¡°Leo lo cambi¨® todo¡±

Messi apareci¨® en escena en el minuto 16 de la segunda parte. Sali¨® por Cesc y pareci¨® que se hac¨ªa de d¨ªa. A la grada le cambi¨® la cara y al equipo, perdido a esas alturas, el ¨¢nimo. De golpe, donde no sal¨ªa nada, todo iba de cara: Pedro llegaba a tiempo a la presi¨®n, le sal¨ªa el regate a Villa y el rebote lo pillaba Xavi como si tuviera un im¨¢n. Como por arte de magia, el Barcelona volvi¨® a parecerse a s¨ª mismo. Y a Sirigu, el portero del PSG, se le acumul¨® la faena de buenas a primeras. Fue verle aparecer en escena y a la grada, que se llen¨® con m¨¢s de 96.000 espectadores, le cambi¨® el ¨¢nimo, nerviosa como estaba, consciente de que se escapaba la sexta semifinal consecutiva de la Copa de Europa. Pero no. Apareci¨® la Pulga. ¡°Y con Leo, todo cambi¨®¡±, resumi¨® Iniesta.

A esas alturas, cuando sali¨® Messi al campo, Adriano, lesionado otra vez, de nuevo convertido en central como en la Supercopa contra el Madrid, de nuevo mal, ya hab¨ªa dejado su sitio a Bartra. Al Bar?a ya no le bastaba para estar en semifinales con el partidazo que hab¨ªa jugado Vald¨¦s, que pudo haber sido el ¨²ltimo con el Bar?a en competici¨®n europea, porque ya hab¨ªa marcado Pastore su gol y el pasaporte para las semifinales parec¨ªa requisado. En esas, apareci¨® el astro argentino, le dio al interruptor de la luz, puso m¨²sica y empez¨® la fiesta. Leo llevaba 55 partidos saliendo del banco y 19 goles firmados como suplente a lo largo de su carrera. Su presencia le meti¨® el miedo en el cuerpo al PSG.

Se hab¨ªan adelantado por un fallo m¨ªo¡±, reconoci¨® el goleador canario

El argentino se hab¨ªa ganado su presencia en el banquillo trabajando en el gimnasio y en la camilla, en largas sesiones recuperatorias, ma?ana y tarde, desde que se lesion¨® en Par¨ªs. No hizo mucho, apenas toc¨® el bal¨®n unas pocas veces, pero con ¨¦l, eso es mucho. ¡°Aunque sea un poco cojo, Messi es mucho. Y siempre est¨¢ ah¨ª¡±, reconoci¨® Piqu¨¦. El argentino protagoniz¨® el inicio de la jugada del empate asistiendo a Villa, que se la dio a Pedro. El canario ten¨ªa la oportunidad de dedicarle un gol a su primer hijo, Bryan. No desaprovech¨® la ocasi¨®n y la clav¨® con la zurda antes de echarse el pulgar a la boca, simulando un chupete. Fue su primer gol en esta Champions.

¡°Se hab¨ªan adelantado por culpa de un fallo m¨ªo¡±, dijo el canario, que elogi¨® el esfuerzo de Messi. ¡°Ha trabajado mucho y hemos notado su presencia cuando ha salido. Hemos de darle las gracias porque ha vuelto a demostrar que es el n¨²mero 1 y, con su sola presencia, el partido ha dado un vuelco¡±. Villa refrend¨® el elogio: ¡°Es el mejor del mundo, lo ha cambiado todo¡±. Y Zubizarreta habl¨® sobre el riesgo que entra?¨® su alineaci¨®n. ¡°Tienes que medir eso en funci¨®n de lo que te pueda perjudicar. Sin riesgo, adem¨¢s, no suele haber premio¡±, dijo el director deportivo del Barcelona. ¡°Ten¨ªamos la opci¨®n de usarlo si lo necesit¨¢bamos. Ha participado en la jugada del gol y se ha dosificado¡±, dijo Roura que elogi¨® la competitividad del 10, a quien le toc¨® pasar el control antidopaje. ¡°Cuando lo tienes en tus filas sabes que lo tienes que usar s¨ª o s¨ª. Solo con su presencia cambia tu estado an¨ªmico y el suyo¡±, insisti¨® Piqu¨¦. ¡°Es un jugador fundamental, cuando est¨¢ en el campo se siente mucho¡±, admiti¨® Lavezzi, resignado. ¡°Tiene ese poder. Con su presencia cambia el ¨¢nimo del partido¡±, elogi¨® Alves. Para Bartra, el esfuerzo de Messi resume la esencia del mejor del mundo: ¡°Los rivales est¨¢n m¨¢s atentos y nosotros, m¨¢s tranquilos¡±.