El gol del Cerro del Espino

El lunes por la ma?ana, en el Cerro del Espino de Majadahonda, con el mismo fr¨ªo que anoche azotaba al Calder¨®n como testigo mayoritario, Diego Simeone orden¨® a Adri¨¢n a Ra¨²l Garc¨ªa que se quedaran a ensayar devoluciones y disparos desde la frontal del ¨¢rea. Los que fueron titulares en el partido ante el Sevilla realizaron trabajo de recuperaci¨®n y el resto del plantel, escogido para recibir al Ja¨¦n, concluy¨® la sesi¨®n antes. Uno dejaba de cara y el otro chutaba. Ya ten¨ªa en la cabeza el t¨¦cnico argentino que ambos ser¨ªan la punta de ataque en el tr¨¢mite copero de anoche.

El ejercicio no result¨® en vano. El gol con el que Ra¨²l Garc¨ªa acab¨® con cualquier esperanza jienense, si es que la hab¨ªa, se gener¨® con ese movimiento ensayado. Rob¨® el Atl¨¦tico cerca del ¨¢rea del Ja¨¦n, cedi¨® atr¨¢s Adri¨¢n y Ra¨²l Garc¨ªa coloc¨® una rosca potente y a media altura, Al menos, el partido sirvi¨® para colmar esa satisfacci¨®n tan exclusiva de los entrenadores de que lo que se ensaya se trasvasa con ¨¦xito a los partidos. Un hecho de esos que carga de razones a un t¨¦cnico que vio como su equipo alcanzaba los octavos de final de la Copa donde le aguarda el Getafe. Al aire de entrenamiento competido contribuyeron tanto el desangelo de la grada como las imprecisiones en los pases en los metros finales. Tambi¨¦n algunas acciones como ese intento de gol ol¨ªmpico desde la esquina derecha de Emre. Tuvo el Atl¨¦tico ocasiones para ampliar el marcador desde la superioridad que se le supon¨ªa y el Ja¨¦n inquiet¨® a Asenjo en un libre directo en el que se luci¨®.

La alineaci¨®n de Simeone dio la oportunidad de ver a Manquillo de inicio y no a Oliver, que sigue el ritmo precavido de entrada en el primer equipo que le ha impuesto el cuerpo t¨¦cnico. Manquillo, ayer adelantado al centro del campo, ense?¨® tan buenas maneras como falta de descaro para atreverse con decisi¨®n en algunas ocasiones que pudo lucirse en el uno contra uno. Empez¨® bien con un autopase esperanzador para acabar a la misma altura de cumplidor que la mayor¨ªa de sus compa?eros.

Oliver, por su parte, dej¨® esa sensaci¨®n tan de jugador de clase que ense?a en cada toque de bal¨®n, aunque fuera banal. Haya 40.000 o 4.000 espectadores, el Calder¨®n tiene la sensaci¨®n de que est¨¢ ante uno de esos futbolistas de los que siempre se puede esperar algo distinto. Ahora mismo est¨¢ en esa fase de aprendizaje en la que le est¨¢n inculcando que esas conducciones con las que 'burreaba' juveniles ni en Segunda B ni en Primera Divisi¨®n son tan factibles.

La nota negativa para el Atl¨¦tico la puso la lesi¨®n del Cebolla Rodr¨ªguez, que sufri¨® un pinchazo en los isquiotibiales en una de sus carreras tan verticales como plenas de fe. Estuvo el uruguayo en esa l¨ªnea de potencia en las arrancadas que cuando las dirige con buena trazada hacen da?o, pero cuando no, todo resulta embarullado. Con su baja para el derbi, Simeone habr¨¢ perdido a uno de esos futbolistas que en las citas de alto voltaje los entrenadores agradecen que est¨¦n sentados a su lado por si el partido vira hacia el coraje. Para colmo, la gripe tiene a Courtois en duda.