Dudamel y Valverde, m¨²sica y letra

Algo que realmente merece la pena ha llevado a Mar¨ªa Valverde y Gustavo Dudamel a romper su discreci¨®n ante los focos y aparecer por primera vez juntos en un peri¨®dico. Concretamente en EL PA?S. Algo que lleva a este matrimonio a un escenario tambi¨¦n por primera vez en Espa?a con un objetivo concreto: la educaci¨®n. Permanece en el gen creativo de Dudamel, criado en el Sistema de Orquestas venezolano, hoy disperso con sus mejores talentos fuera del pa¨ªs, en un exilio forzoso que lo mantiene activo, cargando el arma que mejor conoce para combatir lo que no le gusta: la m¨²sica.

Para ello, este s¨¢bado 10 de agosto presentan en el Festival del Castell de Peralada (Girona), una versi¨®n de El sue?o de una noche de verano, de Felix Mendelssohn, contada por Valverde, interpretada por la Mahler Chamber Orchestra y dirigida por Dudamel. Le seguir¨¢ la Primera sinfon¨ªa de Mahler, Tit¨¢n, la obra con la que su maestro, Jos¨¦ Antonio Abreu, le inici¨® con la batuta cuando era un ni?o en Caracas.

Quiz¨¢s porque la contempla como una obra de aprendizaje, Dudamel la utiliza para formar futuros m¨²sicos. Y as¨ª ser¨¢ como junto a ellos y la Mahler Chamber, salgan a escena j¨®venes int¨¦rpretes de diversos proyectos inspirados en la educaci¨®n musical como medio para transformar la sociedad.

Es lo que ha hecho estos d¨ªas previos en el Festival de Edimburgo, una hermosa ciudad que busca su desequilibrada armon¨ªa entre torres y precipicios. All¨ª nos recibe justo antes de un ensayo con adolescentes de la Youth Orchestra of Los Angeles (YOLA), dependiente de la Filarm¨®nica de la ciudad californiana que ¨¦l lidera y el proyecto Big Noise escoc¨¦s.

Son iniciativas para las que Dudamel se reinventa en su propia esencia transformadora y pese a las trabas que el proyecto donde se form¨® sufre en la Venezuela actual. La misi¨®n de Dudamel se ha convertido desde hace dos a?os en un vaiv¨¦n n¨®mada. Algo que quiz¨¢s nunca imagin¨® cuando se convirti¨® en el s¨ªmbolo emergente de un pa¨ªs cuyo Gobierno ahora lo rechaza. Para ello, se siente absolutamente apoyado por su esposa.

Pero Mar¨ªa Valverde, en el caso de este estreno conjunto en Peralada, lo vive casi como una prueba de fuego: ¡°Espero no decepcionarle¡­ Y que no me rega?e. Agradezco que se haya arriesgado en algo as¨ª conmigo en escena¡±, comenta, sin deshacerse del todo de su timidez. ¡°A ella le va muy bien, lo lee con mucha frescura. Traslada lo que los m¨²sicos llamamos fraseo a la lectura. En este caso, texto y m¨²sica se sustentan en un hermoso di¨¢logo que une melod¨ªa y poes¨ªa¡±, comenta Dudamel.

La actriz debe subirse a las tablas de Peralada, colocarse ante el podio y contar una historia shakesperiana. Plagada de esa fantas¨ªa inici¨¢tica y una inocencia con reverso dentro de toda una f¨¢bula, tan rara en quien nos asoma a¨²n a los infiernos de la condici¨®n humana. Unos infiernos palpables en el mundo de hoy, con seres grotescos al frente de demasiados Gobiernos: ¡°Por eso es m¨¢s necesario que nunca implicarse en la formaci¨®n de los j¨®venes. Inculcarles valores que est¨¢n en la base de nuestra condici¨®n, pero no exploramos del todo y quedan ah¨ª sin que seamos capaces de desarrollar sus posibilidades¡±, asegura el m¨²sico.

Valores y autoestimas, tal como cree Valverde: ¡°No nos queremos lo suficiente. La competitividad nos ahoga. El ser humano se odia demasiado a s¨ª mismo, se desprecia por no creer estar a la altura. Por eso cae en varias trampas y por eso es m¨¢s necesario que nunca poner en valor, sin miedo a ser cursis, la palabra amor¡±.

