Anne Carson: ¡°A¨²n estoy pensando qu¨¦ es la poes¨ªa¡±
La autora canadiense, Premio Princesa de Asturias de las Letras 2020, habla con el EL PA?S poco despu¨¦s de anunciarse el galard¨®n
Poeta, ensayista, catedr¨¢tica de lenguas cl¨¢sicas y traductora, en la ra¨ªz de lo que hace Anne Carson (Toronto, 69 a?os), galardonada con el Premio Princesa de Asturias de las Letras 2020, figura el engarce con la tradici¨®n cl¨¢sica, los griegos, desde Safo, que fue quien le mostr¨® el camino cuando a los 15 a?os se tropez¨® con una edici¨®n biling¨¹e de su poes¨ªa en la librer¨ªa del pueblo donde viv¨ªa en Ontario. Lo que la subyug¨® entonces, afirma, fue el misterio de los signos en un alfabeto que no pod¨ªa comprender, pero que aun as¨ª le fascinaron. La obra de la canadiense es una suma de espacios discontinuos, un inmenso recept¨¢culo que lo abarca todo: m¨²sica, poes¨ªa, filosof¨ªa, m¨ªstica, las artes visuales y esc¨¦nicas, el c¨®mic... Nada queda fuera. En parte, esa es la raz¨®n por la que, una vez desarticulados los materiales con los que trabaja, los encierra en libros que a veces son, literalmente, cajas.
Algunas de sus obras m¨¢s conocidas dentro de su ingente producci¨®n son Eros el agridulce (1986), Cristal, Iron¨ªa, Dios (1992), verdadera revelaci¨®n, al igual que Decreaci¨®n (2005), o los libros-caja titulados Nox (2010) y Flota (2016). Es absurdo intentar compendiar en un racimo apresurado de t¨ªtulos el peso de una obra que cambi¨® la manera de entender la poes¨ªa en nuestro tiempo. Una de las facetas m¨¢s caracter¨ªsticas de su irrepetible hacer lo representan objetos textualmente tan inclasificables como la novela en verso titulada Autobiograf¨ªa de Rojo (1998) o La belleza del marido (2001), definido por su autora como un ensayo narrativo ficcional en 29 tangos.
¡°Esta ma?ana, muy temprano, fui a nadar al lago. Cuando volv¨ª a casa me encontr¨¦ con una tormenta de correos electr¨®nicos¡±
El Premio Princesa de Asturias se dio a conocer poco despu¨¦s de las seis de la ma?ana, hora de Nueva York, aunque la poeta se encuentra en Canad¨¢. Con varias horas de retraso, tras numerosos intentos de dar con ella, por fin llega un correo electr¨®nico suyo. ¡°Me siento anonadada¡±, afirmaba, pero respond¨ªa afirmativamente a la invitaci¨®n de contestar algunas preguntas. Nada m¨¢s ajeno a su forma de actuar que la transcripci¨®n del intercambio que tuvo lugar a continuaci¨®n.
¡°Esta ma?ana, muy temprano, fui a nadar al lago¡±, declaraba, evitando especificar d¨®nde se encuentra. ¡°Cuando volv¨ª a casa me encontr¨¦ con una tormenta de correos electr¨®nicos que me hab¨ªan enviado desde Espa?a, M¨¦xico y Sudam¨¦rica. Mi primera reacci¨®n fue decirle a Currie [su esposo] que me hab¨ªan dado un premio muy importante en Espa?a. ¡®No hagas caso¡¯, me dijo, ser¨¢ alg¨²n tipo de estafa de alguien que querr¨¢ sacar algo¡±.
A la pregunta de c¨®mo ha vivido estos meses, desde la llegada del coronavirus, responde: ¡°La pandemia nos ha enclaustrado en el espacio de nuestras casas, limitando nuestros movimientos a los lugares a donde podemos ir en coche. Uno de mis libros se titula La vida de las ciudades. Es la historia de c¨®mo una ciudad se inventa a s¨ª misma como ciudad. Estos d¨ªas la vida se ha contra¨ªdo sobre nosotros, y nos ha convertido a cada uno en una ciudad¡±. Fin de su primera comunicaci¨®n.
