²n el pol¨ªtico, lo que ralentiz¨® el traspaso fueron una serie de "papeles" que todav¨ªa no tiene en sus manos y que son necesarios para que la compa?¨ªa hotelera y el Ayuntamiento vayan "al notario". Entonces, explica, "la Fuente de Troncoso pasar¨¢ a ser de dominio p¨²blico", algo que, aventura, puede ser un hecho "en mes y medio".

El inmueble est¨¢ catalogado y protegido sobre el papel. Seg¨²n confirma la Conseller¨ªa de Cultura, Troncoso figura como "elemento de la arquitectura civil con protecci¨®n integral", as¨ª que "el pasado 3 de mayo" Patrimonio remiti¨® "un escrito dirigido al titular recordando sus obligaciones legalmente establecidas". El propietario, avisa la Xunta, "es responsable del mantenimiento" de un bien que integra el patrimonio cultural de Galicia y est¨¢ "obligado a conservarlo, mantenerlo y custodiarlo debidamente, y a evitar su p¨¦rdida, destrucci¨®n o deterioro". La dejaci¨®n de estos deberes est¨¢ "tipificada como infracci¨®n" y "puede suponer la apertura de un proceso sancionador", advierte Cultura, aunque no aclara en su respuesta a este diario si lo va a hacer o no.

Pero la empresa se defiende. "La cesi¨®n se formalizar¨¢ antes del verano" y ser¨¢ "por 20 a?os", informan fuentes del Balneario de Mondariz. "La propiedad y el Ayuntamiento est¨¢n desde hace tiempo trabajando con tal fin" y la Administraci¨®n local se encargar¨¢ de "su reforma y posterior mantenimiento". "Con el resto de la villa termal hist¨®rica ya recuperada" (despu¨¦s de la decadencia en que se sumi¨® el conjunto tras la Guerra Civil), la empresa "atraves¨® recientemente un concurso de acreedores del que consigui¨® salir con mucho esfuerzo" y la "prioridad", se justifican los mismos interlocutores, "ha sido siempre la de mantener el empleo de las m¨¢s de 200 familias que dependen directamente del Balneario, motor casi exclusivo de toda la comarca".

Situado a menos de un kil¨®metro de su manantial mellizo, el de G¨¢ndara, el venero de Troncoso (tambi¨¦n conocido como Saidoiro) vio c¨®mo entre finales del XIX y principios del XX se erig¨ªa en torno a su hermano la mayor y m¨¢s suntuosa villa termal de Galicia, un referente mundial comparado entonces con Vichy al que viajaban a tomar las aguas espa?oles de post¨ªn y muchos portugueses, brit¨¢nicos o americanos a bordo de trasatl¨¢nticos que atracaban en Vigo. Los promotores del complejo, los hermanos Enrique y Ram¨®n Peinador, encargaron los se?oriales inmuebles a Antonio Palacios y a otro afamado arquitecto del momento, Jenaro de la Fuente, autor del Gran Hotel, que ardi¨® en 1973 y ahora est¨¢ reformado como apartamentos de lujo.

Moneda propia para uso de los ag¨¹istas

A Palacios le encomendaron el Sanatorio, el edificio Baranda para albergar el teatro y los pabellones llamados a ennoblecer las dos fuentes que brotaban burbujeantes del subsuelo con sus respectivas plantas embotelladoras. El c¨¦lebre arquitecto, nacido en el municipio de O Porri?o, a menos de 20 kil¨®metros del balneario, concibi¨® sus proyectos como un conjunto y repet¨ªa formas y elementos identificables en todos ellos. Pero la Fuente de Troncoso, situada a la orilla del r¨ªo Tea, el afluente del Mi?o que acompa?a el pueblo, nunca se remat¨® por completo y adem¨¢s sufri¨® toda su vida el castigo de las crecidas, porque el manantial surge a solo 43 cent¨ªmetros sobre el nivel medio del cauce.

No se han encontrado los planos firmados por Palacios, pero se sabe que proyect¨® y dirigi¨® la obra por las noticias del semanario La Temporada que se imprim¨ªa en el Balneario. Las publicaciones peri¨®dicas; adem¨¢s del uso de una moneda propia, los peinadores; o el trazado de un tranv¨ªa desde la villa termal a Vigo cuyas obras llegaron a empezarse son algunas de las se?as del esplendor que alcanz¨® el pueblo.

