Fracasan las negociaciones de los actores con la industria: la huelga que paralizar¨¢ el cine y la televisi¨®n se acerca

La crisis que vive la industria del cine y la televisi¨®n en Estados Unidos, sumida en una huelga de guionistas desde hace dos meses y medio, se ha agravado esta medianoche en Los ?ngeles, despu¨¦s de que haya expirado el plazo para llegar a un acuerdo entre los actores y la industria. Apurando hasta el final la hora l¨ªmite de las negociaciones, al borde de la una de la madrugada de este jueves (hora de la costa oeste de Estados Unidos) se ha frenado moment¨¢neamente la huelga que planteaba el poderoso sindicato de actores y que no se suma, por lo tanto, ...

La crisis que vive la industria del cine y la televisi¨®n en Estados Unidos, sumida en una huelga de guionistas desde hace dos meses y medio, se ha agravado esta medianoche en Los ?ngeles, despu¨¦s de que haya expirado el plazo para llegar a un acuerdo entre los actores y la industria. Apurando hasta el final la hora l¨ªmite de las negociaciones, al borde de la una de la madrugada de este jueves (hora de la costa oeste de Estados Unidos) se ha frenado moment¨¢neamente la huelga que planteaba el poderoso sindicato de actores y que no se suma, por lo tanto, al paro que los guionistas llevan a cabo desde inicios de mayo y que supera los 70 d¨ªas.

Los negociadores y el sindicato de actores no han llegado a un acuerdo. Pero eso tampoco significa que sus 160.000 miembros vayan a la huelga, por ahora. Como ha explicado en un comunicado la presidenta de la uni¨®n de actores, Fran Drescher, se reunir¨¢n en las primeras horas de este jueves y habr¨¢ que esperar a las 12 de la ma?ana (nueve de la noche, hora peninsular espa?ola) para saberlo. Asegura Drescher que han negociado ¡°de buena fe¡±, pero que las propuestas por parte de la patronal ¡°han sido insultantes e irrespetuosas dadas nuestras important¨ªsimas contribuciones a la industria¡±. ¡°Hasta que no negocien de buena fe, no habr¨¢ acuerdo. No tenemos m¨¢s remedio que avanzar juntos¡±, asegura, explicando que someter¨¢n la decisi¨®n de ir a la huelga a una discusi¨®n por parte de su comit¨¦ nacional.

De producirse, ser¨ªa el primer paro conjunto de tal calibre desde 1960, hace 63 a?os. Una tormenta perfecta con catastr¨®ficas repercusiones econ¨®micas para California, EE UU y para todo el sector en los pr¨®ximos meses, que ya vive serias complicaciones. Los actores no van a la huelga desde 1980.

El conflicto laboral se agrav¨® despu¨¦s de que esta semana los directivos de los estudios solicitaran la intervenci¨®n de un mediador federal tras semanas de negociaciones. Era una plegaria de ¨²ltimo minuto para evitar el temido escenario. El 12 de julio estaba marcado en rojo en todos los calendarios de Hollywood. Era el nuevo plazo fijado por los estudios ¡ªentre los que se agrupan Apple, Netflix, Amazon, Disney, Universal, Sony, Warner y Paramount¡ªy la organizaci¨®n sindical. Era una nueva fecha fatal despu¨¦s de que las partes acordaran retrasar el l¨ªmite de las negociaciones para despu¨¦s del 4 de julio, fiesta nacional en EE UU.

