La Alhambra y la catedral de Granada, afectadas por los terremotos
Los espacios patrimoniales de la ciudad sufren los efectos de m¨¢s de 1.150 se¨ªsmos en dos semanas, casi treinta de intensidad superior a 3 en la escala de Richter
La Alhambra, la catedral o el monasterio de San Jer¨®nimo de Granada han vivido muchos terremotos. Y aunque ah¨ª siguen, de pie y sin inmutarse, cada temblor a?ade una grieta aqu¨ª, una ca¨ªda de material all¨¢. La actual serie s¨ªsmica de Granada y sus alrededores suma 1.158 terremotos en las ¨²ltimas dos semanas, cinco de ellos de intensidad mayor a 4 en la escala de Richter y 22 por encima de 3. Unos empujones que han tenido su reflejo sobre estos espacios patrimoniales, bien agrandando heridas de a...
La Alhambra, la catedral o el monasterio de San Jer¨®nimo de Granada han vivido muchos terremotos. Y aunque ah¨ª siguen, de pie y sin inmutarse, cada temblor a?ade una grieta aqu¨ª, una ca¨ªda de material all¨¢. La actual serie s¨ªsmica de Granada y sus alrededores suma 1.158 terremotos en las ¨²ltimas dos semanas, cinco de ellos de intensidad mayor a 4 en la escala de Richter y 22 por encima de 3. Unos empujones que han tenido su reflejo sobre estos espacios patrimoniales, bien agrandando heridas de anteriores se¨ªsmos, como en la catedral o en el monasterio (ambas del siglo XVI) o, en el caso de la Alhambra, produciendo problemas estructurales que no exist¨ªan. El casco hist¨®rico de Santa Fe, epicentro del terremoto, tambi¨¦n ha resultado da?ado intensamente.
En la catedral, el ¨²ltimo viernes de enero, cayeron fragmentos de un pin¨¢culo al suelo. A nadie le pas¨® nada, pero oblig¨® a poner en marcha trabajos de inspecci¨®n, que llevan ya una semana y se prolongar¨¢n al menos otra. Pedro Salmer¨®n, su arquitecto conservador cuenta, con un pie en la gr¨²a que lo subir¨¢ al tejado, a varias decenas de metros del suelo que ¡°la catedral arrastra un problema anterior de conservaci¨®n de la piedra y los movimientos s¨ªsmicos han alterado el equilibrio, algo inestable en el que estaba, y se han precipitado los problemas, nada extra?o por otra parte¡±. Tras lo que califica como ¡°una revisi¨®n profunda de cualquier elemento que pueda caer a la v¨ªa p¨²blica¡±, la primera conclusi¨®n es que tendr¨¢n que ¡°desmontar todo o parte de al menos cinco o seis pin¨¢culos en la zona frontal¡±, que presentan cierta inestabilidad. Eso en la parte frontal porque ahora comienza la revisi¨®n de laterales y la cabecera del cimborrio, lo que aumentar¨¢ el n¨²mero de pin¨¢culos desmontados. En el interior, el arquitecto cuenta que la catedral, por su forma y construcci¨®n, se ha comportado muy bien, pero ¡°ten¨ªa una fisura del terremoto de Lisboa [1775] que se mueve siempre¡± y ahora tambi¨¦n lo ha hecho. En principio, no parece nada grave.
La otra gran obra de Diego de Silo¨¦ en Granada es el monasterio de San Jer¨®nimo. Joaqu¨ªn Mart¨ªnez, ge¨®logo y colaborador del monasterio, advierte de la existencia de una fisura que ¡°tiene su origen hace siglos¡± aunque estos d¨ªas parece haberse agrandado. Por el suelo del coro superior, sobre el que est¨¢ la grieta, se aprecia algunos materiales de peque?o tama?o ca¨ªdos del techo y paredes. Esto, dice Mart¨ªnez, ¡°no supone problemas en la estructura del edificio¡±. S¨ª pone en riesgo, sin embargo, la preciosa pintura al fresco que recubre la pared.
En la parte alta de la ciudad, la Alhambra le debe a los ¨²ltimos terremotos dos problemas, uno de ellos estructural. Es el caso de la Torre de las Gallinas, que sufre problemas de estabilidad, lo que oblig¨® hace una semana a apuntalar cuatro de sus almenas. La torre, que no est¨¢ en el itinerario habitual de visita p¨²blica, contaba ya con informes previos que advert¨ªan de su mala situaci¨®n y de la posibilidad de que este tipo de problemas ocurrieran. En los exteriores, la Cuesta del Rey Chico o de los Chinos, uno de los accesos al monumento, se mantiene cerrada por la aparici¨®n de oquedades y fisuras en el suelo.
A 12 kil¨®metros de la capital, Santa Fe ha sido el centro de la serie s¨ªsmica y de los da?os. Su casco hist¨®rico, Bien de Inter¨¦s Cultural desde 1970, ha sufrido bastante, hasta el punto de que se ha prohibido la entrada y el aparcamiento de veh¨ªculos en ¨¦l. En la Plaza de Espa?a est¨¢ la iglesia de la Encarnaci¨®n, del siglo XVIII. A falta de inspeccionar la gravedad de algunas grietas surgidas en el interior, ¡°en las b¨®vedas¡± explica Manolo Gil, alcalde de la ciudad, la iglesia est¨¢ cerrada al culto y esta semana ha habido que retirar de su fachada frontal cuatro pin¨¢culos y una cruz para evitar el riesgo de que pudieran caerse. Dos de las cuatro puertas de acceso a la ciudad, la de Loja y Sevilla, han sufrido tambi¨¦n grietas importantes. Ninguna instituci¨®n ha hecho hasta ahora ninguna valoraci¨®n econ¨®mica de los da?os.
C¨®mo aguantar siglos en pie
La normativa de sismorresistencia es de obligado cumplimiento desde hace apenas cincuenta a?os. Pero hasta aqu¨ª han llegado construcciones con siglos y siglos a sus espaldas. ?C¨®mo constru¨ªan? Ahora, con el hormig¨®n, la resistencia de las edificaciones se puede ajustar perfectamente a la resistencia s¨ªsmica que se pretende, que en Granada es 0.24 g, el m¨¢ximo que se requiere en Espa?a. Hace siglos, el mayor factor de resistencia, dice Enrique Hern¨¢ndez, especialista en sismorresistencia de la Universidad de Granada, era ¡°el sobredimensionamiento¡± de la edificaci¨®n y de las estructuras. Pedro Salmer¨®n, arquitecto, a?ade que esto se complementaba con ¡°el uso de materiales que sab¨ªan que ten¨ªa un buen comportamiento contra los movimientos¡± y con el uso adecuado de vol¨²menes de construcci¨®n, con un equilibrio oportuno entre ¡°el largo y el ancho de los edificios¡±, explica.