Un vergonzante saldo ganadero
Ovaciones para Curro D¨ªaz y el confirmante Borja Jim¨¦nez en una aburrida tarde
Para celebrar la tradicional corrida del Domingo de Resurrecci¨®n, la empresa Plaza 1, gestora de Las Ventas, supuesta primera plaza del mundo, rese?¨® un miserable saldo ganadero, que no s¨®lo arruin¨® las (pocas) esperanzas de los aficionados, sino tambi¨¦n las de tres toreros altamente necesitados de un importante triunfo.
Un saldo ganadero que, en principio, estaba integrado por las ganader¨ªas de El Tajo (propiedad de Jos¨¦ Miguel Arroyo ¡®Joselito¡¯) y Las Ramblas, pero que se acab¨® convirtiendo casi en una concurso de ganader¨ªas. Ocho animales de cinco hierros diferentes saltaron al ruedo. Adem¨¢s de los titulares, un toro de Mart¨ªn Arranz, que fue devuelto a los corrales y sustituido por un sobrero de Mart¨ªn Lorca, que igualmente se march¨® con los mansos para dar paso a otro sustituto de Escribano Mart¨ªn.
Divisas todas ellas hermanas (o primas), marcas blancas de Juan Pedro Domecq, que, al parecer, fueron incapaces de reunir una corrida digna y completa para Madrid ¡ªporque si esto era otro ¡°desaf¨ªo ganadero¡±...¡ª. El caso es que, para tan se?alada fecha, al ruedo de la supuesta primera plaza del mundo saltaron unos bovinos, presumiblemente de lidia, feos como ellos solos, cornalones, pero sin un ¨¢pice de trap¨ªo.
El jabonero sucio que hizo primero, bajo y apretado de carnes, sin ser excesivamente ofensivo, fue el ¨²nico de estimable estampa. Al resto hab¨ªa que verlos. Y si al menos hubieran embestido... Pero tampoco.
Ese primero, con el hierro de El Tajo, tuvo nobleza y buena condici¨®n, pero un escaso fondo de casta brava en sus entra?as. Lo salud¨® templado a la ver¨®nica el confirmante Borja Jim¨¦nez, que minutos despu¨¦s replic¨® por ajustadas chicuelinas un bello quite, tambi¨¦n a la ver¨®nica, de su compa?ero Jos¨¦ Garrido.
Ya muleta en mano, se sac¨® Jim¨¦nez al astado hacia fuera con un torer¨ªsimo manojo de trincherazos que supieron a gloria. Despu¨¦s, una tanda ligada con la diestra a la que el animal respondi¨® por abajo con bondad. A partir de ah¨ª, todo empez¨® a diluirse. Dispuesto, entregado y casi siempre bien colocado, el sevillano dej¨® tambi¨¦n algunos naturales de buen trazo, pero sin la necesaria emoci¨®n del toro.
Fue a por todas de nuevo en el quinto, un zapatito cornal¨®n de pavoroso pit¨®n izquierdo que se dej¨® lo poco que ten¨ªa en los primeros tercios. Borja Jim¨¦nez porfi¨® en demas¨ªa, aunque con enorme decoro y dignidad, ante un animalito claudicante. Merece m¨¢s y mejores oportunidades.
Los otros pocos destacados momentos de la tarde llevaron la firma de Curro D¨ªaz. Fue frente al cuarto, un mansito que acab¨® emple¨¢ndose en la muleta del torero de Linares. A media altura y casi siempre de uno en uno, Curro brill¨® con la mano izquierda en naturales de corto trazo, pero indudable personalidad. De frente y a pies juntos lleg¨® lo mejor. Ten¨ªa a la gente en el bolsillo, pero, esta vez, la espada, esa que hab¨ªa tumbado de una soberana estocada a su primero, se le fue a mal sitio.
Jos¨¦ Garrido, que pareci¨® contagiarse de la insufrible soser¨ªa de su lote y se dedic¨® a pegar pases acelerados y despegados, se fue como vino. Sin despeinarse.
El Tajo, Las Ramblas/D¨ªaz, Jim¨¦nez, Garrido
Tres toros de Las Ramblas (2º, 5º y 6º), dos de El Tajo (1º y 4º) y un sobrero (3º tris) de Escribano Martín. Un saldo de feísimas hechuras, con pitones, pero sin trapío, y de escaso juego por su falta de casta. El noble 1º tuvo buena condición, pero contado fondo, mientras que el 4º tuvo algo más de movilidad y transmisión.
Curro Díaz: gran estocada (saludos); estocada que hace guardia y otra estocada contraria y caída _aviso_ (saludos).
Borja Jiménez, que confirmaba alternativa: estocada corta caída y tendida y un descabello (saludos con algunas protestas); dos pinchazos y estocada (palmas).
José Garrido: espadazo defectuoso que escupe el toro, pinchazo y estocada desprendida _aviso_ (silencio); estocada caída (silencio).
Plaza de toros de Las Ventas. Domingo de Resurrección. Menos de 1/3 de entrada (8.164 espectadores, según la empresa).
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.