Una distop¨ªa previsible pero eficaz

"?Por qu¨¦ no quiere reproducirse la gente? Es una idea que cal¨® despu¨¦s del Cambio: que no deb¨ªamos traer ni?os al mundo. Destruimos el mundo y no tenemos que seguir pobl¨¢ndolo¡±, dice el joven narrador de esta historia. Sus padres y todos los padres destruyeron el mundo que conoc¨ªan y ahora los supervivientes de la cat¨¢strofe y la siguiente generaci¨®n, la del narrador, se hallan confinados tras un muro de 10.000 kil¨®metros en la costa de Inglaterra. El Muro los protege de los Otros, otra clase de supervivientes que vive en condiciones ¨ªnfimas e intentan colarse en el pa¨ªs protegido. Evidentemente estamos ante una distop¨ªa futurible, no diferente de tantas otras que hoy en d¨ªa nos ofrecen muchas narraciones, literarias o cinematogr¨¢ficas, al socaire del temor cada vez m¨¢s extendido a la destrucci¨®n de la vida en nuestro planeta. Una vez m¨¢s, uno se pregunta: ?estamos ante un ejercicio de verdadera ambici¨®n literaria o la mera consolidaci¨®n de un nuevo g¨¦nero literario de hecatombes ocasionadas por la codicia sin escr¨²pulos que agota las fuentes de vida del planeta?

No suele haber invenci¨®n en los modelos de este g¨¦nero, pues suele reproducir realidades actuales (pateras al asalto de pa¨ªses desarrollados, muros disuasorios como el de Berl¨ªn o el de la frontera entre M¨¦xico y EE UU) reconvertidas en amenazas definitivas.

Esta novela de John Lanchester se divide en tres partes. La primera introduce la vida de los defensores tomada como un servicio militar de dos a?os, al cabo de los cuales se pasa a la reserva y los ciudadanos se reintegran a la organizaci¨®n social que vive protegida por el Muro. En general, introducciones como esta suelen ser m¨¢s expositivas que propias de una ambici¨®n literaria debido a la inexcusable necesidad de exponer la estructura de la sociedad resultante de la hecatombe correspondiente. La segunda parte relata una invasi¨®n exterior que culmina con ¨¦xito y que condena a los defensores de la zona atacada del Muro a ser arrojados al exterior. Por fin, la tercera parte cuenta la dur¨ªsima vida de los condenados al exilio sin fin.

Hay alguna novedad. La m¨¢s sugerente es el rechazo de la generaci¨®n joven hacia la anterior, a la que culpan del desastre. Los j¨®venes se tratan con las familias, pero sin afecto, ya que no tienen intenci¨®n de retomar la antigua idea de relaci¨®n hogare?a; ahora su c¨ªrculo afectivo y de apoyo son ellos mismos. Este choque de generaciones s¨ª que es una original aportaci¨®n del autor. Tambi¨¦n hay en la sociedad protegida por el Muro una ¨¦lite dominante y favorecida sobre una clase media masiva y unas fuerzas de seguridad. Pero lo m¨¢s destacable es la eficiencia de su desarrollo narrativo, que, aun siendo un tanto previsible, convierte este libro en lo que verdaderamente es: una estupenda novela de g¨¦nero, el de las novelas de aventuras, contada con br¨ªo, emoci¨®n y tensi¨®n inusuales.

Cabe objetar su final circular, una suerte de pirueta que deja la historia aparentemente colgada. ?Es un final abierto o un mutis por el foro del autor? ?Hemos asistido a un relato lineal con final abrupto o a un sue?o del protagonista antes, o despu¨¦s, del Cambio? Que el muy entretenido lector posible decida. Y las reclamaciones, al maestro armero.

El Muro

Autor: John Lanchester.

Editorial: Traducci¨®n de Inga Pellisa. Anagrama, 2020.

Formato: 328 p¨¢ginas. 19,90 euros.

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