Apagafuegos

Scott Fitzgerald declar¨® en cierta ocasi¨®n que odiaba un sistema en el que los m¨¢s ricos siempre ten¨ªan a las mujeres m¨¢s guapas. D¨¦cadas despu¨¦s, los m¨¢s ricos no solo tienen a las m¨¢s guapas, las utilizan y las vulneran desde la convicci¨®n de la inmunidad que otorga el ser un privilegiado social y econ¨®mico. El problema, o uno de ellos, es que el derecho de pernada apenas sobrevive en un tiempo en el que las redes sociales difunden al instante cualquier desenfreno. Y ah¨ª est¨¢n como apagafuegos de lujo las agencias de relaciones p¨²blicas. Flack (Cosmo TV), es el paradigma de las mismas.

Los seis cap¨ªtulos de su primera temporada (ya est¨¢ prevista una segunda para el pr¨®ximo a?o) narran con habilidad los desprop¨®sitos de los nuevos ricos: futbolistas, cocineros-estrellas, cantantes, actores de ¨¦xito... y las contundentes maniobras de la agencia para defender y ocultar los desmanes de sus representados. El lema es n¨ªtido: ¡°sino se sabe no es un esc¨¢ndalo¡±. Y en eso est¨¢n las tres protagonistas de la serie, comandadas por una espl¨¦ndida Anna Paquin (la joven Flora de El piano) que, adem¨¢s, es productora de la serie.

No deja de ser curioso que en uno de los cap¨ªtulos, la boda de un afamado futbolista que se niega a reconocer su salida del armario, las dos primeras espadas de la agencia alertan a la becaria de que tenga mucho cuidado con ¡°las manadas¡±. Lo que las protagonistas no sab¨ªan es que su labor no siempre es necesaria. La menor de 17 a?os v¨ªctima de la violaci¨®n m¨²ltiple del llamado "caso Arandina" no puede salir de casa por la solidaridad vecinal con los agresores. Al parecer defienden el derecho a la violaci¨®n.