"En 2003 quise incorporar a Guardiola y Laporta se opuso"
Las encuestas sit¨²an a Sandro Rosell (Barcelona, 1964) como el favorito para ganar las elecciones a la presidencia del FC Barcelona del pr¨®ximo 13 de junio. As¨ª lo interpretan sus adversarios, que le han situado en el centro de su diana, y el presidente, Joan Laporta, compa?eros de viaje en los comicios de 2003 y enfrentados desde la dimisi¨®n de Rosell como vicepresidente en 2005 .
Pregunta. Si va por la calle y alguien le llama ?Alejandro!, ?se da la vuelta?
Respuesta. No, Alejandro, seguro que no. Si me llaman Alexandre, s¨ª, desde el 11 de mayo. Parece que ahora me llamo Sandro y tambi¨¦n Alexandre [nombre que figura en las papeletas electorales y con el que le llama el presidente Joan Laporta] y, por tanto, tengo que girarme.
P. ?Y cu¨¢nto tiempo hace desde la ¨²ltima vez que le llamaron Sandrusco? [as¨ª le llamaba Laporta cuando eran amigos]
R. Nadie me llama Sandrusco desde 2005, cuando dimit¨ª como vicepresidente del Bar?a.
P.?Ha vuelto alguna vez al Speak Easy, el bar en el que intent¨® firmar la paz con Laporta?
R. S¨ª, es un sitio que me gusta mucho.
P. ?Qu¨¦ significa que dos personas como Josep Llu¨ªs N¨²?ez y Justo Molinero le respalden?
R. Pues que dos socios m¨¢s nos apoyan para ser candidatos. Su apoyo, como el de cualquier otro socio, es bienvenido. Obviamente son dos personas muy significativas, uno por haber sido presidente y el otro por ser un personaje del mundo de la comunicaci¨®n. Pero para nosotros, todos los socios son iguales, es el eje central de nuestro proyecto.
P. Hay quien dice que incluso tiene el apoyo de los Boixos Nois...
R. Eso no s¨¦ de d¨®nde sale, a mi no me consta. Lo que hemos hecho es apoyar una iniciativa que une a los diferentes grupos de animaci¨®n del Camp Nou, bajo tres premisas innegociables: la no violencia, el respeto hacia todo el mundo y el apoyo constante al equipo. Ni nos pasa por la cabeza tirar tierra sobre el trabajo realizado desde el 2003 en el que algunos miembros de nuestra precandidatura participamos, sino todo lo contrario, y actuaremos con firmeza ante cualquier circunstancia que ponga en peligro las se?as de identidad de esta iniciativa ¨²nica en la historia del FC Barcelona.
P. ?Es verdad que Rosell provoca un temor reverencial, porque ya se le supone ganador y presidente y, por tanto, es mejor estar a buenas con usted?
R. No creo que sea as¨ª. Lo que s¨ª veo es un cierto recelo por parte de algunos de los precandidatos. Eso me da qu¨¦ pensar. No he perdido naturalidad, pero s¨ª que desgraciadamente estoy m¨¢s en guardia.
P. Tambi¨¦n se le acusa de tener una empresa pantalla que ha actuado de forma fraudulenta en Brasil.
R. Soy empresario y tengo tratos con multitud de instituciones y federaciones de todo el mundo. Por lo tanto, es posible que alguno haya podido cometer alguna irregularidad. En el caso de Brasil lo ¨²nico que hay es un requerimiento informativo, ni proceso, ni demanda, ni mucho menos estoy encausado. Algunos precandidatos se han pasado de la raya.
P. ?No se trata de un ajuste de cuentas por la oposici¨®n que usted ha ejercido, en silencio o no, desde su salida del club?
R. Yo no he hecho oposici¨®n, ni en silencio ni sin ¨¦l. Yo he ejercido de socio y me he presentado cuando tocaba, con la excepci¨®n de cuando se llev¨® a cabo el voto de censura, con el que, por otro lado, yo no tuve nada que ver. No conozco a Oriol Giralt, su promotor, pero algunos nos presentamos en p¨²blico para que la gente supiera que si la moci¨®n de censura prosperaba, nosotros nos ¨ªbamos a presentar, que no habr¨ªa un vac¨ªo de poder como se intent¨® vender desde el club.
P. A veces, por su discurso, parece el candidato continuista m¨¢s que el rupturista.
R. Queremos una campa?a en paz y tranquila porque el Bar?a merece juego limpio. As¨ª respetamos al socio y a la instituci¨®n. No somos continuistas, pero s¨ª continuadores con el modelo deportivo actual, al que, en su d¨ªa, ya contribuimos con nuestro granito de arena para cambiar la tendencia negativa y convertirla en ganadora.
P. Justamente a usted siempre se le ha visto como el portador del ¨¢lbum de cromos, el directivo que fich¨® a Ronaldinho, la persona capaz de contratar a los mejores jugadores. Ahora, sin embargo, no se piden fichajes para el equipo sino un presidente que gestione mejor el club. ?C¨®mo ser¨¢ su papel?
