Tiger Woods dobla la espalda ante el nuevo fen¨®meno, Patrick Reed

El dato es escalofriante. Tiger Woods solo ha completado nueve de 1.128 rondas rondas como profesional sin celebrar un birdie. La ¨²ltima este domingo, en la jornada final del Cadillac World Golf Championship. El Tigre se qued¨® seco cuando remaba por alcanzar el liderato y defender as¨ª su triunfo del a?o pasado en Doral. Hab¨ªa llegado al Blue Monster con la espalda hecha un nudo, despu¨¦s de su retirada por lesi¨®n del Honda Classic la semana pasada, y sin ninguna ronda de pr¨¢cticas cuando el jueves sali¨® desde el tee. Pero Tiger sac¨® el orgullo del campe¨®n herido y cuestionado, y con una tercera vuelta de 66 golpes se visti¨® de rojo el domingo para pegarle el bocado a la clasificaci¨®n.

Pero la espalda volvi¨® a pinchar a Woods, se qued¨® sin birdies y en cabeza resisti¨® un nuevo fen¨®meno, el estadounidense Patrick Reed, de 23 a?os. Con una demostraci¨®n de car¨¢cter y de autocontrol, Reed gir¨® hacia ¨¦l todos los focos con una victoria sin discusi¨®n que arrastra un buen pu?ado de r¨¦cords: es el primer golfista que gana el torneo en su debut; es el ganador m¨¢s joven de un torneo de las series mundiales, con 23 a?os, siete meses y cuatro d¨ªas, mejorando en 25 d¨ªas la marca anterior, precisamente de Tiger Woods en el Bridgestone de 1999; y se une a figuras como Tiger, Mickelson, Rory McIlroy y Sergio Garc¨ªa con almenos tres t¨ªtulos en el PGA Tour antes de los 24 a?os.

Soy uno de los mejores jugadores del mundo. Me lo he probado a m¨ª mismo en este campo Patrick Reed

Reed suma tres victorias, y las tres desde agosto pasado. El chico, de hermosos y rojos mofletes, aguant¨® como un veterano la presi¨®n. Por ejemplo cuando fall¨® un putt que parec¨ªa sencillo en el hoyo 14, err¨® en la salida del 15 y se carg¨® de nervios para sacar la bola del b¨²nker mientras los rivales apretaban la clasificaci¨®n. Reed tom¨® aire y dej¨® la bola a medio palmo del hoyo. Ah¨ª comenz¨® a asegurarse el triunfo. El chico no es precisamente modesto, y ya se compara ¨¦l mismo con los mejores del circuito. "No hay mucha gente que haya conseguido lo que yo. Soy uno de los mejores jugadores del mundo. Me lo he demostrado a m¨ª mismo en un campo como este", dice. Tambi¨¦n es verdad que tres victorias en 14 torneos disputados es una marca estupenda. Tom Watson se frota las manos mientras el equipo estadounidense de la Copa Ryder espera a este joven nuevo fen¨®meno.

El Blue Monster de Doral hizo honor a su fama. Los 250 millones de d¨®lares que se gast¨® Donald Trump en cambiarle la cara al campo cumplieron con su objetivo. El viento fue el m¨¢s pu?etero aliado para convertir el torneo en un dolor de cabeza para muchos. De ah¨ª que los jugadores mandaran al agua una media de cinco bolas cada uno durante los cuatro d¨ªas del campeonato.

Quien mejor lo resisti¨® fue Reed, mientras a Tiger le fastidiaba m¨¢s la espalda que otra cosa. Se le hab¨ªa visto riendo por fin el jornada anterior, con "buenas sensaciones" con el swing y acertado con los putts largos. Parec¨ªa que el Tigre hab¨ªa sacado el orgullo, el golpe de genio, y que la lesi¨®n era cosa pasada. No fue as¨ª. Al final del d¨ªa se le vio mermado, sufri¨® para coger calles (alguna de sus bolas dio en los espectadores) y hasta el caddie de su compa?ero de ronda Hunter Mahan recogi¨® su bola del hoyo, quiz¨¢s un s¨ªntoma de que la espalda segu¨ªa fastidi¨¢ndole.Tuvo el coraje de no retirarse, aunque firm¨® una tarjeta final de 78 golpes, su peor cuarta ronda en un torneo del PGA. No se ha visto todav¨ªa al mejor Tiger, aunque su exentrenador Hank Haney le defienda como el gran n¨²mero uno. Doral vio en su lugar una gran confirmaci¨®n (y vestido de rojo, como Tiger los domingos), Patrick Reed.

Clasificaciones completas del torneo.