Jack Miller, presente

A Jack Miller (Townsville, Australia; 19 a?os) se le recuerda por hacer caballitos con un patinete por el parquin del circuito de Mugello. Tambi¨¦n por acumular nueve fracturas de clav¨ªcula, consecuencia de sus m¨²ltiples ca¨ªdas. Sus locuras fuera de la pista se traduc¨ªan a su pilotaje, descontrolado y agresivo. Pero los m¨¢s observadores no se dejaron llevar por las apariencias. Si algo ten¨ªa este australiano espigado, de cabello rizado e ideas de bombero, es que era r¨¢pido. Muy r¨¢pido. Caer en las manos del director de equipo Aki Ajo, un remanso de paz, man¨¢ para los deportistas m¨¢s nerviosos, no ha hecho m¨¢s que ayudarle a rentabilizar todo su potencial. No se hab¨ªa subido a un podio en los tres a?os que lleva en el Mundial, desde que apareci¨® por Sachsenring en 2011. Y este domingo, en la primera carrera del a?o, se subi¨®, de golpe, al primer escal¨®n. Gan¨® por insistente. En la ¨²ltima vuelta. Y gracias al error cometido por ?lex M¨¢rquez, a quien llev¨® al l¨ªmite desde que se apag¨® el sem¨¢foro a las seis de la tarde para la prueba de Moto3 en el circuito de Losail.

Se hab¨ªa colocado el australiano ¨Cpiloto de referencia del equipo oficial de KTM¨C primero en la salida. El chico de la pole, ?lex Rins, arranc¨® mal y vio c¨®mo le adelantaban un pu?ado de rivales por izquierda y derecha. El primero fue su compa?ero de equipo, M¨¢rquez, el hermano menor del campe¨®n del mundo de MotoGP, que ser¨ªa quien encabezar¨ªa el pelot¨®n desde que pas¨® por meta la primera vez en primera posici¨®n y hasta que lo hizo por pen¨²ltima vez. El de Cervera y Miller dirig¨ªan la carrera con constancia y paciencia. Probaba el de KTM a adelantarlo a final de recta, justo antes de la primera curva. Y respond¨ªa el de Honda, sacando provecho de esa moto que, por fin, tanto le gusta, en la ¨²ltima curva. As¨ª, mientras por detr¨¢s se libraban otras batallas en la pelea por el tercer puesto, fueron pasando los minutos. As¨ª, separados por escasas una o dos d¨¦cimas de segundo, manten¨ªan ambos la tensi¨®n en el primer duelo del curso entre dos de los pilotos favoritos y las dos marcas m¨¢s poderosas de la categor¨ªa.

Hasta que M¨¢rquez pareci¨® tener el ritmo y el cuerpo para sellar con una victoria una carrera que dominaba desde el inicio. Le sac¨® m¨¢s de medio segundo, que fueron cuatro d¨¦cimas a falta de dos vueltas, y solo una a un giro para el final. Miller apretaba los dientes, pues el segundo grupo se acercaba cada vez m¨¢s: todos quer¨ªan un hueco en el podio. Y en la ¨²ltima vuelta el peque?o de los M¨¢rquez, que sent¨ªa esa presi¨®n, se pas¨® de frenada a la entrada de la sexta curva y se abri¨® demasiado. Encontr¨® f¨¢cil la v¨ªa de escape Miller. Y los que ven¨ªan detr¨¢s: Rins, Oliveira, V¨¢zquez... se le echaron al cuello al de Lleida. Ya no se le escapar¨ªa la gloria al australiano, que celebrar¨ªa con m¨²ltiples caballitos su primer triunfo en el mundial. Y sorprendentemente pudo entrar segundo M¨¢rquez, culminando con un podio su gran trabajo, el de un equipo y una f¨¢brica que parec¨ªan perdidos este invierno. La tercera plaza, m¨¢s re?ida que ninguna otra, fue finalmente para Efr¨¦n V¨¢zquez, tozudo, que sal¨ªa desde la 15? posici¨®n pero pudo, con su Honda supers¨®nica (veloc¨ªsima en la recta) desquiciar a Rins, incapaz de adelantarle cuando ya hab¨ªa remontado desde la 12? posici¨®n a la que hab¨ªa ca¨ªda tras una salida p¨¦sima. Tuvo que conformarse el subcampe¨®n de 2013 con un quinto puesto que le sabe a poco.