El sindicato, que representa a unas 160.000 personas, inform¨® pocas horas antes de que expirara el plazo de que aceptaba la petici¨®n hecha por la Alianza de Productores de Pel¨ªculas y Televisi¨®n (Amptp), es decir, la patronal, con quienes est¨¢n negociando su convenio ¡ªque se renueva cada tres a?os y que venci¨® el 30 de junio¡ª para que un mediador sirviera de puente entre las partes. ¡°Esto no nos distraer¨¢ de la negociaci¨®n para conseguir un acuerdo justo¡±, se?alaba el comit¨¦ de negociaci¨®n del Sindicato de Actores de Cine y la Federaci¨®n Estadounidense de Artistas de Radio y Televisi¨®n (el grupo, que se fusion¨® en 2012, es conocido como SAG-AFTRA, por sus siglas en ingl¨¦s). Los actores afirmaron en la ma?ana del mi¨¦rcoles que no ve¨ªan en los estudios la intenci¨®n de ¡°negociar rumbo a un acuerdo¡±. El mensaje tens¨® a¨²n m¨¢s las posiciones enrocadas que mantienen las dos partes.

Durante m¨¢s de dos semanas de negociaciones, el tono del di¨¢logo hab¨ªa sido constructivo, de acuerdo con la prensa especializada. Eso cambi¨® el martes, cuando SAG-AFTRA respondi¨® con dureza a una informaci¨®n del poderoso medio especializado en entretenimiento Variety, en la que se aseguraba que los directivos m¨¢s importantes de los estudios buscaban la llegada de un mediador federal, lo que obligar¨ªa a extender el debate entre las partes. A finales de junio, varias fuentes ¡ªapenas hay informaciones oficiales, porque ambos bandos han decidido mantener el silencio con la prensa durante las negociaciones¡ª indicaron que las partes hab¨ªan llegado a varios acuerdos, lo que allanaba el camino a ese nuevo contrato, como el que los estudios hab¨ªan logrado hac¨ªa pocas semanas con el sindicato de directores. Entre los pactos alcanzados estaban los concernientes a los llamados pagos residuales que reciben los actores cuando una de sus pel¨ªculas o series tienen una segunda vida (llegan a plataformas, se sindican, se lanzan en DVD, se venden a otros pa¨ªses...), as¨ª como en cuestiones de pensiones y sanidad e incluso de inteligencia artificial.

Consecuencias generalizadas

La huelga de actores paralizar¨ªa casi totalmente el sector del cine y la televisi¨®n, pues se sumar¨ªa a la de los guionistas, que llevan 71 d¨ªas de paros y que exigen una mejora de sus condiciones laborales. Las consecuencias no son exclusivas de Hollywood, sino que afectan a todo el pa¨ªs. La econom¨ªa de California, la quinta a nivel mundial, estar¨ªa muy tocada, como reconocieron las autoridades de Los ?ngeles en un comunicado en apoyo a la huelga de guionistas. Seg¨²n datos de la Motion Picture Association de enero, esta industria aporta 2,4 millones de empleos en el pa¨ªs y 186.000 millones de d¨®lares (m¨¢s de 170.000 millones de euros) en salarios a trav¨¦s de m¨¢s de 122.000 empresas.

Con una ola de calor azotando el oeste de EE UU, la temperatura en los despachos tambi¨¦n ha ido en aumento. Tanto esa ¨²ltima y cr¨ªtica semana de junio como en esta de mediados de julio, todo hac¨ªa indicar que la huelga podr¨ªa producirse. Inicialmente, por una carta firmada por, primero 300, y finalmente por m¨¢s de 2.000 actores de la talla de Meryl Streep, Jennifer Lawrence, Pedro Pascal, Charlize Theron, Jamie Lee Curtis, Olivia Wilde, Paul Giamatti, Ewan McGregor, Aubrey Plaza, Rooney Mara, Sarah Paulson y Ben Stiller en la que afirmaban estar ¡°preparados si la huelga tiene que producirse¡± y expresaban su preocupaci¨®n por el hecho de que ¡°los miembros del Sindicato se vean obligados a hacer sacrificios a los que sus l¨ªderes no parecen dispuestos¡±. Tambi¨¦n firmaba esa carta Fran Drescher, conocida actriz por la serie de los noventa La ni?era, presidenta del sindicato de actores y l¨ªder en las negociaciones.

