La intimidad del exilio
Jos¨¦ Gaos escribi¨® en M¨¦xico estas lecciones de vida sin rencor y con la materia de los libros sabios: memoria, sentimientos, autobiograf¨ªa y pensamiento en marcha
Hay memorias tan desdibujadas en Espa?a como ostensibles en M¨¦xico: es una secuela m¨¢s del exilio intelectual de hace ya 80 a?os. Jos¨¦ Gaos es un prot¨ªpico ejemplo de semejante vigencia (mexicana) e inhibici¨®n (espa?ola). De toda su obra ensay¨ªstica, lo m¨¢s perdurable para el lector de buena fe es este formidable librito breve que se reedita ahora con anodino pr¨®logo de Jos¨¦ Luis Abell¨¢n.
Escribi¨® sus Confesiones profesionales a los 53 a?os: radiantemente calvo, con 13 a?os de exilio sin pena encima, con un franquismo imperecedero por delante y liberado por fin de la obstruccionista y dolorosa traducci¨®n de Ser y tiempo, de Heidegger (el mismo a?o de su salida, 1951, ten¨ªa que publicar tambi¨¦n una introducci¨®n al libro para salvar su inteligibilidad). Sus confesiones podr¨ªan haber sido un memorial de agravios y rencores justificad¨ªsimo, pero es una autopsia ejemplar de la vida intelectual de un profesor, solo un profesor de filosof¨ªa, sin las ¨ªnfulas de dos de sus maestros ¡ªOrtega y Zubiri¡ª y con el don de la iron¨ªa, la autoiron¨ªa y hasta la comicidad que casi nunca gasta en sus otros textos. Gaos sabe que escribe mal, lo dice m¨¢s de una vez, pero habla mucho mejor, y de eso se aprovecha en estas lecciones escritas para ser dictadas en 1953, y publicadas sin correcciones en 1958 para celebrar sus 20 a?os de docencia en M¨¦xico.
El feminismo radical que exhibe ¡ªfabricado sin duda por su ya estrecha amistad con Vera Yamuni, a quien dedic¨® el libro¡ª, la ferocidad de la alegr¨ªa del 14 de abril de 1931, la gratitud proactiva hacia un M¨¦xico hospitalario y la socarroner¨ªa que gasta para hablar de Ortega o de Heidegger son indicios caprichosos de la frescura de una confidencia p¨²blica expresada con ins¨®lita naturalidad. Los libros sabios que m¨¢s le gustaban a ¨¦l de la tradici¨®n filos¨®fica estaban hechos de la misma materia que este: memoria, sentimientos, autobiograf¨ªa y pensamiento en marcha. Salen como el sedimento de una lecci¨®n de vida sin pizarra ni tiza ni tarima. Por eso en tres o cuatro l¨ªneas se permite despachar un libro que conoce bien, Ser y tiempo, como una cr¨ªptica sumisi¨®n a la divinidad, ¡°reconociendo el dar gracias poetizando o la poes¨ªa que es una acci¨®n de gracias a qui¨¦n va a ser, si no a Dios¡±. Deb¨ªa saber lo que dec¨ªa este profesor socialista, en la ¨®rbita de Besteiro y Fernando de los R¨ªos, abocado irremediablemente a la filosof¨ªa por su ¡°epicure¨ªsmo intelectual¡± y, m¨¢s a¨²n, por su ¡°racionalismo antirreligioso¡±. Alabado sea Dios.
Suena tan veraz la voz de este ateo laico que es dif¨ªcil encontrar mejor defensa de quienes decidieron despu¨¦s de 1939 seguir siendo fieles ¡°a la gran tradici¨®n de la Espa?a liberal¡± para mimarla, reproducirla y relanzarla all¨ª donde estuviesen. Despu¨¦s de haber ido subi¨¦ndose desde 1915, a sus 15 a?os, a cada una de las novedos¨ªsimas y definitivas filosof¨ªas verdaderas ¡ªneokantismo, fenomenolog¨ªa de Husserl, el pelmazo de Zubiri, ¡°muy apretadito en su manteo¡±, Dilthey, Heidegger¡ª, acab¨® por desterrar la mera idea de una filosof¨ªa verdadera y empez¨® a discurrir por su cuenta, sin sellos de escuela, tambi¨¦n sin miedo, con humor y una sabidur¨ªa sin aparato represor ni vengativo. Ya era otro: hab¨ªa crecido desde la otra orilla y sin la torre de vig¨ªa de Ortega en el cogote.
Confesiones profesionales. Jos¨¦ Gaos. Edici¨®n de Jos¨¦ Luis Abell¨¢n. Renacimiento, 2018. 167 p¨¢ginas. 16 euros.
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