Juegos de verano

Un plan de escapada dibujado sobre la pared de una habitaci¨®n, con una regla de dibujo ocupando el lugar del sol. El forrado de un libro de texto con Aironfix. La aventura de atrapar un reflejo de luz roja sobre el muslo del primer amor. Cargadas con el poder de esa reminiscencia que devuelve el poderoso recuerdo de aquel verano que lo cambi¨® todo, porque en su curso se descubri¨® el secreto, el deseo y se empezaron a soltar las amarras de la infancia, esas im¨¢genes punt¨²an La vida sin Sara Amat, delicado debut en la direcci¨®n de la actriz y profesora de interpretaci¨®n Laura Jou, una pel¨ªcula que parece contener en su sustrato una clara y leg¨ªtima fascinaci¨®n por Estiu 1993 (2017) de Carla Sim¨®n, pero que logra encontrar su registro propio, libre de mimetismos.

Adaptaci¨®n de la tercera novela de Pep Puig, galardonada con el premio Sant Jordi en 2015, La vida sin Sara Amat cuenta una historia de iniciaci¨®n y mutuo descubrimiento en el transcurso de un verano pret¨¦rito ¨Ccualquier verano de los a?os 80- en un pueblo catal¨¢n que en la novela aparece identificado como Ullastrell, pero que la pel¨ªcula decide no localizar. El protagonista, un chico de ciudad en el umbral de la adolescencia, es el ¨²nico que contempla las tensiones que sacuden el entorno desde otra perspectiva: Sara Amat, la joven que ha desaparecido misteriosamente, ha encontrado cobijo en su habitaci¨®n, desde donde emprender¨¢ su definitiva huida del entorno familiar y rural. La interpretaci¨®n de los j¨®venes Biel Rossell Pelfort y Maria Morera y el elaborado trabajo de fotograf¨ªa de Gris Jordana fijan el tono de una pieza de c¨¢mara, m¨¢s atenta a la carga de verdad que al juego nost¨¢lgico, que solo se ve saboteada por alguna intrusi¨®n musical y puntuales secuencias demasiado explicativas.