¡°No es momento de tomar posturas intermedias, y no es una exageraci¨®n decir que los ojos de la historia est¨¢n sobre nosotros¡±, afirmaban los actores en su carta, donde ped¨ªan ¡°los cambios necesarios y la protecci¨®n merecida¡±. ¡°Si no sois capaces de llegar hasta ah¨ª, os pedimos que us¨¦is el poder que os otorgamos como miembros y os un¨¢is a la huelga del sindicato de guionistas. Para nuestro sindicato y nuestro futuro, este es el momento. Esperemos que, en nuestro nombre, encontr¨¦is el momento y no lo dej¨¦is pasar¡±.

Los primeros efectos

A la espera de la decisi¨®n definitiva de los actores, la huelga de guionistas, la primera de este sindicato, el Writer¡¯s Guild of America (o WGA), en m¨¢s de 15 a?os, se deja sentir en la ciudad. Hay carteles en las marquesinas de los ajados autobuses angelinos, pero tambi¨¦n piquetes constantes a las puertas de estudios y sedes de oficinas de Sunset Boulevard, donde los coches que pasan junto a ellos le dan duro al claxon en se?al de apoyo a quienes llevan camisetas azules y pancartas de protesta.

El sindicato, que representa a m¨¢s de 11.500 guionistas, decidi¨® acudir a la huelga el 2 de mayo despu¨¦s de no alcanzar un acuerdo con la Amptp a la hora de renovar su contrato colectivo para los pr¨®ximos tres a?os. Desde la WGA aseguraban que, pese a que los proyectos se han multiplicado desde la pandemia, en 2005 un guionista ganaba una media de 277.000 d¨®lares anuales (unos 252.000 euros) cuando en 2021, casi dos d¨¦cadas despu¨¦s y con una inflaci¨®n galopante, ganaba unos 260.000 (236.000 euros). En 2007 las protestas llevaron a una huelga que se alarg¨® m¨¢s de tres meses, desde noviembre de ese a?o hasta febrero de 2008.

Por el momento, se han paralizado los rodajes de muchas series, no tanto de pel¨ªculas, ya con los guiones escritos. Pero la huelga s¨ª ha afectado a los programas en directo, los talk shows nocturnos, como el de Jimmy Kimmel o Saturday Night Live, que repiten antiguos espacios al no contar con guionistas. De hecho, est¨¢ por ver qu¨¦ pasa con la temporada de premios, en concreto los Emmy, cuyas nominaciones se anunciaron el mi¨¦rcoles y que tienen tres fechas posibles: la inicial, septiembre; la que quieren los premios, en noviembre; y la que desea Fox, en enero.

El poder de los sindicatos del mundo del cine es tal que el 30 de junio el Ayuntamiento de la ciudad lleg¨® a aprobar una resoluci¨®n por la que apoyaba firmemente a los guionistas, a los que llama ¡°el futuro de Hollywood¡± y con los que ha expresado su ¡°solidaridad¡±, asegurando que ¡°como todos los trabajadores, los guionistas merecen ser pagados por lo que valen, y su trabajo merece dignidad¡± ¡°Es hora de que los estudios lo reconozcan, se sienten a negociar y acaben con esta huelga¡±.

¡°Durante mucho tiempo, la industria del entretenimiento ha sido considerada la columna vertebral de la econom¨ªa de la regi¨®n, y la WGA representa a decenas de miles de angelinos¡±, afirm¨® el consejo municipal en un comunicado. ¡°Pero el modelo comercial cambiante de la industria del entretenimiento hacia los servicios de streaming ha dejado a muchos mal pagados y con un exceso de trabajo. Ahora, los guionistas se enfrentan al mayor asalto en cuanto a las compensaciones y las condiciones laborales que han visto en toda una generaci¨®n, junto a otros sectores de la industria como actores y tramoyistas, que tambi¨¦n est¨¢n luchando para llegar a fin de mes¡±.