En 1908, el propio arquitecto describ¨ªa en el peri¨®dico su plan para Troncoso, "con una elegante marquesina de hierro y cristal", balc¨®n cubierto en torno a la fuente y "dos c¨®modas escaleras de hierro, art¨ªsticamente decoradas". "A continuaci¨®n de la marquesina", segu¨ªa el artista, "est¨¢n los talleres del embotellado que en su arquitectura recordar¨¢n los de la fuente de G¨¢ndara". Estas dependencias, donde tambi¨¦n se ubicaban, en el piso superior, una cocina, dos dormitorios, una sala y un despacho para el administrador, son las que han quedado destruidas y sepultadas por el derrumbe.

"No puedo consentir que esto se venga abajo", protesta Alberte Reboreda, arque¨®logo y vecino que en estos momentos busca apoyos en el mundo de la cultura para salvar Troncoso. Ya ha logrado la visita de la direcci¨®n de la Escola de Restauraci¨®n e Conservaci¨®n de Bens Culturais de Galicia y de una representante del Consello da Cultura (¨®rgano asesor de la Xunta). Tambi¨¦n el respaldo por escrito del Departamento de Historia del Arte de la Universidade de Santiago, que destaca la "relevancia hist¨®rico-art¨ªstica" de la fuente en "el conjunto del Balneario de Mondariz y de la obra de Antonio Palacios".

Aunque ya aparec¨ªan citadas en el Diccionario Geogr¨¢fico de Madoz (1848), quien encarg¨® los primeros an¨¢lisis y descubri¨® para el mundo las virtudes de las "aguas bicarbonatado-s¨®dicas" de Troncoso fue el cura local Domingo Blanco Lage en 1862. Una d¨¦cada despu¨¦s, el m¨¦dico Enrique Peinador compr¨® los terrenos cenagosos donde afloraba el manantial de G¨¢ndara, y su familia pleite¨® contra el Ayuntamiento, durante 33 a?os, por los derechos de explotaci¨®n y la titularidad de Troncoso. Dur¨® tanto el litigio que los inversores fueron construyendo su sue?o palaciego del gran ¡°establecimiento de aguas minerales ac¨ªdulo alcalinas carb¨®nico ferruginosas¡± en torno a la segunda fuente y de espaldas a O Saidoiro, como plantea Mar¨ªa Jes¨²s del Castillo en su tesis doctoral por la Complutense. En 1905 los Peinador ganaron la batalla al Ayuntamiento y despu¨¦s encomendaron a Palacios las obras para dar prestancia a los dos surtidores, pero Troncoso ya siempre qued¨® eclipsado.

"Lo escogido de la inteligencia espa?ola" en el "Vichy galaico"

S. R. P.

Entre finales del XIX y principios de XX, el Balneario de Mondariz fue creciendo en fama y en pompa hasta convertirse, como escribi¨® Emilia Pardo Baz¨¢n, en el "Vichy galaico" al que acudia "lo escogido de la inteligencia espa?ola". Entre sus ag¨¹istas, relataba la autora, se contaban "pol¨ªticos de talla, hombres de Estado, generales, infantes de Portugal y reinas morgan¨¢ticas". "Quiz¨¢ ning¨²n otro establecimiento balneario en Espa?a motiv¨® tanta literatura", defiende en su tesis Mar¨ªa Jes¨²s del Castillo, estudiosa del imperio medicinal de los hermanos Peinador, que empezaron a construir en Mondariz su paradigma del lujo despu¨¦s de conseguir del Gobierno de la Rep¨²blica la declaraci¨®n de Utilidad P¨²blica de las aguas en 1873.

Hay cientos de citas que ilustran aquella gloria de anta?o. Gaspar N¨²?ez de Arce describ¨ªa en 1888 la "linfa cristalina" de los manantiales de Mondariz que prestaba "fuerzas al cuerpo cansado y salud al moribundo". Emilio Castelar enardec¨ªa m¨¢s el tono 10 a?os despu¨¦s y defin¨ªa la localidad como "la Compostela del enfermo, encontrada y ungida por la ciencia": "Mondariz, cuyas aguas obran milagros de resurrecci¨®n y de rejuvenecimiento", enfatizaba. "Ante nosotros se yergue un palacio versallesco", escrib¨ªa por su parte Azor¨ªn en ABC en 1905. Y hablaba de las "damas y caballeros" caminando "lentamente" bajo los pl¨¢tanos, los ¨¢rboles de sombra que siguen guiando los pasos a la fuente abandonada. El h¨¢bito de los ag¨¹istas era beber por la ma?ana en A G¨¢ndara e ir paseando por la tarde hasta la ribera del Tea para repetir la liturgia en Troncoso.