Croacia-Serbia, ?partido de la reconciliaci¨®n?

¡°El mundo nos est¨¢ mirando¡±, advierte Sinisa Mihajlovic, entrenador de la selecci¨®n serbia, antes de enfrentarse esta tarde a Croacia en Zagreb en la clasificaci¨®n para el Mundial de Brasil 2014 (18.00). ¡°Tenemos derecho a mirar hacia adelante y demostrar respeto mutuo¡±, a?ade quien fuera defensa del Lazio y amigo del l¨ªder ultra nacionalista serbio Arkan. ¡°Hay que superar el pasado. El comportamiento de los jugadores en este partido debe ser un ejemplo para los pueblos¡±, coincide Miroslav Djukic, t¨¦cnico del Valladolid y exseleccionador serbio. Todo son mensajes conciliadores en medio de fuertes medidas de seguridad de la polic¨ªa croata, que suspender¨¢ el choque si hay alguna ofensa de car¨¢cter ¨¦tnico. Las federaciones acordaron prohibir el desplazamiento organizado de las hinchadas. Serbia, con cuatro puntos y una media de edad de 22 a?os, necesita ganar para recortar distancias respecto a Croacia y B¨¦lgica, con 10. Modric, Rakitic y Mandzukic presentan una selecci¨®n mucho m¨¢s experimentada.

Es imposible borrar el pasado. Aquel D¨ªnamo de Zagreb-Estrella Roja de Belgrado, de 1990, fue un ensayo para la guerra posterior, entre junio de 1991 y septiembre de 1996, en la que murieron cerca de 130.000 personas. Un encuentro convertido en batalla campal, con decenas de heridos, inflamada por la presencia en las gradas de Arkan, el l¨ªder de los ultras serbios, desplazados a Zagreb en un grupo de 3.000. Tal fue la tensi¨®n que Boban, centrocampista estrella del Milan, le peg¨® una patada a un polic¨ªa que a su vez agred¨ªa a un seguidor croata.

Hace 13 a?os ya se enfrentaron ambas selecciones. Croacia recibi¨® a una Serbia llamada entonces Yugoslavia el 9 de octubre de 1999. Mihajlovic, como jugador, se arrodill¨®, se santigu¨® y dedic¨® su clasificaci¨®n para la Eurocopa 2000 de B¨¦lgica y Holanda a todos los ca¨ªdos serbios en la guerra. Le llovieron insultos desde las gradas del estadio Maksimir. Croacia qued¨® eliminada. Una pancarta (¡°Vukovar, 1991¡±) recordaba las atrocidades de la guerra. La ciudad originaria precisamente de Mihajlovic, de madre croata y padre serbio. ¡°Arkan fue mi amigo cuando yo era un joven jugador del Estrella Roja y ¨¦l el l¨ªder de los fans. Pero no defiendo sus cr¨ªmenes. Los condeno¡±, declara ahora el t¨¦cnico en una entrevista en La Gazzetta dello Sport, justificando su elogioso obituario al exjefe ultra porque ¡°hab¨ªa sido un h¨¦roe para los croatas que iban a ser masacrados¡±.

¡°Fue un periodo de la historia completamente insano (¡­) En una guerra no hay buenos ni malos, blanco o negro, sino el color de la sangre de los inocentes. La guerra tiene muchos culpables¡±, prosigue Mihajlovic, redimido como embajador de UNICEF y mecenas de v¨ªctimas de la guerra.

¡°Arkan fue mi amigo cuando yo era un joven jugador del Estrella Roja y ¨¦l el l¨ªder de los fans. Pero no defiendo sus cr¨ªmenes. Los condeno¡± Mihajlovic

Su objetivo al frente de Serbia es, aparte de la remota opci¨®n de clasificarse para el pr¨®ximo Mundial, limpiar la imagen del f¨²tbol serbio, en el punto de mira de la UEFA en los ¨²ltimos a?os. En octubre de 2010, el Italia-Serbia fue suspendido en G¨¦nova despu¨¦s de los incidentes violentos provocados por los radicales serbios. Fue uno de muchos episodios de ataques protagonizados por grupos de ultraderecha. El presidente de la UEFA, Michel Platini, amenaz¨® al presidente de Serbia, Boris Tadic, con eliminar a los conjuntos de aquel pa¨ªs de todas las competiciones internacionales. Tadic le prometi¨® mano dura con los ultras.

De momento, Mihajlovic ya ha advertido a sus jugadores de que si, en el duelo de hoy, alguno es expulsado por comportamiento antideportivo, ya no volver¨¢ a la selecci¨®n. ¡°En Yugoslavia siempre tuvimos grandes futbolistas, pero no ganamos nada porque cada uno iba por su lado. Nos hac¨ªa falta disciplina y unas reglas¡±, explica el seleccionador, que obliga a sus jugadores a cantar el himno. Quien no lo haga, tambi¨¦n queda fuera. Ha sido el caso de Ljajic, mediocampista del Fiorentina. Mihajlovic tambi¨¦n conmina a sus chicos a aplaudir el himno de los rivales. ¡°Quiero cambiar la imagen de Serbia despu¨¦s de muchos a?os de violencia¡±, concluye mientras dos jugadores del Lyon, el croata Lavren y el serbio Bisevac, proclaman su amistad en una entrevista para la FIFA. Los ultras croatas, sin embargo, siguen a lo suyo. Y ayer declararon a Mihajlovic persona non grata por sus manifestaciones en La Gazzetta. No quieren que sea el partido de la reconciliaci¨®n.