A Red Bull se le cruzan los cables

Faltaban 27 minutos para que la primera sesi¨®n de ensayos libre del Gran Premio de Turqu¨ªa concluyera cuando Sebastian Vettel abord¨® la curva ocho de Istanbul Park, un caracol con cuatro v¨¦rtices que se enrosca como un demonio, pis¨® la hierba de la zona exterior y termin¨® estampado contra el muro. El accidente provoc¨® que el entrenamiento se detuviera durante unos minutos, y el piloto alem¨¢n, el actual campe¨®n y l¨ªder del campeonato, ya no pudo volver a subirse a su RB7 en todo el d¨ªa. Vettel destroz¨® algunas piezas sin recambio que, poco despu¨¦s de que se atizara el casta?azo, salieron en avi¨®n desde la sede de la escuder¨ªa, en Milton Keynes (Gran Breta?a), con rumbo a Turqu¨ªa.

"No pude hacer gran cosa para impedir que el coche golpeara el muro esta ma?ana. Lo m¨¢s importante, en cualquier caso, es que yo me encuentro bien. Desgraciadamente no he podido tener listo el coche, me sabe muy mal por los chicos [los mec¨¢nicos]", ha dicho Vettel acerca del accidente que ha dejado su monoplaza pr¨¢cticamente para el desguace. El siniestro, por lo dem¨¢s, ha dejado al descubierto unos misteriosos cables que asomaban por la parte inferior del morro del b¨®lido y que han sido el inicio de muchas especulaciones. Los hay que aseguran que solo se trata del mecanismo de las c¨¢maras de abordo que incorporaba el coche, aunque tambi¨¦n hay quien considera que puede ser uno de los elementos que comience a explicar, aunque a¨²n no se sabe en qu¨¦ t¨¦rminos, el recurrente argumento del aler¨®n delantero flexible que contribuye a que el Red Bull se haya convertido en la referencia de la parrilla.