Este par¨¦ntesis para ella en el mundo del cine puede que no vaya a ser el ¨²nico a partir de ahora. Desean desarrollar proyectos conjuntos bajo el manto de la fundaci¨®n que lleva el nombre del m¨²sico. Aunque la carrera como actriz de Mar¨ªa contin¨²a con un pie en Espa?a y otro en Am¨¦rica Latina. All¨ª est¨¢ a punto de estrenar dos pel¨ªculas en Chile: Ara?a, de Andres Wood, y Distancia de rescate, de Claudia Llosa.

Dudamel, por su parte, contin¨²a con su carrera ejemplar. Este a?o cumple su d¨¦cimo aniversario al frente de la Filarm¨®nica de Los ?ngeles, sigue siendo el director m¨¢s joven en haberse puesto al frente de la Filarm¨®nica de Viena para el concierto de a?o nuevo cuando ten¨ªa 35 a?os, en 2017, se sube a los podios de las mejores orquestas como invitado y ha revertido su necesidad de proyectos educativos centrada antes en el Sistema venezolano en iniciativas propias. El r¨¦gimen le puso la cruz. Eso le ha llevado al exilio. Pero no a claudicar ni a cruzar los brazos.

Se encuentra inmerso y muy comprometido junto a Steven Spielberg en el proyecto ¡ªahora en fase de rodaje¡ª de West Side Story. Recuperar la obra legendaria de Leonard Bernstein sobre los latinos en Nueva York es toda una declaraci¨®n de intenciones por parte del director de cine. Algo a lo que se ha sumado a conciencia Dudamel encarg¨¢ndose de la banda sonora: ¡°No es solo un remake, es una puesta al d¨ªa de lo que supuso entonces la obra en el contexto actual¡±, afirma.

Frente al ce?o fruncido y el aliento a la violencia contra los hispanos que despide el azufre de la Casa Blanca, Dudamel cree que hay que responder de manera festiva a tanto mal. Con arte. ¡°O como hicimos nosotros en Los ?ngeles cuando se empe?¨® en hacer el muro en la frontera y pisotear la dignidad de los mexicanos y centroamericanos, con un festival que ponga en valor su cultura, nuestra cultura¡±.

Pese a las persecuciones alentadas por adl¨¢teres de la supremac¨ªa blanca en el poder, Dudamel se siente bien en California. All¨ª pasa la mayor parte de su tiempo con Mar¨ªa Valverde y en familia con su hijo, Mart¨ªn, de ocho a?os. La pareja se conoci¨® en el rodaje de Libertador, con banda sonora del m¨²sico, donde la actriz encarnaba a Mar¨ªa Teresa del Toro, esposa de Bol¨ªvar.

Se casaron en Las Vegas en 2017. Desde entonces han forjado una relaci¨®n s¨®lida con sus temporadas en Espa?a, adonde se escapan de vez en cuando para visitar a los padres de Mar¨ªa en el barrio de Carabanchel, donde creci¨®, o esconderse en el pueblo de su familia, Almonacid de Zorita (Guadalajara). La actriz le ha acompa?ado en buena parte de sus ¨¦xitos, pero tambi¨¦n en la tristeza de sentirse a la fuerza fuera de su pa¨ªs. En Venezuela, Dudamel pas¨® de ser un s¨ªmbolo nacional a un apestado tras criticar con fuerza la opresi¨®n violenta del Gobierno a las manifestaciones en su contra. El punto de inflexi¨®n vino cuando la polic¨ªa asesin¨® a un joven m¨²sico del Sistema de Orquestas, Armando Ca?izales.

Otro de los momentos que desolaron a Dudamel fue la muerte de su maestro Abreu. No pudo entrar al pa¨ªs para asistir a los funerales y se vio obligado a rendirle homenaje con un concierto en Chile. Pero Abreu contin¨²a apegado a su palabra y su discurso. A la m¨ªnima oportunidad, lo cita. Y a diario prosigue su misi¨®n. Cuando estos d¨ªas se subi¨® varias veces al podio en Edimburgo para ponerse al frente de ensayos con j¨®venes m¨²sicos, observabas en ¨¦l, su compromiso con la tarea. El significado de una promesa.

De ah¨ª que Dudamel solo ponga una condici¨®n en los proyectos donde se involucra. ¡°Todos, de una manera u otra, deben contemplar algo que tenga que ver con la educaci¨®n¡±, afirma. ¡°Ni yo ni Mar¨ªa queremos aislarnos en nada que suponga ¨¦lite ni cerraz¨®n. Debemos asegurar el acceso y la interacci¨®n a todo lo que hacemos. Facilitar el desarrollo de artistas al m¨¢ximo nivel¡±.