Jos¨¦ Ignacio Lapido: ¡°Sacar un disco en Espa?a es un acto supremo de amor al arte¡±
¡°Se dice que el rock est¨¢ muerto desde el principio de los sesenta, desde su ¨¦poca dorada. Es una contradicci¨®n absoluta. Lo mismo que el jazz no ha muerto, pues tampoco el rock¡±
Un superviviente y, al mismo tiempo, un faro. Jos¨¦ Ignacio Lapido (Granada, 60 a?os) encajar¨ªa perfectamente en esa etiqueta de m¨²sico de culto, uno de esos compositores que, sin ning¨²n ¨¦xito en las listas, es admirado por los suyos y ofrece siempre reflexiones y aprendizajes valiosos desde el terreno del rock. Ha publicado A primera sangre, otra obra m¨¢s de sabidur¨ªa musical y que ya est¨¢ defendiendo en una gira nacional.
Pregunta. ...
Un superviviente y, al mismo tiempo, un faro. Jos¨¦ Ignacio Lapido (Granada, 60 a?os) encajar¨ªa perfectamente en esa etiqueta de m¨²sico de culto, uno de esos compositores que, sin ning¨²n ¨¦xito en las listas, es admirado por los suyos y ofrece siempre reflexiones y aprendizajes valiosos desde el terreno del rock. Ha publicado A primera sangre, otra obra m¨¢s de sabidur¨ªa musical y que ya est¨¢ defendiendo en una gira nacional.
Pregunta. Despu¨¦s de estos a?os con 091 y el par¨®n de la pandemia, vuelves a estar en solitario.
Respuesta. Sacar un disco hoy en Espa?a es un acto supremo de amor al arte (risas). Sigo compaginando este proyecto en solitario con 091, donde seguiremos haciendo conciertos y no descartamos hacer nuevas grabaciones. Ahora, tocaba sacar este disco y que cantara yo como llevo haciendo desde 1999. Lo hago sin problemas ni interferencias.
P. En 1999, dec¨ªa que su mayor preocupaci¨®n era tener una voz propia. Ahora, en 2023, ?siente que la tiene como m¨²sico?
R. Creo que s¨ª. Es una de las b¨²squedas que tenemos todos los creadores. No s¨¦ si alguna vez se puede decir con rotundidad que la tienes porque siempre est¨¢s en plena b¨²squeda. Yo creo que cualquier creador que se sienta ya asentado en determinado estatus y crea que no tiene que buscarla me parece que es echar piedras sobre tu propio tejado. La b¨²squeda va unida a la palabra creaci¨®n.
P. ?Cu¨¢l es la principal preocupaci¨®n entonces ahora?
R. Al principio de mi carrera en solitario no puedo decir que tuviera terrores o traumas (risas). Ser¨ªa exagerar mucho. Yo llevaba muchos a?os con la banda siendo guitarrista y me tuve que poner en el centro del escenario, solo, siendo el foco de atenci¨®n. Psicol¨®gicamente necesit¨¦ un periodo de adaptaci¨®n que me dur¨® poco. Ahora mismo estoy en disfrutar. Tengo la suerte de estar rodeado de grandes m¨²sicos que me hacen sentir bien en el estudio y en el escenario. Disfrutar al m¨¢ximo esa es la clave. Con este disco he disfrutado mucho m¨¢s que nunca. Escucharlo hasta me produce placer. Antes, cuando escuchaba los anteriores, no lo era tanto porque ten¨ªa un nivel de autoexigencia que ve¨ªa fallos que solo estaban en mi cabeza. O¨ªa las tomas malas de las sesiones en mi cabeza antes que las buenas. Era un poco paranoico.
P. ?Y c¨®mo se abandona esa exigencia?
R. Haciendo un ejercicio psicol¨®gico de relajaci¨®n. Supongo que los a?os de oficio dan pie a te sientas seguro de lo que haces y que ese es tu papel en la vida.
