Mito Nadal

Perm¨ªtanme empezar con una broma. ¡°Punto de inflexi¨®n¡±. As¨ª resum¨ª en este diario mi impresi¨®n sobre la final del Abierto de Australia 2012, pese a la derrota de Rafa Nadal ante Djokovic. Parece que acert¨¦. Uno nota cu¨¢ndo las cosas se dan la vuelta. En aquella ocasi¨®n, aunque el resultado era el mismo que en las seis derrotas previas, hab¨ªa diferencias que ahora se confirman con la tercera victoria seguida de Rafa sobre Nole. En 2011, el espa?ol ten¨ªa la moral pr¨¢cticamente comida, como tambi¨¦n es verdad que su juego no le lastimaba. En 2012, ha encontrado la manera de jugar y de hacerle da?o al serbio, hasta el punto de que en Par¨ªs ha quedado eliminada la ventaja psicol¨®gica. Ese factor est¨¢ ahora un poco del lado de Rafa, con el matiz de que hay que ver qu¨¦ resultado se da la primera vez que jueguen fuera de tierra batida. Eso puede marcar tendencia.

Ha quedado claro que el campe¨®n sabe c¨®mo jugarle al n¨²mero uno. Ahora empieza muchas veces el punto por la derecha de Djokovic. Contra ¨¦l cambia la tendencia de sacar el 90% de las veces al rev¨¦s, como suele hacer ante cualquier otro. En el fondo de pista tambi¨¦n es m¨¢s agresivo contra la derecha, no solo poni¨¦ndola, sino con un cambio de ritmo, porque cuando Djokovic entra de rev¨¦s es casi imposible de parar. A Rafa eso le permite adelantarse y jugar m¨¢s cerca del fondo, evitando que el serbio le abra ¨¢ngulos brutales. Eso conlleva m¨¢s riesgos, pero no queda otra. Es la manera de que Djokovic no juegue a placer.

Ni Bj?rn Borg ni nadie. Rafa es el m¨¢s grande de siempre en arcilla

Se vio el domingo. El inicio de Rafa fue perfecto. Sin huecos. Muy s¨®lido. Desbordando hasta que tuvo bola de 4-0. Ah¨ª se lio un poco con errores de derecha poco habituales en ¨¦l, aunque normales dada la tensi¨®n del momento, y se encontraron con una hora de juego bajo la lluvia. A m¨ª me record¨® a los partidos que disputaba en Alemania, en M¨²nich o Hamburgo, bajo una lluvia casi continua. Eso es molesto para los dos. Las condiciones, sin embargo, favorecieron a Djokovic por su tipo de juego. La bola, mojada, agarr¨® mucha tierra, haci¨¦ndola m¨¢s pesada. As¨ª, el golpe de Rafa ya no coge tanto efecto. Su secreto es el spin, la altura que coge su tiro, que hace arriesgado para sus contrarios anticiparse y coger la bola cuando sube, o en su defecto retroceder, cediendo demasiada cancha al rival. Cuando Djokovic golpea a la altura de la cintura es pr¨¢cticamente imbatible, y eso era lo que estaba sucediendo.

En esa situaci¨®n, vi a Rafa inc¨®modo y a Djokovic jugando a placer. La fuerte lluvia del tramo final salv¨® al espa?ol. Lleg¨® en el momento justo. La misma tormenta que le perjudic¨® tanto, favoreciendo el juego del serbio, ejerci¨® luego de salvadora, aunque ¨¦l siempre se guarda un as en la manga y consigue darle la vuelta a las peores circunstancias. Sucedi¨® lo mejor que pod¨ªa pasar, la suspensi¨®n del partido hasta la ma?ana siguiente. Por eso, el lunes gan¨® el t¨ªtulo. Lo que ha conseguido es muy grande. Yo, personalmente, no ten¨ªa dudas de que era el mejor jugador de la historia en tierra batida, pero esto se las aclara al que las tuviera. Ni Borg ni nadie. Rafa el m¨¢s grande de siempre en arcilla.