La (in)felicidad de los polic¨ªas mexicanos despide la Berlinale

Cuenta Alonso Ruizpalacios (Ciudad de M¨¦xico, 42 a?os) en el texto de promoci¨®n que acompa?a a Una pel¨ªcula de polic¨ªas, estrenada en la ¨²ltima jornada de la 71? Berlinale, que su nuevo filme nace, entre otras razones, de la constataci¨®n de que en el cine nada se puede contar en pasado, que todo es presente en la pantalla. Por tel¨¦fono, el cineasta se explica: ¡°Esta reflexi¨®n, a la que he llegado tras chocar contra ese problema en anteriores pel¨ªculas, me ha llevado a buscar una nueva f...

Cuenta Alonso Ruizpalacios (Ciudad de M¨¦xico, 42 a?os) en el texto de promoci¨®n que acompa?a a Una pel¨ªcula de polic¨ªas, estrenada en la ¨²ltima jornada de la 71? Berlinale, que su nuevo filme nace, entre otras razones, de la constataci¨®n de que en el cine nada se puede contar en pasado, que todo es presente en la pantalla. Por tel¨¦fono, el cineasta se explica: ¡°Esta reflexi¨®n, a la que he llegado tras chocar contra ese problema en anteriores pel¨ªculas, me ha llevado a buscar una nueva forma de narrar. Soy consciente del l¨ªmite, y desde ah¨ª me lanzo a ver hasta d¨®nde llego¡±.

Para Netflix, la plataforma que produce el filme, y que lo estrenar¨¢ el pr¨®ximo oto?o, Una pel¨ªcula de polic¨ªas es un documental. Para el espectador probablemente esta etiqueta no ser¨¢ tan categ¨®rica, porque el director de G¨¹eros y Museo se ha lanzado a una experimentaci¨®n formal atractiva, tanto en la narraci¨®n como en lo visual. Teresa y Montoya, protagonistas de la historia, son dos agentes que han seguido la tradici¨®n familiar ¡ªella, Teresa, muy a pesar de su padre¡ª para entrar en una de las fuerzas de seguridad m¨¢s controvertidas del continente americano. ¡°Empec¨¦ a escuchar a polic¨ªas en un proceso de investigaci¨®n arduo y muy abierto de miras, sin negarme a nada, con la idea de contar su impacto social. Lo hice porque con las productoras pensamos en rodar un documental sobre la corrupci¨®n y la impunidad en mi pa¨ªs¡±, recuerda Ruizpalacios. ¡°Despu¨¦s de dos a?os de investigaci¨®n y entrevistas con mucha gente y distintos puntos de vista, decid¨ª que era mucho m¨¢s interesante seguir a un par de polic¨ªas comunes¡±. Encontr¨® a dos con pasados interesantes, con una consciencia clara de su puesto y su poder, ¡°y una asunci¨®n de las contradicciones que arrastran¡±.

La c¨¢mara sigue a Teresa y a Montoya en esas jornadas terribles. El director mezcla im¨¢genes, sonidos, hace que ellos cuenten dentro de las acciones, por ejemplo, sus pensamientos y su pasado, ante la c¨¢mara. ¡°Soy consciente de que en Latinoamericana hemos hablado de los polic¨ªas con rigor en filmes previos como El bonaerense o Tropa de ¨¦lite, pero tambi¨¦n quer¨ªa ahondar en el g¨¦nero, y por eso de lo primero que tuve fue el t¨ªtulo, que creara expectativas al p¨²blico¡±, recuerda el cineasta. De ah¨ª sus gui?os a los t¨ªtulos policiacos m¨¢s cl¨¢sicos, los del Hollywood de los setenta y las series de aquella ¨¦poca, como se escucha en su banda sonora o como propone con ciertas posiciones de c¨¢mara. ¡°Eso s¨ª, en el M¨¦xico de hoy, para crear una contradicci¨®n galopante y retratar el sistema disfuncional en que vivimos¡±.

El jurado de la Berlinale ha premiado esa indagaci¨®n con el galard¨®n a la mejor contribuci¨®n art¨ªstica, subrayando la labor en el montaje de Yibr¨¢n Asuad. ¡°El guion sufri¨® un largo proceso de desarrollo¡±, recuerda Ruizpalacios, ¡°desde las entrevistas hasta la decisi¨®n de si nos centr¨¢bamos en una historia de amor o de desilusi¨®n. Y, desde luego, la pel¨ªcula se ha construido paso a paso¡±. Incluso con la aportaci¨®n de sus actores, porque Teresa y Montoya est¨¢n encarnados por dos profesionales, M¨®nica del Carmen (A?o bisiesto, Babel) y Ra¨²l Briones (Para¨ªso perdido), sumergidos en las duras jornadas ¡ªy corruptas¡ª jornadas policiales: Netflix ha llamado documental a algo que trasciende los formatos.