La eterna pelea de Calatayud

La carrera de Juan Jes¨²s Calatayud no ha sido un cuento de hadas. El guardameta de Antequera (1979) ha conocido la dureza del banquillo, la complicada lucha por ascender a Primera y la crudeza de perder la m¨¢xima categor¨ªa. Incluso pas¨® un a?o apartado en el Racing de Santander, por desavenencias con la directiva y el entrenador, Marcelino. Situaciones complicadas que su car¨¢cter le ha ayudado a superar. El mismo que tendr¨¢ que emplear en su nueva etapa en el Mallorca para disputarle el puesto entre los palos a Aouate, el guardameta titular en las ¨²ltimas campa?as en el conjunto bermell¨®n.

A sus 31 a?os, a Calatayud no le asusta tener que volver a pelearse por los minutos que tanto le cost¨® conseguir, hasta afianzarse en la meta del H¨¦rcules: "Yo vengo a competir. Cuando firmo por un club no lo hago ni como primer guardameta, ni como segundo, sino como parte del club. Siempre he tenido que pelear y ha sido mi rendimiento lo que me ha permitido seguir jugando. Cuando llegas a un lugar nuevo lo que tienes que hacer es remar m¨¢s fuerte", explica el guardameta, que aterriza en el Mallorca despu¨¦s de tres temporadas en la entidad levantina que se cerraron con un broche amargo: "Aunque creo que deportivamente estoy en mi mejor momento, esos han sido mis mejores a?os. All¨ª logr¨¦ encontrar la regularidad que no hab¨ªa tenido antes en otros sitios. Pero en la ¨²ltima temporada, en el descenso, se juntaron muchas cosas. Algunas que han salido en la prensa y otras que no. Temas extradeportivos que dejaban al f¨²tbol de lado. Problemas disciplinarios, de cobros, institucionales...".

Pero el peor a?o de la carrera de Calatayud fue su segundo curso en Santander, apartado de sus compa?eros, sin ninguna opci¨®n de jugar. Optimista, el portero asegura que aprovech¨® aquella experiencia para endurecerse: "De todo se aprende. De ah¨ª saqu¨¦ la constancia que te da el tener que entrenarte solo durante todo un a?o. A¨²n les estoy muy agradecido al preparador de porteros, Pedro Alba, y a Javier Ceballos [servicio m¨¦dico], que me ayudaban tres veces por semana". "Su profesionalidad fue absoluta", explica el propio Alba, "¨¦l se pag¨® de su propio sueldo un preparador f¨ªsico, para mantenerse en forma. Luego entren¨¢bamos a solas o mezclados con juveniles, algo que ¨¦l siempre acept¨® de buena gana". Y es que Calatayud, pese a que siempre consider¨® injusto su castigo, no afloj¨®. "Era una situaci¨®n dif¨ªcil. Los porteros siempre somos algo m¨¢s duros mentalmente, porque sabemos lo que es el banquillo, pero... Pese a ello, ¨¦l segu¨ªa teniendo inquietud por mejorar cada d¨ªa y se entrenaba como un desesperado", recuerda el preparador.

Ahora, la ilusi¨®n por prepararse del guardameta goza de una nueva motivaci¨®n en Mallorca. "Michael Laudrup [primer entrenador] y Miguel ?ngel Nadal [segundo] son jugadores con los que he crecido y que han sido mis ¨ªdolos. Las dos sesiones que llevamos hasta ahora han sido incre¨ªbles", asegura Calatayud, cercano a la euforia, "desde que fich¨¦ mis amigos me han estado llamando dici¨¦ndome: '?Te acuerdas de que eran tus h¨¦roes de peque?o?'. Es algo impresionante". Aunque no le haga falta, Calatayud se siente espoleado para volver a luchar.