No le dedico mucho tiempo a pensar en los g¨¦neros en cuanto tales, ni mucho menos a borrarlos
Al cabo de un largo lapso de tiempo, llega la segunda tanda de respuestas. La primera conecta con lo ¨²ltimo que dijo en la entrevista que concedi¨® hace ahora algo m¨¢s de un a?o a este peri¨®dico, cuando afirm¨® que estaba trabajando en un c¨®mic: ¡°Termin¨¦ ese proyecto, es una versi¨®n del H¨¦rcules de Eur¨ªpides¡±, afirma lapidariamente, para inmediatamente matizar, subrayando as¨ª su inter¨¦s por el g¨¦nero reci¨¦n descubierto: ¡°Ya estoy trabajando en otro c¨®mic, sobre sirenas y monta?as¡±.
Sucintamente explicado, como lo requiere la ocasi¨®n, resume su idea de lo que debe ser una buena traducci¨®n, uno de los aspectos m¨¢s importantes de su hacer: ¡°Traducir es como nadar. La mejor manera de afrontarlo es zambullirse en el agua sin pensarlo y despu¨¦s tratar de avanzar en alguna direcci¨®n, siempre alej¨¢ndose lo m¨¢s posible de la orilla¡±. La siguiente pregunta tiene que ver con la descripci¨®n de su obra como una manera de desdibujar las barreras que suelen separar los g¨¦neros literarios. ¡°No le dedico mucho tiempo a pensar en los g¨¦neros en cuanto tales, ni mucho menos a borrarlos; lo que intento borrar es la preparaci¨®n, es decir, intento volver a la idea anterior a la aparici¨®n de la idea misma, y despu¨¦s procuro extraer la forma oculta, cuando todav¨ªa est¨¢ h¨²meda¡±.
?Viajar¨¢ a Espa?a a recoger el premio? ¡°Si los microbios lo permiten, s¨ª¡±
Con respecto a su manera de trabajar con distintas formas de expresi¨®n art¨ªstica (¨®pera, fotograf¨ªa, c¨®mic), precisa con cr¨ªptico laconismo: ¡°Es la idea lo que trae consigo la forma, pero hay que cogerla desprevenida¡±. Pregunta de car¨¢cter personal, que la poeta se aviene a contestar. El domingo Anne Carson cumplir¨¢ 70 a?os. ?C¨®mo se siente ante un hecho as¨ª? ¡°Como cuando los fresnos se desprenden de su corteza. Se me ha olvidado c¨®mo ser cort¨¦s, o c¨®mo mantener un exterior cort¨¦s¡±.
?Y qu¨¦ piensa de la adolescente de 15 a?os que descubri¨® a Safo en una librer¨ªa de Ontario? ¡°Estaba tan perdida que el viento la hubiera podido arrastrar en cualquier direcci¨®n, pero por alguna raz¨®n la arrastr¨® adonde me encuentro ahora. ?Qu¨¦ extra?o!¡±. Despu¨¦s de aquella revelaci¨®n... ?Qu¨¦ momentos definieron su carrera como escritora? ¡°Los m¨¢s peque?os que se pueda imaginar: encontrar la palabra adecuada, cambiar un signo de puntuaci¨®n. Nada sensacional¡±. ?Y como lectora? ¡°Los griegos, todos. H?lderlin, Virginia Woolf, Thomas Hardy, John Cage¡±. ?Viajar¨¢ a Espa?a a recoger el premio? ¡°Si los microbios lo permiten, s¨ª¡±.
Antes de la despedida, a¨²n hay tiempo para una ¨²ltima pregunta: ?Qu¨¦ es poes¨ªa? ¡°?No se le ocurre nada m¨¢s dif¨ªcil que preguntar?¡±. ¡°A¨²n lo estoy pensando¡±.
ESENCIALES
'Autobiograf¨ªa de Rojo. Una novela en verso'. Traducci¨®n de Jordi Doce. Pre-Textos.
'Hombres en sus horas libres'. Traducci¨®n de Jordi Doce. Pre-Textos.
'La belleza del marido. Un ensayo narrativo en 29 tangos'. Traducci¨®n de Andreu Jaume. Lumen.
'Decreaci¨®n'. Traducci¨®n de J. L. Clariond. Vaso roto.
'Eros. Po¨¦tica del deseo'. Traducci¨®n de Inmaculada P¨¦rez Parra. Dioptr¨ªas.
'Nox'. Traducci¨®n de Jeanette L. Clariond. Vaso roto.
'Econom¨ªa de lo que no se pierde, ensayo'. Traducci¨®n de Jeanette L. Clariond. Vaso Roto. En octubre.
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