Klose y Podolski, duo letal
Podolski, con una gran actuaci¨®n, se convirti¨® en la estrella de un partido controlado de principio a fin por Alemania.
Doce minutos. Esos son los que ha necesitado Alemania para convertirse en la primera selecci¨®n clasificada para cuartos de final, los que tardaron Klose y Poldolski en convertir el partido en un aut¨¦ntico suplicio para una decepcionante selecci¨®n sueca.
Lo que mal empieza, mal acaba. Eso debe pensar Lars Lagerback, el seleccionador sueco, despu¨¦s de asistir, con entrada de lujo, al mon¨®logo recital dado por Alemania en los octavos de final.
Mal empieza, porque su planteamiento, del partido de octavos de final ante la todopoderosa anfitriona, a los 3 minutos se hab¨ªa venido abajo. Apostaron por un sistema ambicioso pero peligroso, con Linderoth s¨®lo en el centro del campo y con un tridente atacante poderoso: Ibrahimovic, Ljungberg y Larsson. Pero ah¨ª estaban Klose y Podolski, que se encargaron de destrozar el sistema y los sue?os suecos de llegar a cuartos de final. En apenas 12 minutos, la pareja letal alemana hab¨ªa fabricado tres claras ocasiones de gol, y dos de ellas se materializaron en el marcador, ambas por Podolski.
J¨¹rgen Klinsmann aseguraba durante la semana que si perd¨ªan, si no se clasificaban para la siguiente ronda, ser¨ªa una cat¨¢strofe. Que el objetivo de esta Alemania no debe ser inferior a los octavos de final. ?Qu¨¦ pupilos m¨¢s aplicados! En 12 minutos Alemania estaba tan crecida que se recreaba, se luc¨ªa, estaba tan c¨®moda sobre el terreno de juego que jugaba para gustarse, para deleitar a una afici¨®n que adorar¨¢ el Alianz Arena de M¨²nich (all¨ª comenz¨® la andadura mundialista de los anfitriones ganando 4-2 a Costa Rica).
Y mal acaba, porque Suecia equipo no fue capaz de reaccionar y ser un rival medianamente peligroso para Alemania. Suecia termin¨® rota, destrozada por tanto esfuerzo realizado. Lagerback prob¨® por colocar a Kallstrom en el centro del campo, ayudando a Linderoth, por retrasar a Ljungberg, por cerrar la posici¨®n de Wilhelmsson y el sistema se rompi¨® todav¨ªa a¨²n m¨¢s, porque en su intento por enmendar el error se qued¨® sin centro del campo, sin banda derecha, sin delantera... Todo un coladero para una inspirada Alemania que pudo ampliar su ventaja en varias ocasiones y que, una y otra vez, chocaba contra el ¨²nico sueco que plantaba cara, el meta Isaksson.
El fin
La segunda parte fue un suplicio para la selecci¨®n sueca. Con un hombre menos, con Ibrahimovic desaparecido, con Linderoth desbordado, con un dos cero en contra en el marcador, y para colmo, con un penalti fallado, en el minuto 52 por Larsson. Alemania baj¨® el ritmo y aunque Suecia lo intentaba, estaba tan cansada que ni el m¨¢s grande de los errores alemanes se convert¨ªa en una m¨ªnima posibilidad para remontar.
Los minutos finales fueron para Klose, para que buscara el gol. El actual pichichi del Mundial quer¨ªa marcar, merec¨ªa conseguir un gol despu¨¦s de haberle puesto dos en bandeja a Podolski.
Alemania sigue adelante. Suecia se despide con una triste imagen, la que tanto les hab¨ªa costado levantar tras el empate el d¨ªa del debut en el Mundial ante Trinidad y Tobago.
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