Un gigante inabarcable

La superioridad y la impotencia se citaron por segunda vez en Mosc¨² en 48 horas y volvi¨® a triunfar la evidencia. Fue el segundo episodio de una pelea desigual entre el CSKA y el Caja Laboral condenada a quedar resuelta en tres actos por la diferencia de calibre entre las armas de los contendientes. Los de Messina disparan con dinamita mientras que Tabak comprob¨® que lo suyo son apenas cartuchos de fogueo ante semejante rival. Los 22 puntos de ventaja, que llegaron a ser 27, sellaron el abismo que separa a una colecci¨®n de baqueteados especialistas adiestrados para conquistar Europa de un meritorio grupo que ha estirado sus prestaciones en una temporada convulsa hasta encontrar su l¨ªmite.

De inicio, cambi¨® la predisposici¨®n de los de Tabak con respecto al partido del mi¨¦rcoles, pero fue un ef¨ªmero espejismo. Con Cook al tim¨®n y Lampe como estilete, la inopinada puesta en escena del conjunto vitoriano estuvo cargada de intensidad y acierto. Cuatro triples anotados en sus cinco primeros intentos y nueve puntos del p¨ªvot polaco otorgaron la iniciativa a los visitantes mientras el CSKA sesteaba en la autocomplacencia (12-21, m. 7). La frontera del 6,75, que en el primer encuentro de la serie se hab¨ªa convertido en la principal condena del Baskonia, con un pobre 3 de 19, pareci¨® un fil¨®n en los primeros minutos. Pero cuando Messina repas¨® la cartilla con sus hombres y Kaun apareci¨® en escena se diluy¨® la efervescencia del Caja Laboral y se acabaron los triples ¡ªerraron los siete siguientes que lanzaron antes del descanso y cerraron el choque con un 7 de 22¡ª. En un santiam¨¦n el conjunto ruso apret¨® las tuercas en defensa, amurall¨® su canasta y retom¨® el mando (27-26, m. 12).

Jackson y Teodosic le birlaron la br¨²jula a Cook que a su vez cedi¨® el testigo a Causeur. El base franc¨¦s ¡ªm¨¢ximo anotador de los suyos en el primer choque con 17 puntos¡ª le dio en esta ocasi¨®n a su equipo m¨¢s precipitaci¨®n que impulso. El ataque del Caja Laboral se convirti¨® entonces en una sucesi¨®n de tiros irreflexivos y p¨¦rdidas de bal¨®n que sellaron un parcial demoledor de 24-11 en el segundo cuarto. Con Nocioni desenfocado, solo el arrebato de San Emeterio, con cinco puntos consecutivos antes del descanso, permiti¨® a los de Tabak aplazar la inevitable condena (44-37, m. 20).

A pesar de no tener noticias en el ataque ruso del martillo pil¨®n de Weems ¡ªque hab¨ªa acribillado el aro vitoriano dos d¨ªas antes con 19 puntos¡ª, ni del talento rocoso de Khryapa, el CSKA instaur¨® de nuevo sin problemas su competitiva velocidad de crucero y luci¨® su infinito repertorio, inabarcable para el Caja Laboral. Krstic y Erceg sumaron sus cent¨ªmetros a la causa de Kaun en la pintura y como un rodillo silencioso la diferencia a favor de los locales fue creciendo entre la inercia y la suficiencia tras un parcial de 14-0 que fulmin¨® cualquier remota expectativa de los visitantes (63-43, m. 27).

Como dos equipos que juegan en divisiones distintas, el CSKA dio lustre a su superioridad con una rutina inapelable y el Caja Laboral languideci¨® hu¨¦rfano de h¨¦roes que se lanzaran contra el gigante. No ten¨ªa grandes reproches que hacerle Tabak a sus hombres en sus silenciosas citas en los tiempos muertos, pero cada ataque del Baskonia era un desesperante choque con la realidad que deriv¨® en un nuevo zarandeo de los de Messina, notables en el rebote y en el tiro de dos.

Cuando la diferencia super¨® los 20 puntos, dimiti¨® la competitividad. El Caja Laboral cometi¨® el error de bajar los brazos y la segunda unidad del CSKA aprovech¨® para postularse de cara a futuras misiones superiores. Se destap¨® Misov mientras Khryapa agrandaba su colecci¨®n de rebotes y Teodosic jugueteaba con su yoy¨® y tiraba bisectrices. Nadie les tose camino a Londres.