La dama de la gimnasia brit¨¢nica resiste entre las mejores
La primera medallista de su pa¨ªs defiende su t¨ªtulo continental en paralelas, roza el bronce el suelo y alarga su carrera hasta Londres 2012
Beth Tweddle se define a s¨ª misma como una profesional de la gimnasia, algo curioso en un deporte muy minoritario y evidentemente amateur. La brit¨¢nica ha conseguido vivir de sus saltos y cierto reconocimiento en su pa¨ªs, loco por el f¨²tbol y donde la gimnasia no tiene tradici¨®n. Pero gracias a sus ¨¦xitos y al dinero que riega el sue?o ol¨ªmpico de Londres 2012, decenas, centenares de ni?as practican hoy gimnasia en Reino Unido, y sus equipos, tambi¨¦n el masculino, se han convertido en peque?as potencias continentales. Tweddle, que tiene ya 26 a?os, ha dado en los Europeos de Berl¨ªn un paso m¨¢s en su evoluci¨®n: ha defendido su t¨ªtulo de paralelas, el aparato desde el que se hizo un nombre internacional hace casi una d¨¦cada, y ha rozado el bronce en suelo, a pesar de llegar muy lejos de su mejor forma f¨ªsica.
Dec¨ªan los expertos que Tweddle no ten¨ªa nada que hacer en estos Europeos, que llegaba baja de forma. Decidi¨® tomar parte solo en dos aparatos, suelo y paralelas, para defender los t¨ªtulos continentales que logr¨® el a?o pasado en casa, en Birmingham.
Pero esta gimnasta siempre se ha crecido en las dificultades. Desde que empez¨® a entrenarse en Liverpool con siete a?os hasta que logr¨® demostrar al peque?o y sectario mundo de la gimnasia -mandan rusas, rumanas, chinas y americanas y el resto tiene que hacer una aut¨¦ntica gesta para subirse al podio- que una inglesa tambi¨¦n pod¨ªa. Lo hizo en 2002, cuando consigui¨® su primera medalla en un gran torneo internacional, el bronce europeo. En las paralelas, claro. Porque el programa de Tweddle naci¨® de ese aparato con un complej¨ªsimo ejercicio que ha ido enrevesando con los a?os para seguir siendo competitivo, ahora una suelta m¨¢s, ahora una conexi¨®n m¨¢s compleja. Su ejercicio de ayer fue el m¨¢s dif¨ªciles de todas las participantes -6,700 puntos de nota de partida- y aunque no fue la m¨¢s precisa le vali¨® para colgarse el oro.
Hoy en el suelo sus mortales tambi¨¦n han sido los m¨¢s complejos, pero no ha sido suficiente. Se ha quedado a 0,175 mil¨¦simas del bronce.
La gimnasia brit¨¢nica est¨¢ de enhorabuena desde que esta jovencita empez¨® a competir. De la mano de Amanda Harrison, ol¨ªmpica en 1984, cuando las brit¨¢nicas formaban parte del pelot¨®n de los torpes, ha logrado cinco medallas mundiales -tres oros y dos bronces- y 12 metales continentales -seis oros, cinco platas y un bronce-, pero tiene pendiente el reto ol¨ªmpico, donde por dos veces acab¨® cuarta, el peor puesto posible, a pesar de partir entre las favoritas. M¨¢s m¨¦rito a¨²n que esa tonelada de medallas tiene el haberse convertido en la l¨ªder de un renovado equipo brit¨¢nico, que el a?o pasado se colg¨® la plata europea, algo impensable hace muy poco.
Tal vez por eso Tweddle, que hab¨ªa anunciado que se retirar¨ªa este a?o, ha decidido alargar su carrera hasta los Juegos de Londres 2012, sus Juegos. Pero con otro esp¨ªritu. "Ya no puedo seguir el mismo r¨¦gimen de entrenamientos por el impacto que tienen en mi cuerpo", reconoc¨ªa hace poco a The Guardian; "Todav¨ªa amo la gimnasia y este estilo de vida, pero seis horas de trabajo al d¨ªa puede resultar tedioso y obviamente mi cuerpo est¨¢ dici¨¦ndome: por favor, para". Le queda un a?o largo para ello.
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