Gala con Korchn¨®i y P¨¦rez-Reverte
Seis de los mejores ajedrecistas del mundo compiten en el torneo de Z¨²rich
¡°Para quienes sustituimos a Dios por el ajedrez, estar en el hotel Savoy de Z¨²rich a un metro de V¨ªktor Korchn¨®i equivale a asistir a misa¡±. Lo tuite¨® Arturo P¨¦rez-Reverte tras una noche de gala, con seis ajedrecistas de ¨¦lite y dos m¨²sicos rusos, organizada por el mecenas ?leg Skv¨®rtsov, experto en el comercio de diamantes. De esos seis maestros del tablero se espera que produzcan joyas desde hoy.
Aunque falta el actual campe¨®n, el noruego Magnus Carlsen, la n¨®mina que ha reunido Skv¨®rtsov en su torneo es una de las mejores del a?o: el indio Viswanathan Anand, pentacampe¨®n del mundo; el ruso Vlad¨ªmir Kr¨¢mnik, excampe¨®n; el italiano Fabiano Caruana, 2? del escalaf¨®n actual; el armenio Levon Aroni¨¢n, 9?; el estadounidense Hikaru Nakamura, 10?; y el ruso Sergu¨¦i Kariakin, 12?. Se enfrentar¨¢n por sistema de liga a una vuelta, para deleite del patr¨®n y sus invitados presentes, pero tambi¨¦n para millones de aficionados que seguir¨¢n las partidas por Internet, en directo o diferido. Y para otros, como el asturiano Fernando Bernardo, capaces de viajar miles de kil¨®metros para ver de cerca a sus ¨ªdolos.
Los seis conocen y han le¨ªdo a P¨¦rez-Reverte, traducido a muchos idiomas. El ajedrez forma parte de las tramas principales de dos de sus novelas ¨CLa Tabla de Flandes y El tango de la Guardia Vieja-, aparece en varias m¨¢s y es probable que est¨¦ en alguna de las pr¨®ximas. ¡°El ajedrez, y sobre todo el ambiente de estos torneos, me produce paz interior, me permite reencontrarme con el sosiego y la reflexi¨®n serena. No soy un jugador de conocimientos t¨¦cnicos avanzados; solo s¨¦ lo justo para entender una partida, pero me da otras cosas¡±, explicaba este s¨¢bado el escritor espa?ol, invitado especial en la primera fila de los espectadores, poco antes de que Aroni¨¢n, ya sentado en el escenario y preparado para disputar la primera ronda con Kariakin, se levantara para acercarse a saludarlo con cara de emoci¨®n: ¡°Le presento mis respetos. Me alegra mucho que haya venido¡±.
Es probable que Korchn¨®i, quien cumplir¨¢ 84 a?os el 23 de marzo, haya le¨ªdo tambi¨¦n al cartagenero , pero es dif¨ªcil comprobarlo porque ya est¨¢ muy deteriorado. Si uno repasa su biograf¨ªa, lo raro es que haya llegado a esa edad tras sufrir en su adolescencia el sitio de Leningrado: Hitler cort¨® los suministros para matar de hambre y fr¨ªo a los defensores de la ciudad; Korchn¨®i derret¨ªa el hielo para beber, se alegraba de ver cad¨¢veres porque eso le permit¨ªa quitarles las cartillas de racionamiento para poder comer, y tuvo que arrastrar a varios familiares muertos hasta el cementerio. Mucho m¨¢s tarde fue un disidente sovi¨¦tico, se escap¨® de su pa¨ªs a Suiza, fue perseguido y presionado por el KGB de m¨²ltiples maneras, mantuvo con el h¨¦roe nacional Anatoli K¨¢rpov una de las rivalidades m¨¢s escandalosas de la historia de todos los deportes, bati¨® marcas de longevidad competitiva (con m¨¢s de 70 a?os derrot¨® varias veces a rivales de alcurnia) y firm¨® una gran colecci¨®n de partidas magn¨ªficas e inmortales.
Lo ¨²nico que Korchn¨®i a¨²n parece entender bien es el ajedrez, que sigue fijado y vivo en su cerebro, como un lenguaje materno. La gala del viernes consisti¨® en un peque?o concierto de dos m¨²sicos de cuerda rusos que interpretaron obras de Piazzola y T¨¢rrega, y un torneo de partidas rel¨¢mpago (unos cinco minutos por jugador) entre los seis gladiadores del tablero. Mientras sonaron la guitarra y el viol¨ªn, V¨ªktor El Terrible parec¨ªa ausente, ensimismado, con su esposa, Petra Leeuwerik (acusada de espionaje en su juventud e internada en un campo de concentraci¨®n de Siberia), siempre al lado para atenderlo. Pero en cuanto los tableros electr¨®nicos empezaron a reflejar los movimientos de las partidas, los ojos de Korchn¨®i tambi¨¦n se encendieron con la vista clavada en la pantalla mural. Para el domingo y el lunes est¨¢ previsto un miniduelo entre ¨¦l y otro veterano ilustre, Wolfgang Uhlmann.
Solo uno de los seis jugadores acaba de demostrar que est¨¢ en gran forma: Nakamura, vencedor del dur¨ªsimo abierto de Gibraltar. Los otros cinco necesitan un buen resultado que los reconforte de actuaciones decepcionantes, por diversos motivos. Anand, de 45 a?os, plant¨® cara a Carlsen en el Mundial de Sochi, pero la semana pasada fracas¨® en Baden-Baden (Alemania). Caruana, de 22, firm¨® una haza?a en agosto cuando engarz¨® seis victorias seguidas en San Luis (EE UU), pero su rendimiento posterior ha sido m¨¢s bien gris. Kr¨¢mnik, 39, intenta convencerse de que puede ser un cuarent¨®n muy fuerte. Aroni¨¢n, 32, no termina de ser un candidato indiscutible a la corona mundial, a pesar de una carrera brillant¨ªsima. Y Kariakin a¨²n no ha hecho como adulto nada proporcional a su gran marca hist¨®rica, a¨²n vigente: el gran maestro m¨¢s joven del mundo, a los 12 a?os y siete meses.
A finales del siglo XVI, Felipe II reun¨ªa en su corte a los mejores ajedrecistas espa?oles e italianos, que eran los mejores del mundo y compet¨ªan por premios muy atractivos. Han pasado 450 a?os; el ajedrez tiene otro tipo de mecenas pero sigue despertando grandes pasiones en todo tipo de gentes, como el c¨¦lebre P¨¦rez-Reverte o el aficionado Bernardo.
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