Ocho mujeres se?alan al director de cine Ciro Guerra por acoso y abuso sexual

A veces solo falta que alguien escuche y le crea a una v¨ªctima de violencia sexual para que otras se atrevan a denunciar. A principios de este a?o la periodista y escritora colombiana Matilde de los Milagros Londo?o fue contactada a trav¨¦s de un amigo por una mujer que hab¨ªa sido acosada por el director de cine Ciro Guerra y quer¨ªa contarlo. Despu¨¦s de ella aparecieron otras voces que dec¨ªan haber pasado por lo mismo. En total, ocho mujeres que no se conoc¨ªan se encontraron en un mismo chat narrando lo que hab¨ªan sufrido por haber estado cerca del director colombiano. Este mi¨¦rcoles, la revist...

A veces solo falta que alguien escuche y le crea a una v¨ªctima de violencia sexual para que otras se atrevan a denunciar. A principios de este a?o la periodista y escritora colombiana Matilde de los Milagros Londo?o fue contactada a trav¨¦s de un amigo por una mujer que hab¨ªa sido acosada por el director de cine Ciro Guerra y quer¨ªa contarlo. Despu¨¦s de ella aparecieron otras voces que dec¨ªan haber pasado por lo mismo. En total, ocho mujeres que no se conoc¨ªan se encontraron en un mismo chat narrando lo que hab¨ªan sufrido por haber estado cerca del director colombiano. Este mi¨¦rcoles, la revista digital Volc¨¢nicas revel¨® sus testimonios y apenas unas horas despu¨¦s han ido emergiendo m¨¢s historias que tienen en com¨²n el acoso por parte de Guerra, cuenta Matilde, quien junto a la escritora Catalina Ruiz-Navarro se dedic¨® durante varios meses a seguir los relatos de las v¨ªctimas, revisar mensajes de texto y contrastar algunos hechos con personas que pod¨ªan soportar las denuncias: son siete por acoso y una por abuso sexual en hechos ocurridos entre 2013 y 2019, en el marco de eventos como el Festival de Cine de Cannes, el Colombian Film Festival y el Festival Internacional de Cine de Cartagena. El cineasta ha negado las acusaciones y ha anunciado que acudir¨¢ a los tribunales para defenderse.

¡°Los casos demuestran que hay un patr¨®n, un comportamiento que se ha repetido por muchos a?os¡±, dice Matilde. Los testimonios revelados est¨¢n llenos de detalles y se sit¨²an en ciudades espec¨ªficas: Bogot¨¢, Medell¨ªn, Cartagena, Ciudad de M¨¦xico, Nueva York y Berl¨ªn. Todos los relatos coinciden en que el director, cuya pel¨ªcula El abrazo de la serpiente fue nominada a un Oscar en 2016, usa su prestigio para intimidar a las agredidas. ¡°?T¨² sabes que voy a ser uno de los jurados en Cannes, de la Semana de la Cr¨ªtica?¡±, le preguntaba a una de ellas despu¨¦s de haber intentado besarla a la fuerza y antes de volverlo a hacer con m¨¢s agresividad, seg¨²n uno de los testimonios.

En la investigaci¨®n no aparecen los nombres reales de las v¨ªctimas y ninguna denuncia fue llevada a la justicia penal. ¡°Hay un camino [al denunciar] de revictimizaci¨®n con un costo en sus carreras profesionales que no est¨¢n dispuestas a pagar¡±, explica Matilde. La abogada y especialista en g¨¦nero, Viviana Boh¨®rquez, agrega que el temor de hacer una denuncia es extendido en Colombia y una de las razones para que as¨ª sea es la misma ley: ¡°El delito de acoso en Colombia es muy general y hay pocas sentencias¡±. Este a?o, Boh¨®rquez y su equipo han llevado seis denuncias por este delito ante la Fiscal¨ªa y ninguna ha prosperado. ¡°Al menos el 70% de los jueces son hombres, que todav¨ªa creen que es exagerado hablar de abuso cuando se toca una pierna o se besa a alguien a la fuerza¡±, se?ala la abogada, que, sin embargo, cree que escuchar las denuncias de las mujeres, como las que se?alan a Ciro Guerra, est¨¢ abriendo una conversaci¨®n que podr¨ªa llevar a Colombia a ver su propio Me Too.

