Meryl Streep, Premio Princesa de Asturias de las Artes: ¡°Nadie hace nada en Hollywood a menos que piense que va a ganar mucho dinero¡±

Cuando lleg¨® al hotel de la Reconquista, el mi¨¦rcoles en Oviedo, Meryl Streep se puso a bailar al ritmo de la banda de gaitas que la recib¨ªa. Por la noche, al entrar en el Palacio de Congresos para charlar con Antonio Banderas, la actriz estadounidense se tumb¨® alegremente en el sof¨¢ que la esperaba, ante la hilaridad y el aplauso de un auditorio repleto con 2.000 personas. Streep se est¨¢ cultivando en Asturias una imagen de celebridad simp¨¢tica y desenfadada en mitad de la rigidez protocolaria y a?il de los Premios Princesa de Asturias, galard¨®n que recibir¨¢ este viernes.

Meryl Streep (Nueva Jersey, Estados Unidos, 74 a?os), adem¨¢s de simp¨¢tica, se ha convertido con el paso los a?os en la figura estereot¨ªpica de la actriz respetada internacionalmente que, adem¨¢s, no tiene remilgos en comprometerse con causas sociales, como el feminismo (en ocasiones ha levantado las iras de Donald Trump, que hizo del progresismo de la actriz objetivo de sus dardos tuiteros). Meryl Streep, premio Princesa de Asturias de las Artes 2023, est¨¢ cayendo bien.

Este jueves, la actriz, vestida de riguroso negro y gruesas gafas de pasta, ha llegado a la Escuela Superior de Arte Dram¨¢tico (ESAD) de Gij¨®n ante el delirio de los fans que la esperaban en la puerta y los estudiantes que aguardaban dentro. La tra¨ªan para presenciar algunos fragmentos hilados de obras interpretadas por los estudiantes. Por ejemplo, El caballero de Olmedo, de Lope de Vega, o La vida es sue?o, de Calder¨®n de la Barca, mezcladas con otras piezas m¨¢s contempor¨¢neas. Por supuesto, apareci¨® Federico Garc¨ªa Lorca, con Do?a Rosita. Streep presenci¨® todo el espect¨¢culo, flanqueada por su hermano Harry William, que la acompa?a en su periplo asturiano, con el rictus amable y autoconsciente de quien sabe que la est¨¢n observando mientras observa. Le pusieron subt¨ªtulos.

Streep entr¨®, vio el espect¨¢culo durante media hora, aplaudi¨® de pie, apasionadamente, y luego dirigi¨® algunas palabras a los asistentes que la escuchaban con la fe con la que se escucha a un or¨¢culo. ¡°La vida est¨¢ llena de contradicciones, y hacer teatro consiste en resolver esas contradicciones. Hacer teatro es como esculpir en la nieve¡±. Alguien le pregunt¨® si le quedaban a¨²n sue?os por cumplir. ¡°S¨ª, todav¨ªa tengo sue?os por cumplir, tengo la cabeza llena de cosas¡±, y rompi¨® a llorar emocionada. Tambi¨¦n llor¨® torrencialmente el ni?o que fuera le esperaba con una foto y que puedo disfrutar de la firma y de la atenci¨®n de la actriz, en mitad de una mel¨¦ de periodistas y rudo personal de seguridad. Fue una ma?ana de l¨¢grimas y lluvia.

Contra la celebridad

Streep ya hab¨ªa hablado la noche anterior con Antonio Banderas. ¡°Cuando era m¨¢s joven, pensaba que era fr¨ªvolo ser actriz, me parec¨ªa vanidoso y tonto, pero cuando empec¨¦ a crecer entend¨ª el poder y valor de este oficio¡±, relat¨®. Tambi¨¦n explic¨® que el ¡°famoseo¡± y la ¡°celebridad¡± la aterrorizan todav¨ªa hoy en d¨ªa; aunque con la soltura que muestra en los eventos nadie lo dir¨ªa. ¡°La ficci¨®n es un lugar seguro para estar loco. En la vida real no puedes estar loco, tienes que ser responsable¡±, a?adi¨®.

Habl¨® sobre sus inicios en la actuaci¨®n, sobre la necesidad de expresarse, sobre la adoraci¨®n al dinero en la industria de Hollywood: ¡°Nadie hace nada en Hollywood a menos que piense que va a ganar mucho dinero¡±. Tambi¨¦n tuvo opiniones sobre alguno de los grandes temas de nuestro tiempo, como la inteligencia artificial, que, seg¨²n la actriz, ¡°va a cambiar todo y mucho m¨¢s r¨¢pidamente de que estamos preparados¡±. Las preguntas arrecian en ese lugar en el que la revoluci¨®n tecnol¨®gica roza con la industria audiovisual: ¡°?El p¨²blico querr¨¢ eso? ?Va a querer personajes imaginarios sin vida o va a querer seres humanos?¡±, reflexion¨®. ¡°Adem¨¢s, la capacidad de verificar los eventos y acontecimientos va a ser cada vez m¨¢s dif¨ªcil¡±. Lo estamos viendo a diario.

¡°Ha envejecido como el buen vino¡±

La Escuela Superior de Arte Dram¨¢tico se encuentra en el mastod¨®ntico complejo arquitect¨®nico de la Universidad Laboral, un gran hito de la arquitectura franquista, mezcla de neoherreriano y neocl¨¢sico. Impresiona por sus grandes dimensiones y su tono solemne, casi imperial. All¨ª, antes de la llegada de Streep esperaban algunos de sus fans irredentos en una ma?ana de orbayu y grisura asturiana. Por ejemplo, la gijonesa Piedad, que analizaba con finura: ¡°Meryl me gusta como profesional y como persona, representa a la mujer empoderada laboralmente, creo que lo ha cumplido todo. He seguido sus pel¨ªculas y veo que ha envejecido como el buen vino. Sus papeles han ido a mejor¡±.

En el vest¨ªbulo de la escuela, una multitud de aspirantes a actores, con esa pintas variopintas que gastan los j¨®venes artistas, esperaban entre nerviosos y euf¨®ricos, con algunos gritos de los responsables para poner orden en el gallinero. ¡°Estoy muy nerviosa, porque siempre he admirado a Meryl Streep¡±, dec¨ªa Lola N¨²?ez Prieto, que ha venido desde el Centro de Imagen y Sonido de Langreo, donde estudia realizaci¨®n. ¡°Me encanta la versatilidad que tiene y la elecci¨®n de sus papeles, no suele hacer pel¨ªculas de esas que tiene secuelas y precuelas... Su carrera es extensa y admirable: desde peque?a me ha inspirado¡±. Esa carrera extensa y admirable ha dado su fruto, como en una idealizaci¨®n meritocr¨¢tica. Streep es la persona que m¨¢s veces ha sido nominada para el Oscar en la historia de la humanidad. En 21 ocasiones, tres de las cuales se lo ha llevado a casa (con Kramer contra Kramer, La decisi¨®n de Sophie y La dama de hierro). Tiene tres Emmy. Dos Bafta. El Donostia del festival de San Sebasti¨¢n. Y el de mejor actriz en Cannes. Ahora agrega uno nuevo a su nutrida colecci¨®n: el Princesa de Asturias.