1977-78: La historia se repite (y II)

Con el ganador de la primera edici¨®n, Ram¨®n Carlin, dando el pistoletazo de salida, los 15 barcos participantes volvieron a estar acompa?ados por miles de embarcaciones, incluidos los ferris del Solent, barcos de guerra brit¨¢nicos y una gran flota de veleros y botes neum¨¢ticos. Entre los participantes aparec¨ªan como favoritos dos de los brit¨¢nicos, el GB II, s¨¦ptimo en la primera edici¨®n, y el nuevo Heath¡¯s Condor. Ambos con 23,50 metros de eslora y unas tripulaciones muy profesionalizadas siempre cruzaron la l¨ªnea de llegada en las primeras posiciones; sin embargo, la clasificaci¨®n compensada los releg¨® a los ¨²ltimos puestos.

Portsmouth-Ciudad del Cabo / 27 de agosto de 1977

El principio de la primera etapa transcurri¨® sin demasiados sobresaltos para la mayor¨ªa de las embarcaciones, salvo para el Heath¡¯s Condor, que tuvo que hacer una parada t¨¦cnica en Las Palmas. Tambi¨¦n se registr¨® una de las jornadas con menos millas recorridas; en el caso del GB II, solo 73 millas n¨¢uticas en 24 horas, o lo que es lo mismo, un velocidad media de 3 nudos por hora.

A unos 20 d¨ªas de navegaci¨®n, los problemas a bordo del Heath¡¯s Condor empezaron a adquirir un tinte dram¨¢tico. El nuevo m¨¢stil de fibra de carbono quebr¨® y qued¨® hecho un amasijo amontonado sobre la cubierta. Nadie result¨® herido, pero tuvieron que retirarse y dirigirse a Monrovia. Sustituyeron el m¨¢stil por otro de aluminio y, tras reincorporarse a la regata, un grave caso de intoxicaci¨®n afect¨® pr¨¢cticamente a toda la tripulaci¨®n.

El resto de la flota sufri¨® los da?os habituales y despu¨¦s de superar las calmas ecuatoriales con una clara ventaja, el Flyer, entr¨® en el puerto de Ciudad del Cabo y termin¨® ganador de la etapa. Tan solo dos horas m¨¢s tarde, y despu¨¦s de 38 d¨ªas de competici¨®n, entr¨® el King¡¯s Legend.

Ciudad del Cabo-Auckland / 25 de octubre de 1977

Los organizadores eligieron Auckland en lugar de Sidney como meta de la segunda etapa. Era una de las m¨¢s dif¨ªciles por las tormentas y ciclones existentes en la zona. En ella, el B & B Italia, con el espa?ol Enrique Vidal como responsable de navegaci¨®n, traz¨® una ruta al m¨¢ximo sur, pasando a tan solo 500 millas del continente ant¨¢rtico, en una maniobra bastante arriesgada. El Debenhams tambi¨¦n puso proa al sur en un intento por hacerse con el liderazgo; sin embargo, d¨ªas m¨¢s tarde se encontr¨® atrapado por el hielo y los icebergs. Sus problemas se agravaron con la llegada de un fuerte temporal, con vientos de fuerza nueve.

En el GB II las cosas no iban mejor, tuvo una aver¨ªa en el sistema de calefacci¨®n, un verdadero problema en las latitudes donde se encontraban. Uno de los tripulantes, John Deane, utilizaba su casco de moto en las guardias para mantener la cabeza caliente y protegerse de los trozos de hielo que se desprend¨ªan del aparejo. Sin embargo, las noticias m¨¢s inquietantes eran los graves apuros por los que estaban pasando otros veleros.

El 13 de noviembre, uno de los tripulantes del Heath¡¯s Condor, Bill Abram, cay¨® al mar. Peter Blake, al tim¨®n, tuvo que poner en marcha el motor para virar, pero por desgracia, la h¨¦lice se atasc¨® en un cabo que lanzaron para que Bill se aferrase. Finalmente, gracias a una bandada de albatros que comenz¨® a sobrevolar en c¨ªrculos por encima del n¨¢ufrago, Blake consigui¨® arrimar el barco y Abram fue rescatado sano y salvo. No hab¨ªa sido una traves¨ªa f¨¢cil para el Heath¡¯s Condor hasta ese momento, pero afortunadamente no tuvo m¨¢s problemas durante el resto de la ruta hasta Auckland, donde el 25 de noviembre cruz¨® la l¨ªnea de meta en primera posici¨®n. El GBII entr¨® segundo, 31 horas m¨¢s tarde.

