Un equilibrio dif¨ªcil
En la galardonada ¡®Terra Alta¡¯, Javier Cercas narra la historia de un ¡®mosso d¡¯esquadra¡¯ usando las herramientas de la novela negra. El dominio del ritmo narrativo queda lastrado por cierta relajaci¨®n del estilo
Javier Cercas lleva a?os defendiendo, mal que pese a algunos, que la ¡°verdad¡± es una construcci¨®n narrativa, y quiz¨¢ haya que entender Terra Alta, su adscripci¨®n y homenaje a la novela policiaca con vocaci¨®n popular, como la insistencia parad¨®jica y algo bromista en su forma de narrar de siempre: una capacidad imaginativa que se aplica con igual solvencia a los ¡°hechos reales¡± y los ¡°hechos ficticios¡±, pues ambos trabajan para la construcci¨®n de una misma verdad, la literaria. Ahora bien, cabe preguntarse cu¨¢nto del estilo de su autor se potencia y cu¨¢nto se encorseta en este coqueteo con las convenciones del g¨¦nero.
Resumamos la situaci¨®n de partida: el asesinato de una pareja catalana de la alta burgues¨ªa, due?a de un emporio en el tranquilo territorio tarraconense de Terra Alta (tranquilo quiere decir que las guerras van por dentro), pone en marcha una investigaci¨®n con la que el joven mosso d¡¯esquadra Melchor, ¡°extranjero¡± en la localidad, letraherido y lac¨®nico, no se conforma.
Pronto sabremos m¨¢s de Melchor. La novela alterna cap¨ªtulos dedicados al caso con otros centrados en el pasado del protagonista: hijo de una prostituta asesinada, delincuente, presidiario, posteriormente mosso d¡¯esquadra y h¨¦roe en los atentados islamistas de Cambrils en agosto de 2017.
Es evidente la facilidad con la que se convertir¨ªa en producto televisivo: su intriga, los calculados remansos, su doble final
Terra Alta combina ambos planos con gran capacidad. Cercas sabe que el lector r¨¢pidamente empezar¨¢ a ¡°echar de m¨¢s¡± cualquier escena retrospectiva, por lo que rompe la simetr¨ªa de la alternancia de dos tiempos justo cuando el caso policial parece estancarse. Y deja que la intriga vaya recarg¨¢ndose. E incluso en los ¨²ltimos cap¨ªtulos retrospectivos de la novela, centrados en el comienzo de la relaci¨®n de Melchor con su pareja, Olga, y le¨ªdos cuando ya todos sabemos qu¨¦ pasar¨¢ con los personajes, consiguen profundizar en algunas de las l¨ªneas de fondo de Terra Alta, como la construcci¨®n de la identidad a trav¨¦s de la literatura.
La insistencia de Cercas en la vocaci¨®n lectora de Melchor le permite que el tema de la venganza, pilar en la construcci¨®n del personaje, se sacuda algunos clich¨¦s habituales: el polic¨ªa que debe vengar la muerte de sus seres queridos y pone en duda su sentido de la justicia. Cercas entabla un di¨¢logo literario de m¨¢s calado sosteniendo durante toda la novela un juego especular con Los miserables, de Victor Hugo, con las diferentes encarnaciones de Jean Valjean, pero tambi¨¦n con su ¡°archienemigo¡±, el polic¨ªa Javert, y su complejo sentido de la ¨¦tica. A trav¨¦s de este espejo conocemos la evoluci¨®n de Melchor, tambi¨¦n su permeabilidad social y cierta ambig¨¹edad del lugar que ocupa en la historia. Pero sobre todo, analizamos el doble fondo de conceptos como odio, venganza y justicia. Otro acierto del personaje lo favorece el ambiguo lugar que ocupa, por edad, con su pareja y entre sus compa?eros de comisar¨ªa. Cercas elige a un casi treinta?ero rodeado de ¡°mayores¡± que hacen resonar ciertos acordes sutiles del protagonista: la demanda de un contacto oblicuo, por ejemplo.
Es interesante recordar, no obstante, que Melchor es un personaje de una pieza, y que en Terra Alta es la historia la que muestra sus dobleces: los sucesos del 1 de octubre en Catalu?a, los atentados islamistas e, incluso, como una nota de fondo que termina cobrando importancia, la Guerra Civil. Los sucesos hist¨®ricos contribuyen a apuntalar la ambivalencia de la narraci¨®n, nunca con el protagonismo de otras novelas de Cercas.
Es evidente la facilidad con la que Terra Alta podr¨ªa convertirse en un producto televisivo: su intriga, los calculados remansos, su doble final que quiebra las expectativas del lector. Pero desde una perspectiva estrictamente novelesca, tambi¨¦n es f¨¢cil reconocer la capacidad del autor de Anatom¨ªa de un instante para que el ritmo seco del ¡°atestado¡± en presente narrativo y la predominancia del di¨¢logo se carguen de tragedia. Cercas contagia la sensaci¨®n de necesidad con que se encadenan los actos. Por eso resultan tan antip¨¢ticas las numerosas acotaciones, presentes con la ¨²nica funci¨®n de facilitarle el trabajo a un lector no demasiado despierto.
Por ejemplo, las abundantes frases hechas: a un personaje le ¡°propinan¡± ¡°una paliza de muerte¡±, el silencio ¡°pareci¨® petrificarse¡±, ¡°un silencio ensordecedor¡±, la noticia ¡°fue un jarro de agua helada¡±, unos ojos ¡°se anegan de l¨¢grimas¡±. O las puntuales pinceladas descriptivas, algo campanudas: ¡°el reverbero del sol crea charcos temblorosos de agua ilusoria¡±, ¡°el firmamento amputado por el contorno abrupto de las sierras, cuyas laderas ondean como un mar de ¨¢rboles, tr¨¦mulo y verde¡±, ¡°las persianas entornadas frenaban el embate rabioso de la can¨ªcula¡±, ¡°nubes algodonosas, de un blanco sucio o de un gris blancuzco, que amenazan lluvia¡±.
Y es que Terra Alta mantiene un dif¨ªcil equilibrio entre el pastiche consciente, la artesan¨ªa estructural, la indagaci¨®n en algunos conflictos morales marca de la casa y una incomprensible relajaci¨®n del estilo.
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Autor: Javier Cercas.
Editorial: Planeta (2019).
Formato: tapa dura y versi¨®n Kindle (384 p¨¢ginas).
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