¡°En Espa?a era m¨¢s f¨¢cil escaparse¡±

Al final de su intervenci¨®n en las jornadas sobre ¡°Salud y lucha contra el dopaje¡±, a Onye Ikwuakor, director del departamento jur¨ªdico de la Agencia Antidopaje de Estados Unidos (USADA), le preguntaron por qu¨¦ pensaba que la mayor¨ªa de los ciclistas norteamericanos del US Postal, encabezados por Lance Armstrong, se hab¨ªan establecido en Girona y contaban con m¨¦dicos espa?oles. ¡°Sencillamente porque sab¨ªan que aqu¨ª iban a ser m¨¢s f¨¢ciles sus actividades dopantes¡±, declar¨® llanamente despu¨¦s de haber destripado durante m¨¢s de una hora la investigaci¨®n de su agencia que acab¨® con el mito de Armstrong. ¡°En aquellos tiempos [har¨¢ 15 a?os] los deportistas pensaban que en Espa?a era m¨¢s f¨¢cil escaparse a la lucha contra el dopaje¡±.

El experto estadounidense adem¨¢s record¨® que dos de los m¨¦dicos del equipo, el italiano Michele Ferrari y el espa?ol Luis Garc¨ªa del Moral est¨¢n suspendidos a perpetuidad para ejercer la medicina en equipos o instalaciones deportivas (¡°pero solo en Estados Unidos¡±, precis¨®, ¡°aunque estamos buscando con la Agencia Mundial Antidopaje y las federaciones internacionales la manera de extenderla a todo el mundo¡±), mientras que el caso de los otros tres miembros del entorno acusados (los espa?oles Pedro Celaya y Pepe Mart¨ª y el belga Johan Bruyneel) estaba encallado en un organismo de arbitraje estadounidense que mantiene serias dudas sobre su capacidad jurisdiccional para decidir sobre su futuro.

¡°En aquellos tiempos [har¨¢ 15 a?os] los deportistas pensaban que en Espa?a era m¨¢s f¨¢cil escaparse a la lucha contra el dopaje¡±

Tanto del relato de la investigaci¨®n Armstrong como de la idea sobre la facilidad de doparse en Girona hace unos a?os se pudo concluir la charla con una imagen de Espa?a que si no era quiz¨¢s la esperada por la organizadora del evento, la Agencia Estatal Antidopaje (AEA), s¨ª que le sirvi¨® a su directora, Ana Mu?oz, al menos para calibrar el alcance real y extendido de la leyenda negra espa?ola en este dominio.

Tambi¨¦n se habl¨® largo de otro de los elementos que contribuyen como un escarnio a la imagen de permisividad nacional con el dopaje, la sentencia de la Operaci¨®n Puerto que ordena la destrucci¨®n de las bolsas de sangre. Paro en este asunto, s¨ª present¨® combate la AEA. Al grito de ¡°?Quiero las bolsas!¡±, Mu?oz present¨® al magistrado del Supremo Luis Mar¨ªa D¨ªez-Picazo, quien concluy¨®, contrariamente a la juez de la Operaci¨®n Puerto, que nada impide llevar las pruebas de un proceso penal a un procedimiento administrativo, pero que, de todas maneras, habr¨ªa que esperar a que hubiera una sentencia firme en el primer juicio, lo que en el caso de Puerto puede alargarse hasta a?os si el caso, recurrido ante la Audiencia Provincial actualmente, llega hasta el Supremo. Ante esta posibilidad no evit¨® saltar con urgencia Manuel Moix, fiscal superior de Madrid, quien desde el p¨²blico reclam¨® ¡°m¨¢s agilidad¡± en la entrega de pruebas. ¡°?Para qu¨¦ esperar tanto?¡±, dijo. ¡°Que se regule ya el asunto en la Ley de Enjuiciamiento Criminal¡±.

Una tercera punta del problema espa?ol con el dopaje, al parecer infinito, no tuvo la oportunidad de ser debatida apenas, pero ven¨ªa al pelo coincidiendo con el expediente abierto por la IAAF a Marta Dom¨ªnguez. Fue expresada como declaraci¨®n de principios por el luchador italiano Sandro Donati, que denunci¨® el nacionalismo como uno de los demonios del dopaje: ¡°Para defender al deporte verdadero hay que de entrada sin miedo a por los deportistas falsos del propio pa¨ªs¡±.