Pierre Cardin, un futurista cardinal del teatro de ballet
El primer trabajo importante del dise?ador fue el vestuario, accesorios y m¨¢scaras del filme ¡®La bella y la bestia¡¯ (1946), donde ya se dej¨® sentir en el joven inquieto la influencia del artista Christian B¨¦rard
Cuando en 1972 el recamado tel¨®n dorado con hoces y martillos del Teatro Bolshoi de Mosc¨² se levant¨® para que empezara la funci¨®n de estreno del ballet Anna Karenina, creado y bailado por Maya Plisetskaia, el p¨²blico enmudeci¨®. En los decorados sutilmente realistas de Levental se enmarcaba un vestuario fant¨¢stico y elegante, visionario y lujoso sin estridencia alguna. ...
Cuando en 1972 el recamado tel¨®n dorado con hoces y martillos del Teatro Bolshoi de Mosc¨² se levant¨® para que empezara la funci¨®n de estreno del ballet Anna Karenina, creado y bailado por Maya Plisetskaia, el p¨²blico enmudeci¨®. En los decorados sutilmente realistas de Levental se enmarcaba un vestuario fant¨¢stico y elegante, visionario y lujoso sin estridencia alguna. Pierre Cardin (San Biagio di Callanta, 1922 ¨C Neuilly-sur-Seine, 2020) lo dibuj¨® y gran parte lo cosi¨® ¨¦l mismo. Las puntadas que recortaban las faldas de la diva moscovita hab¨ªan sido hilvanados por las manos del gran estilista franc¨¦s. As¨ª se daba inicio a una estrecha amistad que durar¨ªa toda la vida y a unas colaboraciones art¨ªsticas llenas de refinamiento, arte y belleza.
Pierre Cardin, lo dec¨ªa el mismo, roz¨® varias veces la dedicaci¨®n exclusiva al ¡°vestuario de imaginaci¨®n esc¨¦nica¡±, un t¨¦rmino que le hab¨ªa regalado su amigo Jean Cocteau. El primer trabajo importante de Cardin fue el vestuario, accesorios y m¨¢scaras del filme La bella y la bestia (1946), donde ya se dej¨® sentir en el joven inquieto la influencia del artista Christian B¨¦rard. El trabajo junto a Elsa Schiaparelli y la temprana amistad con Salvador Dal¨ª (a quien visti¨® much¨ªsimo) terminaron de configurar una estil¨ªstica donde aunaba cierto perfume surrealista con futurismo. Eso lo distingui¨®. Y digamos algo b¨¢sico: el ¡°new-look¡± tal como nos lo leg¨® Dior para la eternidad, tiene mucho tambi¨¦n de Cardin, pues Christian Dior recibi¨® a Pierre como un disc¨ªpulo predilecto y lo termin¨® de pulir. Cuando se independiz¨®, el primer atelier abierto en 1950 en el 10 de la Rue Richepanse parisiense, estaba centrado en la ropa de teatro y ballet.
La ¨²ltima y muy reciente exposici¨®n del Brooklyn Museum en mayo de 2019 comisariada y dise?ada por Matthew Yokobovski hac¨ªa ¨¦nfasis en la ¡°teatralidad liberada¡± del dise?o vanguardista de Pierre Cardin e inventariaba una serie de trabajos legendarios donde el experimento material jugaba un papel vector. El plexigl¨¢s, el metacrilato, la resina coloreada y moldeable, el vinilo laminado o soportado sobre trama de tejido, apreci¨® en las propuestas de colecciones y series, pero tambi¨¦n en su ropa teatral de ballet.
En 1970 Pierre Cardin abre en Par¨ªs el Espace Cardin, que dur¨® hasta 2016, un centro de mecenazgo para la m¨²sica, el teatro y la danza donde su amiga Plisetskaia estren¨® multitud de piezas, como La dama del perrito y La gaviota, ambas inspiradas en Ch¨¦jov y con vestuario suyo, ambos ballets se vieron en Madrid en el Teatro Monumental.
Siempre activo, Pierre Cardin compr¨® el castillo del Marqu¨¦s de Sade en Lacoste y sab¨ªa muy bien lo que hac¨ªa, tal como suyo es el Palazzo Bragadin de Venecia donde vivi¨® Casanova. All¨ª en Lacoste cre¨® un festival anual de artes esc¨¦nicas. Su inter¨¦s no decay¨® con los a?os, al contrario. Dise?¨® los trajes y produjo para la bailarina estrella de la ?pera de Par¨ªs Marie-Claude Pietragalla el ballet Marco Polo. Ven¨ªa de una experiencia compleja, un musical integrador basado en ¡°Trist¨¢n e Isolda¡± donde incluy¨® a un grupo de baile de j¨®venes chechenos. Todo un mensaje vocacional.
Giacomo Casanova es uno de sus personajes fetiches de la vida de Pierre Cardin, y en 2009 crea un espect¨¢culo junto a Julian Lestel, del Ballet Nacional de Marsella, inspirado en las Memorias de este personaje singular. No nos olvidemos que Pierre Cardin es un protov¨¦neto, un veneciano del norte oriental, nacido en los meandros de Treviso. Y esa alma de cultura adri¨¢tica con ecos de Bizancio, siempre abierto a la conquista de la invenci¨®n, lo plasm¨® siempre en una s¨ªntesis atrevida y sin concesiones. En 2018 hizo en Pek¨ªn (donde hab¨ªa sido el primero en ir en los tiempos cerrados del mao¨ªsmo) un ballet monumental que miraba hacia un horizonte globalizado y geom¨¦trico lleno de cambios e interrogantes.