Zancada y remate

Recuperado el tranco, la sutil dinamita de su golpeo lleg¨® por defecto y a Torres le vuelven a brillar las pecas y la mirada. Y Del Bosque, que le ret¨® a volver, a demostrarse a s¨ª mismo qui¨¦n era, a llenarle de razones para confiar en ¨¦l, lo celebra. Est¨¢ feliz The Kid. Se le nota en la cara, pero tambi¨¦n en el juego. Hac¨ªa tiempo que no galopaba El Ni?o como lo hizo contra Irlanda, pura potencia para correr 50 metros, conducir con dos toques y batir al portero de un toque sutil en la jugada de su segundo gol, el tercero de la lluviosa noche. Tan distintos han sido sus pocos goles (11) en las tinieblas de un a?o complicado, que la jugada de ese tercer gol espa?ol simboliza como pocas im¨¢genes el retorno del goleador espa?ol. Sin Villa, el 7, Espa?a tiene en Torres, el 9, a su mejor tirachinas.

?¡°Hac¨ªa tiempo que no le ve¨ªa como ahora¡±, reconoce Pepe Reina, que le vio llegar a la selecci¨®n y al Liverpool. ¡°Te lo dir¨¦ en ingl¨¦s: sharp. Eso es lo que ha recuperado¡±. O sea, que est¨¢ enchufado. Pura potencia, a Torres le ha costado volver, pero no parece dispuesto a que nada le distraiga del objetivo. ¡°Hice todo lo que odiaba un jugador¡±, ha reconocido. Torres ya no se cree el mejor, solo pretende volver a serlo. Para eso ha cambiado su actitud y est¨¢ m¨¢s cerca del buen compa?ero ¡ªpicante y travieso¡ª que en la Eurocopa de 2008 apostaba sobre cu¨¢ntas veces dec¨ªa Luis lo de ¡°¡­y tal¡± en una charla, que del tipo hura?o y solitario del Mundial de Sud¨¢frica. Recuperadas las sensaciones f¨ªsicas y an¨ªmicas, Torres vuelve a galopar como un potro. Combina poco pero estira mucho el equipo, por esa habilidad que tanto gusta a Del Bosque que le permite jugar al l¨ªmite del fuera del juego, siempre dispuesto a alcanzar el pase en profundidad que le lleve ante la porter¨ªa rival. Y si est¨¢ metido en faena, como contra Irlanda, cae a banda y presiona la salida de los centrales con el mismo entusiasmo que olfatea el gol.

¡°Arranca con la fuerza de un caballo¡±, asegura Xavi. ¡°Tiene gol. Y la zancada...¡±, dec¨ªa Luis Aragon¨¦s cuando le preguntaban por el rasgo m¨¢s caracter¨ªstico del futbolista que le maravill¨® por su innata habilidad para encontrar espacios entre los dos centrales. Encarado el portero, como hizo dos veces con Given, no espera, golpea. Zancada y remate; El Ni?o sonr¨ªe y Espa?a golea.