P. En este disco, se vuelve a ver un desencanto existencial. ?Es predeterminado?
R. No hay un plan establecido a la hora de componer. Las letras no surgen del m¨¦todo de escritura autom¨¢tica. Pero es verdad que las mismas notas te pueden dar pistas solo por ir en acordes menores o mayores. Evidentemente, todo eso lleva un proceso en el que interviene el oficio. Hay que encajar las letras y las melod¨ªas. No funciona por temas. Esto no es como cuando te mandaban una redacci¨®n en el colegio sobre la lluvia y te pon¨ªas (risas). No es as¨ª. A m¨ª se me ocurre una idea alrededor de una frase y puede dar pie a desv¨ªos secundarios o laberintos. El proceso creativo es realmente complicado. El inicio, a veces, no sabe ni de d¨®nde viene. Puede venir de otra canci¨®n, un p¨¢rrafo de un libro que le¨ªste, una pel¨ªcula que viste, algo que o¨ªste contar a alguien¡ Todo eso est¨¢ en una coctelera de impulsos auditivos, visuales, literarios y saltan cuando menos lo esperas.
P. Despu¨¦s de tantos discos en solitario, creo que existe un universo lapidista.
R. Mis letras y mi m¨²sica entiendo que son reconocibles. Hay unos temas recurrentes en mis letras como la soledad, el paso del tiempo, la muerte¡ Vistas desde distintos prismas y perspectivas. La literatura se nutre de esos temas desde el inicio de los tiempos. Son temas cl¨¢sicos. Yo lo he hecho influenciado por las lecturas que tuve de joven. Lecturas que profundamente me marcaron y que paso por la trituradora de mi cabeza como Kafka, Ch¨¦jov, T. S. Elliot, Bob Dylan, Chuck Berry¡ Hay una mezcla de influencias literarias y l¨ªricas del rock and roll.
P. ?Cu¨¢ndo m¨¢s mayor se hace uno m¨¢s se centra en recuperar a los cl¨¢sicos?
R. Todo es ficci¨®n al escribir, pero tienes que escribir desde una verdad personal. Si escribes una novela de ficci¨®n sobre marcianos y si lo haces cre¨ªble desde una verdad, alcanzas verosimilitud. En eso consiste. Las reflexiones vitales que me hago con 60 a?os no son las mismas que me hac¨ªa cuando ten¨ªa 20. Hist¨®ricamente, el rock and roll ha estado ligado a la juventud y ya toca abandonar el sesgo generacional. Es impostado escribir con los clich¨¦s de un quincea?ero. Lo honesto es escribir de mis reflexiones actuales. Un grupo de chavales de 18 a?os puede hacerlo, pero un t¨ªo de 50 o 60 no. Bueno, a no ser que seas repetidor (risas).
P. Uno de esos temas es la muerte.
R. En el folk y el country se ha llevado siempre con m¨¢s naturalidad. No tienen problemas de hablar de las tumbas. Incluso en el blues, donde no se tiene miedo hablar de los perros del infierno y las madres que los pari¨®. No tienen esa necesidad de agradar y entretener. Los j¨®venes, aunque no lo digan, creen en la inmortalidad. Los que tenemos una edad ya sabemos que eso no se puede creer. Hay muchos autores en el pop-rock tambi¨¦n interesantes al respecto: Van Morrison, Bob Dylan, Lou Reed, Leonard Cohen. Bueno, Cohen ya lo hac¨ªa desde joven. Siempre fue viejo (risas). Tambi¨¦n John Lennon, que era muy confesional, y Ray Davies, que ha sido un gran cronista emocional siempre.
