El hoy del Madrid y el ma?ana cul¨¦

Sostiene Karanka con desafecto e indiferencia que antes y despu¨¦s de Guardiola hubo y habr¨¢ Liga. Claro, como hubo luz tras Di St¨¦fano, Kubala, Maradona o Ra¨²l, agasajado en Alemania como a¨²n lo merece en Madrid. El tiempo pasa, los mitos permanecen. Y Guardiola ya lo es, como puede que alg¨²n d¨ªa lo sea Mourinho. La falta de generosidad del portavoz del t¨¦cnico portugu¨¦s no hace m¨¢s obvio su irreverente comentario, en la l¨ªnea habitual de su jefe, que no afloja ni cuando ya calienta La Cibeles.

Quiz¨¢ no recuerde Karanka que tambi¨¦n habr¨¢ Liga tras la que est¨¢ a punto de cerrarse con su Madrid como un grandioso campe¨®n, un campe¨®n de r¨¦cords, al que no le cabe tacha deportiva alguna, solo la falta de grandeza de sus entrenadores para con su rival. No hay campe¨®n m¨¢s majestuoso que el magn¨¢nimo. Siempre, pero m¨¢xime cuando lo que subraya a¨²n m¨¢s la gran obra de este Madrid es la inmensidad de su contrario. Querer rebajar el tr¨¢nsito de Guardiola es minimizar el ¨¦xito propio.

Este Madrid merece todos los elogios que ha recibido este curso, del Bar?a y de otros. Si anoche no tir¨® serpentinas fue porque Messi a¨²n tiene cuentas goleadoras pendientes con Cristiano: est¨¢n igualados a 43 goles en la clasificaci¨®n del pichichi. El Bar?a, ante los ojos de Tito Vilanova, gole¨® al Rayo (0-7) y aplaz¨® los festejos del Madrid, que madrug¨® para despachar al Sevilla (3-0) y firmar unos registros extraordinarios: 91 puntos y 112 goles, 84 repartidos entre CR, Benzema e Higua¨ªn. Chamart¨ªn hizo pasillo al inminente ganador de la Liga. El presente es blanco; pero ma?ana ya es el futuro. En el f¨²tbol no hay treguas. Hoy es ayer.

Hay cuentas pendientes: Leo y Cristiano est¨¢n igualados a 43 goles

Anunciada la transici¨®n en el Bar?a, queda por medir a Vilanova en primer plano, un guardiolista con la losa de Guardiola. El t¨¦cnico de Santpedor oposit¨® sin chistar en Tercera y no solo contribuy¨® a ganar 13 t¨ªtulos, sino que se gan¨® el derecho a gestionar su propia salida. Discutible o no la forma de manejar su vac¨ªo desde octubre, el club, con Andoni Zubizarreta al frente, ha apostado por una l¨ªnea continuista que evite una sucesi¨®n traum¨¢tica. Se va la persona, se perpet¨²a la idea. Un guion de tanto calado que la ovaci¨®n de la grada cul¨¦ al equipo tras los varapalos con el Real y el Chelsea supone el mejor legado de Guardiola. Hasta su relato, en el Bar?a las derrotas y salidas, de Luis Su¨¢rez a Johan Cruyff, de Josep Lluis N¨²?ez a Joan Laporta, siempre fueron tormentosas.

Y queda por ver la evoluci¨®n madridista, toda vez que Mourinho ha dicho no solo que seguir¨¢ sino que el club necesita actualizarse. Dio a entender despu¨¦s del encuentro con el Bayern que se refer¨ªa a los despachos, los que ya revolvi¨® la pasada temporada al despejar a Jorge Valdano. Sobre el campo, su pol¨ªtica se hace m¨¢s imprevisible. Sus fichajes del ¨²ltimo verano apenas han dejado huella y que ayer ni calentaran Higua¨ªn y Kak¨¢ quiz¨¢ sea una pista. Mourinho, eso s¨ª, ha confirmado la fama que le precede y su segunda temporada ha mejorado la primera. El progreso del equipo ha sido notable, sobre todo cuando el banquillo ha transmitido sosiego. Con una Copa en el museo y una Liga en el bolsillo, la Champions es su objetivo primordial. Plantilla tiene para ello, y, lejos de lo que cree, no est¨¢ solo. El Madrid jam¨¢s lo ha estado. Que le pregunte a Karanka qu¨¦ hubo antes y despu¨¦s del Real Madrid: mitolog¨ªa, leyendas reconocidas universalmente por todos sus rivales.