¡°Recuerdo estar en la cama aprisionada por el man [Ciro Guerra] y sintiendo el peso de su cuerpo; en un momento intent¨¦ resistirme, y ¨¦l me cogi¨® la cabeza con violencia. Todo sigue siendo muy reciente y muy vivo, y no soy capaz de contar m¨¢s. Por eso he dudado tanto en compartir este testimonio, no quiero revivirlo en la cabeza, ni encontrarme con m¨¢s recuerdos, ni contestar preguntas, ni sentir que tengo que rendir cuentas¡±, se lee en el testimonio de la mujer que denuncia haber sido abusada sexualmente por Guerra. Los hechos, seg¨²n la v¨ªctima, ocurrieron en noviembre del a?o pasado en Bogot¨¢. Hay testigos que con sus relatos respaldan la denuncia, que estuvo guardada por varios meses ante la intimidaci¨®n del director. ¡°Me dijo: ¡®Este va a ser nuestro secreto y espero que as¨ª sea¡¯. Yo le dije que s¨ª, porque me daba miedo que se pusiera a hacerme da?o profesionalmente¡±, cuenta Adriana, como la nombran en la publicaci¨®n, que tambi¨¦n revela el acoso del director incluso en medio de rodajes.

¡°En este caso se suma un nuevo elemento al patr¨®n descrito: el contexto laboral, donde Guerra se encuentra en una clara posici¨®n de poder sobre la acosada¡±, se?alan las autoras del reportaje, en el que citan al colectivo RecSisters, que recoge informaci¨®n sobre la violencia de g¨¦nero en el gremio audiovisual de Colombia, y que en una encuesta realizada encontraron que el 81% de las entrevistadas ha sufrido acoso sexual laboral y el 84% decidi¨® no denunciar, una de ellas afirm¨®: ¡°Cuando los productores lo supieron solo me dijeron que me acostumbrara, que no pod¨ªa andar quej¨¢ndome por eso¡±. Seg¨²n el mismo estudio, las que denunciaron se enfrentaron a burlas, despidos, ser juzgadas como problem¨¢ticas, veto y marginaci¨®n en el gremio. Los abusos m¨¢s graves y las violaciones normalmente no son denunciados por miedo a ser despedidas o excluidas, seg¨²n el estudio del colectivo RecSisters.

¡°Cuando una mujer habla con nombre propio se le cuestiona su vida privada, nadie le cree, en lugar de cuestionar al agresor. No solo pasa en Colombia, en general falta solidaridad con las v¨ªctimas¡±, apunta Boh¨®rquez.

Horas despu¨¦s de la publicaci¨®n, el cineasta emiti¨® un comunicado y difundi¨® un v¨ªdeo en el que rechaza todas las acusaciones. ¡°Me permito manifestar que no he cometido ninguna de las faltas de las que se me se?ala, y que no tengo otra opci¨®n para limpiar mi nombre, que recurrir a las v¨ªas legales¡±, dice Guerra, quien se encuentra en Ciudad de M¨¦xico, donde antes de las restricciones decretadas por la pandemia de coronavirus hab¨ªa empezado a rodar una serie sobre Hern¨¢n Cort¨¦s y Moctezuma. El director, que lleva a?os encadenando ¨¦xitos de la cr¨ªtica, afirma que los relatos son falsos y califica a los ocho testimonios como ¡°horrorosas, mentirosas y malintencionadas palabras¡±. ¡°Les pido que por favor antes de juzgar, todos esperemos que la justicia eval¨²e y arroje total claridad de los supuestos hechos mencionados¡±, asegura.