El Almer¨ªa golpea primero

El Almer¨ªa quiere volver a Primera. No le importa si en el camino tiene que acabar con el sue?o del Girona, la sorpresa de la Liga Adelante. Los andaluces no se andan con tonter¨ªas, saben a lo que juegan y lo que tienen. Pragm¨¢ticos en el juego y contundentes en las ¨¢reas. Charles evidenci¨® porqu¨¦ es el goleador de la categor¨ªa de plata y Esteban se visti¨® de gigante para resguardar la porter¨ªa: silenci¨® a todo Montilivi cuando le par¨® el penalti a Felipe Sanch¨®n. El Girona jug¨® con hambre de Primera, pero se qued¨® a las puertas. Si bien, quedan 90 minutos en tierras andaluzas para definir quien acompa?ar¨¢ al Elche y al Villareal en el f¨²tbol de ¨¦lite.

El Girona, aquejado por las lesiones, salt¨® al campo resentido, sin tres piezas claves: Javier Acu?a, su goleador; Mois¨¦s Hurtado, el que debe aportar experiencia a la zaga; y Jandro, el metr¨®nomo de equipo. El Almer¨ªa le cedi¨® la iniciativa del juego al conjunto rojiblanco, que intenso, apretaba la salida del equipo local. El esf¨¦rico lo dominaban los de Rubi, que mermados, sin su director de orquesta, apostaron por un f¨²tbol sin pausa, vertiginoso y directo.

M¨¢s pendiente de la inspiraci¨®n individual, carente de tranquilidad, atacaba sin demasiadas ideas, pero acorralaba en su campo a los visitantes. A veces, lejos de Esteban; otras m¨¢s atrincherado, cerca de su porter¨ªa. Sin embargo, el equipo de Javi Garc¨ªa no le conced¨ªa ocasiones al Girona y desafiaba con las contras de sus veloces extremos ¡ªfant¨¢sticos al ataque Aleix Vidal y Christian¡ª y con el olfato goleador del pichichi de la Liga Adelante, Charles.

Insist¨ªa el Girona, siempre con m¨¢s voluntad que ideas; siempre con m¨¢s disparos desde fuera que con juego asociado. Agonizaba el primer tiempo, cuando teji¨® la primera jugada elaborada: en el balc¨®n del ¨¢rea del Almer¨ªa se juntaron Jofre y Felipe, los dos bajitos habilidosos, que en un tuya-m¨ªa, pusieron al extremo mano a mano frente a Verza. El zurdo regate¨® al central, que lo derrib¨®. Todo Montilivi grit¨® penalti, pero el colegiado Arias L¨®pez, no pens¨® lo mismo e ignor¨® la jugada. En cambio, en la segunda etapa no dudo en pitar la mano de Gunino dentro del ¨¢rea. El disparo fuerte y centrado de Felipe, lo par¨® Esteban, que dej¨® el grito de gol atragantado a toda Girona.

Los rojiblancos jugaban al m¨¢ximo de sus capacidades. M¨¢s se desesperaban por sumar la primera diana del partido, m¨¢s incisivas se tornaban las contras de los visitantes. El equipo de Rubi se desfondaba en la ¨²ltima l¨ªnea y expon¨ªa su sue?o de primera. Y as¨ª, Charles, tras un contraataque, se encontr¨® con Becerra, a quien bati¨® con una vaselina. Era la primera ocasi¨®n clara del brasile?o en toda la noche. Pero esa sola le bast¨®. Acarici¨® el cuero por arriba del portero y sentenci¨® el partido. Porque ya no le perdi¨® la cara al encuentro. Y hasta le sonri¨® la suerte, esa que se puso del lado de Esteban para negarle al equipo de casa el gol desde los 11 metros que le permit¨ªa seguir so?ando.