Sin gamberros, acabar¨ªamos tom¨¢ndonos la pol¨ªtica en serio
Alberto Gonz¨¢lez V¨¢zquez ridiculiza la banalidad de la pol¨ªtica como lo hac¨ªamos los ni?os: pintando bigotones a las fotos del peri¨®dico
Un amigo humorista sostiene que la etiqueta de humor inteligente solo es una aspiraci¨®n laboral en su gremio. Cuando te ganas esa categor¨ªa -argumenta-, ning¨²n empleador cuestiona tu trabajo y puedes dedicarte a hacer y decir las gamberradas m¨¢s zafias que se te ocurran. Como son expresiones de humor inteligente, el censor de turno no se va a atrever a decirte que bajes el tono, porque ning¨²n censor moderno quiere quedar como un idiota que no ha pillado un chiste. Esa es la raz¨®n, seg¨²n mi amigo, de que en los medios m¨¢s convencionales y aptos para todos los p¨²blicos se cuelen v¨¢ndalos que, en lugar de ser desalojados por agentes de seguridad, son aplaudidos y premiados como grandes genios de nuestro tiempo.
Algo de culpa tuvieron tambi¨¦n, creo yo, las vanguardias art¨ªsticas, que elevaron la gamberrada a la categor¨ªa de pieza de museo. Agradezcamos, pues, a los complejos intelectuales de los censores y a Marcel Duchamp que hoy sean los m¨¢s traviesos de la clase quienes escriban las apostillas a la actualidad.
Yo doy las gracias a diario, por ejemplo, a Alberto Gonz¨¢lez V¨¢zquez, que firma sus creaciones como Querido Antonio. Le agradezco sus vi?etas, sus libros y sus creaciones inclasificables, pero, sobre todo, sus clips de El intermedio, esos fogonazos de diez segundos en los que ridiculiza la banalidad de la pol¨ªtica. Lo hace como lo hac¨ªamos los ni?os: pintando bigotones a las fotos del peri¨®dico. Son collages animados (memes, que decimos hoy) como los que hac¨ªan los Monty Python en su Flying Circus con fotos antiguas.
Esta pol¨ªtica performativa y vacua, donde solo importa la puesta en escena y no el significado de las palabras (que puede variar de la ma?ana a la noche, seg¨²n convenga al aire que sople), necesita de tijeras, pegamento y rotulador. Sin ellos, acabar¨ªamos tom¨¢ndonosla en serio.
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