Etapa 3 / Auckland-R¨ªo de Janeiro / 26 de diciembre de 1977

La flota se hizo a la mar del 26 de diciembre. Desde all¨ª al cabo de Hornos, 5.500 millas, y 2.000 m¨¢s hasta R¨ªo de Janeiro. Les aguardaba otra dura etapa y no transcurri¨® mucho tiempo antes de que Alain Gabbay y el 33 Export se viesen en apuros. Hab¨ªa estado soplando un viento de unos 45 nudos cuando de pronto se oy¨® el tremendo estruendo de una enorme ola que estuvo a punto de volcar el barco. La determinaci¨®n y el coraje de la tripulaci¨®n evitaron la tragedia. El Adventure tambi¨¦n pas¨® apuros, la tripulaci¨®n tuvo que achicar agua cuando se empez¨® a inundar la embarcaci¨®n debido a una grieta en el casco que tardaron cuatro d¨ªas en localizar en medio de unas condiciones muy duras. Algunos barcos registraron vientos de entre 55 y 60 nudos.

El GBII fue el primero en dejar atr¨¢s el cabo de Hornos, el Flyer, despu¨¦s, en medio de una tormenta de nieve. R¨ªo de Janeiro a¨²n quedaba lejos y los 40 rugientes no terminan al doblar el cabo. El drama continu¨® en el Atl¨¢ntico Sur cuando el oleaje golpe¨® la cubierta del 33 Export y Eric Letrosne sali¨® despedido y se fractur¨® una pierna. El Japy-Hermes acudi¨® en su ayuda, pero, la ¨²nica forma de poder llegar hasta el herido era echarse al agua y nadar. Jean Louis Sabarly, m¨¦dico del barco franc¨¦s, nad¨® hasta el barco y se hizo cargo del paciente hasta llegar a R¨ªo Grande (Argentina), donde Letrosne fue trasladado a un hospital.

El 28 de enero, el GBII cruz¨® la l¨ªnea de meta de R¨ªo de Janeiro media hora por delante del Heath¡¯s Condor. En tiempo compensado, el Gauloises II se alz¨® con la victoria de la etapa y el Flyer se clasific¨® segundo. Sin embargo, fue el Pen Duick VI, que hab¨ªa sido descalificado, el que lleg¨® varios d¨ªas antes a R¨ªo de Janeiro. El comit¨¦ invit¨® a Eric Tabarly a seguir hasta Portsmouth, y aunque en principio este declin¨® la oferta, despu¨¦s cambi¨® de opini¨®n.

Etapa 4 / R¨ªo de Janeiro-Portsmouth / 22 de febrero de 1978

El ¨²ltimo esfuerzo era una relativamente corta traves¨ªa de 5.500 millas a trav¨¦s del Atl¨¢ntico. Se hab¨ªan producido gran cantidad de cambios en las tripulaciones debido a las incompatibilidades de car¨¢cter. La ¨²ltima etapa se desarroll¨® sin sobresaltos, con una situaci¨®n tranquila hasta la llegada al canal de la Mancha. Fue entonces cuando se produjo un cambio repentino en las condiciones meteorol¨®gicas. El mar se embraveci¨® y una fuerte tormenta, con vientos de fuerza entre nueve y diez, se desat¨® sobre las primeras embarcaciones.

El Flyer, que ocupaba la quinta posici¨®n en la etapa, fue el que sali¨® peor parado al sufrir una trasluchada incontrolada que rompi¨® el spinnaker. Cornelis van Rietschoten se encontraba en ese momento a la ca?a y consigui¨® recuperar el rumbo con rapidez, hasta que otra racha de 55 nudos empuj¨® la embarcaci¨®n de costado hacia la costa. Miles de aficionados all¨ª presentes se preparaban para presenciar un desastre, pero gracias a una serie de cambios de vela el Flyer consigui¨® alejarse del peligro y alcanzar la l¨ªnea de meta.

Todos los barcos completaron el recorrido. Cuatro a?os antes, el Great Britain II hab¨ªa sido el primero en cruzar la meta, pero en tiempo compensado gan¨® el Sayula II. La historia se repiti¨® en esta segunda edici¨®n. En tiempo real gan¨® el barco ingl¨¦s GB II, con el tripulante espa?ol Enrico Zulueta, pero la victoria en tiempo compensado fue para el holand¨¦s Cornelis van Rietschoten con el Flyer. Y al igual que el triunfo del Sayula II fue una sorpresa en 1974, el ¨¦xito del Flyer tambi¨¦n lo fue en esta segunda edici¨®n.

Clasificaci¨®n final: 1/ Flyer ¨C 2/King's Legend ¨C 3/Trait¨¦ de Rome ¨C 4/Disque d'Or ¨C 5/ADC Accutrac ¨C 6/Gauloises II ¨C 7/Adventure ¨C 8/Neptune ¨C 9/B&B Italia ¨C 10/33 Export ¨C 11/Tielsa ¨C 12/Great Britain II ¨C 13/Debenhams ¨C 14/Japy-Hermes ¨C 15/Heath's Condor.? Fuente: Sailing Legends / The Roaring Forties / Volvo Ocean Race