La loter¨ªa elige al Athletic
Los rojiblancos aprovechan los errores de Osasuna y remontan con 10
Cuando el f¨²tbol se ausenta, es decir, se convierte en una sucesi¨®n de choques, cabezazos, carreras desbocadas y misiles a¨¦reos, la loter¨ªa primitiva suele ocupar su lugar. El Athletic es un asiduo a ese sorteo ¨²ltimamente y ayer le toc¨® el premio gordo jugando apenas dos columnas ante un Osasuna que tampoco fue generoso en la inversi¨®n y acab¨® contagiado por su enemigo.
Su primera jugada razonable, mejor dicho, su ¨²nica jugada razonable, pase del central, San Jos¨¦, raso, tocado a la banda, en vez de alocado, cual era la costumbre, y centro templado de David L¨®pez, acab¨® con un cabezazo estiloso de Llorente. Era el empate del partido,porque el Athletic hab¨ªa encajado antes un gol que en cierto modo demostraba su psicolog¨ªa. Toquero est¨¢ tan acostumbrado a bajar los misiles hacia el ¨¢rea que no se dio cuenta de que viv¨ªa en la suya e hizo lo propio: Kike Sola marc¨® de media volea entre una nube de jugadores.
OSASUNA 1 - ATHLETIC 2
1 - Osasuna: Ricardo; Nelson, Sergio, Miguel Fla?o, Monreal; Pu?al, Nekounam; Cejudo (Soriano, m.67), Pandiani (Coro, m.77), Camu?as (Lekic, m.86); y Kike Sola.
2 - Athletic Club: Iraizoz; Iraola, Ekiza, Amorebieta, Castillo; Gurpegui (David L¨®pez, m.4), Iturraspe, Orbaiz (Susaeta, m.56), Muniain; Toquero (San Jos¨¦, m.61) y Llorente.
Goles: 1-0, m.51: Kike Sola. 1-1, m.69: Llorente. 1-2, m.90: Muniain.
?
Arbitro: Paradas Romero (Comit¨¦ Andaluz). Expuls¨® por doble tarjeta amarilla al jugador de Osasuna Sergio (m.10 y m.87) y al jugador del Athletic Castillo (m.29 y m.57). Amonest¨® a Pandiani (m.40), Pu?al (m.62) y Soriano (m.79), de Osasuna, y a Ekiza (m.50), Iturraspe (m.74), Llorente (m.85), Muniain (m.90) e Irairoz (m.92), del Athletic.
Incidencias: Partido, declarado de alto riesgo, de la trig¨¦sima segunda jornada de Liga disputado en el estadio Reyno de Navarra ante 18.239 espectadores. Osasuna celebr¨® el 'D¨ªa de las Pe?as'
La segunda columna se la encontr¨® en el suelo Muniain, uno de los dos futbolistas razonables del encuentro -el otro fue Camu?as- cuando andaban eligiendo n¨²meros Nelson y Ricardo y dejaron el bal¨®n en los pies del peque?o delantero rojiblanco. El chico, al que abroncaron todo el partido, por unas declaraciones de hace meses, ?anda que tembl¨®!: se la cambi¨® de pie y con la derecha la puso en el palo contrario desde m¨¢s de 30 metros, a puerta vac¨ªa.
Tantas declaraciones y ruedas de prensa dejaron mudos a los futbolistas en el campo. Gurpegui, el caldo de cultivo de los desmanes dial¨¦cticos, se retir¨® a los dos minutos con un fort¨ªsimo golpe en la cabeza tras atacar tarde el primer bal¨®n a¨¦reo de los cientos del partido. Al Athletic le cambi¨® el encuentro.
M¨¢s a¨²n cuando a falta de m¨¢s de media hora se qued¨® con 10 por expulsi¨®n de Castillo y habiendo encajado un gol. Sonaba a sonata osasunista. El Athletic ten¨ªa aires fantasmag¨®ricos, llenos de impotencia. Pero los rojillos le dieron terreno, es decir, vida, y la loter¨ªa quiso premiar a unos muchachos con un regalo excesivo: dos goles era demasiada renta para una sola jugada, para una sola ocasi¨®n en m¨¢s de 90 minutos.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.