R. No ser¨¦ intervencionista, pero es bueno que el presidente del Bar?a conozca el mundo del deporte, no ya para elegir a los jugadores, que tiene que hacerlo el entrenador y el secretario t¨¦cnico, si no porque tambi¨¦n hay temas de derechos de televisi¨®n, de relaciones federativas, de pensar c¨®mo tiene que ser la liga del futuro. En Estados Unidos, que el presidente de un club conozca el mundo del deporte es un punto a favor.
P. Otra de las personas que tambi¨¦n le apoya es Pere Gratac¨®s, famoso porque era el entrenador de su plan B cuando Frank Rijaard no funcionaba y se planteaba cambiarlo. Usted apostaba por Gratac¨®s y no por Guardiola?
R. Gratac¨®s no ser¨¢ el secretario t¨¦cnico, pero si ganamos las elecciones, nos gustar¨ªa que se incorporara a la estructura del f¨²tbol base. Dicho esto, hay que tener en cuenta que Gratac¨®s es tambi¨¦n de la escuela de Guardiola, de Tito Vilanova y dem¨¢s.
P. En 2003 hab¨ªa gente de su candidatura que criticaba a Guardiola porque formaba parte de la lista de Lluis Bassat...
R. Yo nunca lo he criticado. Es m¨¢s intent¨¦ convencerle de que se incorporara con nosotros en 2003. Le llam¨¦ tres veces para que se mantuviera al margen y despu¨¦s se incorporara con nosotros, y entonces Laporta se opuso.
P. Para la junta actual, y tambi¨¦n para los continuistas, Johan Cruyff es su icono futbol¨ªstico. No parece que usted tenga una buena relaci¨®n con el presidente de honor del club ?no?
R. Nadie puede dudar de la importancia que ha tenido en la historia de nuestro club. Nuestra relaci¨®n no es buena ni mala, es normal. Como presidente de honor del Bar?a, tendr¨¢ todo el respeto que se merece por mi parte.
P. ?Insiste en que la deuda del club es estratosf¨¦rica cuando el tesorero la ha cifrado en 282 millones de euros?
R. Al cierre de la temporada 2009, la deuda es de 489 millones, seg¨²n el informe econ¨®mico del propio club.
P. Una cosa es la deuda neta y otra la bruta.
R. Eso es como quien est¨¢ pagando 3.000 de euros de hipoteca y, por otro lado, tiene unos ingresos de 1.000 euros mensuales. Su deuda no son 2.000 euros; su deuda sigue siendo de 3.000 euros, independientemente de que ingrese esos 1.000 euros, puesto que si no haces frente al pago de la hipoteca, te embargan el piso.
P. Con el actual panorama preelectoral, hay quien se pregunta qu¨¦ pintaba usted en la junta de 2003?
R. Mirado con perspectiva, pienso que en ese momento no formamos un equipo compacto si no un conglomerado de personas, que son cosas distintas.
P. ?Qu¨¦ les dir¨ªa a aquellos que crean que Rosell, en el fondo, es y ser¨¢ igual que Laporta, para bien y para mal?
R. El actual presidente y yo no nos parecemos ni en el fondo ni en la forma.
P. ?Tambi¨¦n se le supone pr¨®ximo a Florentino P¨¦rez?
R. Con ¨¦l tengo una relaci¨®n cordial, pero siempre he mantenido disputas, empresarial y deportivamente.
P.?Qu¨¦ relaci¨®n tiene con Jos¨¦ Mourinho?
R. Muy poca, he hablado con ¨¦l una vez en toda mi vida.
P.?Es usted el candidato de la grandilocuencia. La magna escenificaci¨®n de su propuesta no tiene nada que ver con la humildad de su discurso?
R. Si lo dice por la sede, esto est¨¢ montado con un zapato y una alpargata. No es oro todo lo que reluce. Aunque no lo parezca, la austeridad ha imperado a la hora de montar el escenario. Hemos tenido la suerte de que el local quedaba vac¨ªo estos dos meses y, adem¨¢s, nos ha salido muy bien de precio.
P. ?Le asusta que pueda pasarle lo que a Bassat en el 2003 cuando perdi¨® las elecciones despu¨¦s de ser el candidato m¨¢s votado en los sondeos?
R. Seremos muy prudentes con los resultados tan favorables que han salido hasta ahora. Nos mantienen en alerta.
P. ?Cu¨¢nta gente se afeita diariamente en su barber¨ªa?
R. Pues bastante. Ahora mismo acaba de hacerlo el ex presidente Pascual Maragall. La idea es reproducir en la sede los escenarios donde siempre se ha hablado de f¨²tbol: las mesas de domino y de butifarra, el futbol¨ªn, la barber¨ªa etc.
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