La valla maldita de V¨ªctor Garc¨ªa
El atleta madrile?o, que aspiraba a medalla, se da el gran morrazo al tropezar en el ¨²ltimo obst¨¢culo
V¨ªctor Garc¨ªa tropez¨® y se cay¨® de morros, con la cara golpeando violentamente contra el tart¨¢n en la ¨²ltima valla de la semifinal de 3.000 metros obst¨¢culos. El atleta de Rivas no termin¨® la carrera, se qued¨® tendido, angustiosamente, cuan largo es, sobre la pista. La final (el jueves a las 19.45) se disputar¨¢ sin uno de los mejores, uno de los atletas espa?oles que aspiraba a medalla. S¨ª que lograron el pase, por tiempos, en su semifinal, Sebasti¨¢n Martos y ?ngel Mullera.
V¨ªctor Garc¨ªa esprintaba como si le fuera la vida en ello. La semifinal se le hab¨ªa complicado. Despu¨¦s de estar toda la carrera por los primeros lugares, cuando se empez¨® a correr en serio, en la ¨²ltima vuelta, se vio, de repente, s¨¦ptimo, octavo. Despu¨¦s de la ¨²ltima r¨ªa, al obstaculista madrile?o no le quedaba m¨¢s que la recta y una valla para lograr quedar entre los cinco primeros con acceso directo a la final, una obligaci¨®n, pues su carrera hab¨ªa sido muy lenta. ¡°A V¨ªctor le gusta correr atr¨¢s, pero en las ¨²ltimas vueltas es muy seguro y ya sabe estar delante¡±, dice ?ngel Mullera, quien contempl¨® desde la pista la ca¨ªda de su compa?ero. ¡°No iba bien colocado, pero tambi¨¦n tiene muy buen final y estoy seguro de que habr¨ªa logrado quedar quinto¡±.
Por el exterior el madrile?o intent¨® pasar el ¨²ltimo obst¨¢culo con tanta fuerza e ¨ªmpetu, con tanta desesperaci¨®n, quiz¨¢s, que calcul¨® mal despu¨¦s de pelearse por un hueco con el alem¨¢n Steffen Uliczka y su rodilla derecha choc¨® contra la madera. ¡°He visto la ca¨ªda y me ha afectado much¨ªsimo¡±, dice Sebasti¨¢n Martos, amigo de Garc¨ªa. ¡°Seguramente por eso no he hecho la mejor carrera de mi vida en mi semifinal¡±.
El atleta, una de las grandes esperanzas espa?olas de medalla pues est¨¢ en magn¨ªfica forma, fue evacuado en camilla, mareado, y no recordaba nada de la carrera. ¡°Solo ten¨ªa un flash en la cabeza de la ca¨ªda, no recordaba m¨¢s¡±, dice Jos¨¦ Luis Peir¨®, responsable del equipo espa?ol, quien de entrada hab¨ªa solicitado una revisi¨®n del v¨ªdeo pues sospechaba que el atleta alem¨¢n hab¨ªa actuado antirreglamentariamente. Un flash que seguramente llevar¨ªa al madrile?o a un momento similar sucedido hace dos a?os, en la ¨²ltima valla de la final de los Europeos de Helsinki. Entonces, Garc¨ªa, siempre valiente, esprintaba a muerte por la victoria codo a codo con el gran favorito, el franc¨¦s Mekhissi. Tropez¨® y cay¨® al suelo el atleta de Rivas, pero a¨²n fue capaz de levantarse y terminar tercero, medalla de bronce, tan grande son su valor y su calidad.
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