P. ?Es el rock un territorio ya de circuitos no masivos como el jazz o el blues?
R. Se lleva diciendo que el rock est¨¢ muerto desde el principio de los sesenta, desde su ¨¦poca dorada. Es una contradicci¨®n absoluta. Lo mismo que el jazz no ha muerto, ni el blues, ni el bluegrass, pues tampoco el rock. El sesgo generacional es lo malo. Siempre se ha asociado el rock and roll a una vida r¨¢pida, llena de vivencias trepidantes y fin. Luego, viene la realidad y te desmiente todo eso. Creo que han pasado ya muchas d¨¦cadas como para considerar el g¨¦nero como otro musical respetable. Nadie que va a ver un concierto de jazz se pregunta si ese artista tiene un disco en la lista de ¨¦xitos, si tiene 25 o 50 a?os. Solo van a disfrutar de la m¨²sica o a escuchar una verdad musical. Lo mismo cuando compran sus discos. O lo mismo cuando se compran los discos de la Filarm¨®nica de Berl¨ªn tocando a Tchaikovsky. ?Sabemos algo de la vida de Tchaikovsky? ?De sus ¨²ltimos ¨¦xitos? En el rock ha llegado el momento de asumirlo como un g¨¦nero que ha dado maravillas musicales y verlo as¨ª. No es su ¨¦poca dorada ahora, como lo fue en los sesenta donde ejerci¨® de faro generacional. Hay muchos libros que hablan sobre el tema. No descubro la p¨®lvora. Yo vengo de esa tradici¨®n y por eso lo hago.
P. En la canci¨®n De cuando no hab¨ªa nacido, dice: ¡°Todo es igual, aunque parezca distinto¡±. ?Qu¨¦ le preocupa m¨¢s sobre el presente?
R. En esa canci¨®n, hay una mezcla de reflexiones sobre el presente y los recuerdos de la ni?ez. Cuando uno es joven piensa que vives experiencias que solo vives t¨². Le pasa a todas las generaciones. Pero, a poco que escarbes y leas, a todas las generaciones les pasa lo mismo. Lo que cambia un poco es el decorado. La crueldad, la ternura, el hambre, el tener que trabajar¡ las cosas b¨¢sicas son iguales desde el tiempo de los asirios y las madres que los pari¨®. Cambia lo accesorio y lo anecd¨®tico. El amor de una madre a su hijo es igual ahora que la de la madre en tiempos de Claudio en la Antigua Roma. Como persona, lo ¨²nico que me quitar¨ªa el sue?o ser¨ªan problemas de salud de mi familia o de la gente que quiero. Fuera de ah¨ª, la oleada de neopuritarismo en la cultura y que viene de Estados Unidos. Es un pa¨ªs que tiene influencia para lo bueno, como los estilos musicales de los que estamos hablando, pero tambi¨¦n tiene efectos perniciosos como cuando las cosas que vienen de all¨ª son un sinsentido. Por ejemplo, el neopuritarismo de reescribir libros infantiles, hacer listas de libros como en los a?os de la Inquisici¨®n¡ Es un desvar¨ªo y un dislate absoluto. Cualquiera que tenga un poco de raciocinio y amor propio intelectual sabe que es insostenible. No puedes confrontar el pasado a ojos del presente. Esto lleva ya a que mucha gente se autocensure para no molestar a nadie. Nos vamos a convertir todos en peque?os Torquemadas.
P. En 2005, se empieza a autoeditar con Pantagonia Records y ah¨ª sigue hoy.
R. Todo es igual, aunque parezca distinto (risas). Me siento c¨®modo con mi sello, no dependo de nadie y sigo sin buscar otra v¨ªa que no sea la autoedici¨®n. Evidentemente, es m¨¢s trabajo, sobre todo a mi mujer, Mari del Mar, que lleva toda la log¨ªstica y lo hace como una leona para adelante. No dir¨¦ que es un negocio familiar, pero casi. Porque hablar de negocio y m¨²sica es un ox¨ªmoron (risas). No hay negocio. Vamos salvando los muebles. Lo hago con gusto y fue una decisi¨®n acertada.
P. ?Alguna vez ha chocado con sus propias expectativas y pensaba que llegar¨ªa m¨¢s alto?
R. Nunca he tenido grandes expectativas. No porque no creyera que estaba haciendo malas canciones sino porque conoc¨ªa ya los mecanismos del negocio en Espa?a y sab¨ªa c¨®mo son las estructuras. No me he llevado ning¨²n desenga?o.