El M¨¢laga sobrevive a una avalancha

El Almer¨ªa desaprovech¨® la avalancha de ocasiones que propici¨® el M¨¢laga, cuya debilidad defensiva va camino de lo legendario. El equipo de Juanma Lillo, que no conoce la victoria en el estadio de los Juegos Mediterr¨¢neos -quiz¨¢ el campo m¨¢s fr¨ªo de la Liga- desperdici¨® un penalti, mand¨® tres tiros al poste y desbarat¨® al menos otras tres ocasiones claras de gol, algunas de ellas con Rub¨¦n ya batido.

El M¨¢laga, que salv¨® un punto por intercesi¨®n divina, fall¨® en su objetivo de mantener su porter¨ªa, si no a cero, al menos razonablemente segura. La madurez defensiva de los de Jesualdo Ferreira s¨®lo dur¨® los primeros veinte minutos, en la que ambos equipos se dedicaron a tantearse y en la grada se barruntaba un empate sin goles.

Tras los primeros minutos de especulaci¨®n en horizontal, los velocistas almerienses Crusat y Piatti comenzaron a carburar y a internarse por sus bandas, cada vez con m¨¢s facilidad, mientras que los tiros lejanos del M¨¢laga apenas inquietaban a un s¨®lido Diego Alves. Uche, servido eficazmente por ambos lados, pon¨ªa el miedo en la titubeante defensa del M¨¢laga.

Lillo se hab¨ªa estudiado bien las fortalezas del equipo de Ferreira. En el primer tiempo, los puntales malague?os, especialmente Quincy y Eliseu, estuvieron anulados. Adem¨¢s, el interior portugu¨¦s del M¨¢laga demostr¨® que ech¨® en saco roto la fil¨ªpica de su entrenador tras el indulto del Comit¨¦ de Competici¨®n, y volvi¨® a ver una est¨²pida tarjeta roja por dar un manotazo a Juanma Ortiz cuando forcejeaban por un bal¨®n.

Un destello de astucia de Apo?o, al empezar el segundo acto, permiti¨® a Quincy adelantar al M¨¢laga. Luego Rub¨¦n, uno de los mejores del plantel de Ferreira, salv¨® un penalti injusto. Sin embargo, casi al final, el Almer¨ªa se hart¨® de fallar, y Uche se ali¨® con Corona para aprovechar las rebajas defensivas de los malague?os, que pueden dar gracias por el resultado.

Almer¨ªa 1 - M¨¢laga 1