El debutante es el l¨ªder

Algo atascado en la competici¨®n dom¨¦stica, donde el M¨¢laga acusa el cansancio de una temporada fren¨¦tica consagrado a una pelea en tres frentes, el equipo andaluz sigue alargando su sue?o en Europa, donde se mantiene invicto, acumula objetivo tras objetivo y ya es matem¨¢ticamente primero de su grupo despu¨¦s de lograr un empate en casa del Zenit. Tiene m¨¦rito el M¨¢laga, que cuaj¨® un primer tiempo excelente, en que hizo dos goles como dos soles, se comport¨® como un equipo s¨®lido la mayor¨ªa del partido y encontr¨® en su meta Caballero la ¨²ltima muralla ante el ataque desesperado del Zenit. La millonaria inversi¨®n rusa no ha cuajado en la m¨¢xima competici¨®n continental. No se cansa de hacer historia el equipo andaluz, cuyos n¨²meros en Europa hablan a las claras de la calidad y el compromiso de su plantilla, as¨ª como del buen hacer de su entrenador, Manuel Pellegrini. El M¨¢laga, debutante en la Liga de Campeones, pasa a los octavos como l¨ªder de su grupo a falta de una jornada. Y con un equipo esta vez cuajado de suplentes.

El idilio del M¨¢laga con la Liga de Campeones sigue jornada tras jornada. El cuadro andaluz se present¨® ante el Zenit con un once plagado de no habituales, consciente Pellegrini de la necesidad de dar descanso a jugadores importantes de su corta plantilla, caso de Joaqu¨ªn, Saviola, Isco y Weligton. Elementos necesitados de aire que no fueron necesarios, salvo el central, en el duelo ante el millonario equipo ruso. El motivo, la gran trayectoria del equipo en la competici¨®n europea, que le permiti¨® al chileno rotar y dar entrada a peones como Seba, Santa Cruz, Buonanotte, Duda y Onyewu, hasta el momento reservas que, sin embargo, demostraron en Rusia su hambre y sus ganas por hacerle ver a Pellegrini que son v¨¢lidos para las altas empresas que el equipo andaluz tiene por delante.

Con seguridad, otra de las m¨²ltiples virtudes del t¨¦cnico chileno es la de mantener intacta la competitividad de todos los jugadores de ese grupo al que ha hecho resistente a pesar de los impagos y los problemas institucionales.

Solo as¨ª puede entenderse la fastuosa puesta en escena del M¨¢laga. Enchufado y pujante, dibuj¨® un contragolpe de ensue?o para desbaratar, de un plumazo, el d¨¦bil sistema defensivo del Zenit, un flan atr¨¢s, un equipo confeccionado a base de millones de euros pero sin alma, lo que dice poco de la labor de un entrenador tan alabado como Spalletti. Un pase al hueco al r¨¢pido Seba acab¨® en un centro preciso al ¨¢rea, donde Buonanotte la enchuf¨® con eficiencia. Solo dos minutos m¨¢s tarde, a los nueve, Santa Cruz le rob¨® el bal¨®n al meta Malafeev para dar el pase de gol a Buonanotte.

El cero a dos, contundente, golpe¨® en las entra?as al Zenit, ansioso, precipitado, con Hulk queriendo resolver el partido por su cuenta, lo que provoc¨® incluso que fuera silbado por su p¨²blico. Manej¨® sin problemas el M¨¢laga la primera parte, equilibrado por Toulalan y asentado en la inteligencia t¨¢ctica de Santa Cruz, siempre bien colocado para ayudar al compa?ero. Tan controlado ten¨ªa el partido el M¨¢laga que se permiti¨® el lujo de que Demichelis viera la amarilla que le permitir¨¢ descansar en el ¨²ltimo partido de la fase de grupos, ante el Anderlecht en La Rosaleda, pues ya apabull¨® a los belgas en Bruselas.

Sufri¨® el M¨¢laga al inicio de la segunda mitad, cuando el Zenit, impulsado por el recuperado Danny, recort¨® distancias y a punto estuvo de empatar por mediaci¨®n de Kerzhakov. Minutos de confusi¨®n y l¨®gica reactivaci¨®n del Zenit, de buenos movimientos del centro del campo en adelante, pero sin pasi¨®n hacia su porter¨ªa. La tempestad no se llev¨® por delante al M¨¢laga, pues no est¨¢ el Zenit para grandes empresas. De repente, un numeroso grupo de peque?os jugadores, como Seba, Buonanotte o Juanmi, volvieron a dominar el bal¨®n, escoltados por el soberbio trabajo de Camacho y Toulalan.

Enchufado y pujante, el equipo de Pellegrini desbarat¨® al Zenit en un inicio fulgurante

Con lo que no cont¨® el M¨¢laga fue con el ataque alocado del Zenit en el ¨²ltimo suspiro, lo que descontrol¨® el partido, hasta convertirlo en un ida y vuelta en el que lo mismo empat¨® Fayzulin que Santa Cruz, Buonanotte o Juanmi gozaron de claras opciones para lograr el tanto del triunfo. No hizo falta, el empate justific¨® de sobra el excelente despliegue de este M¨¢laga que puede ahora centrarse en la Liga, donde sus ¨²ltimos resultados no son tan brillantes como en Europa.