Muchos nervios y poco f¨²tbol

No le alcanza al Deportivo para vivir en el sosiego clasificatorio. En una jornada en la que los resultados en otros escenarios le ayudaban a dar un salto, no pas¨® del empate ante un Espanyol disminuido, hu¨¦rfano de Sergio Garc¨ªa y sin mayores apreturas en la tabla. Defraud¨® el equipo de V¨ªctor Fern¨¢ndez porque adem¨¢s se fue del partido con un mal sabor, con la losa de unos diez ¨²ltimos minutos que mostraron a un equipo ca¨ªdo, incapaz de buscar el gol del triunfo, afortunado incluso para que el rival no se llevase la victoria animado por tanta d¨¢diva.

El festival de su ¨²ltima comparecencia en Riazor tuvo peso en el despliegue del Deportivo, que se tap¨® m¨¢s de lo acostumbrado, atento a guardarse y sin exponer tanto en una presi¨®n avanzada que le destap¨® ante el Sevilla m¨¢s de lo debido. Se cuid¨® V¨ªctor Fern¨¢ndez de que sus chicos se juntasen en apenas veinte metros tras el bal¨®n cuando lo perd¨ªan y el partido no result¨® tan florido como otros, se trab¨® entre imprecisiones e interrupciones, avanz¨® en la prudencia porque el Deportivo se cuid¨® de transitar entre pases de seguridad y no propiciar contragolpes y el Espanyol opt¨® por cubrir la ausencia de Sergio Garc¨ªa agregando un centrocampista, idea que no abandon¨® ni siquiera cuando dio entrada a Stuani, habitual en la segunda l¨ªnea, pero en esta ocasi¨®n referencia atacante durante casi medio partido.

El abismo le pidi¨® prudencia al Deportivo, que se avino a un partido largo, pero acab¨® exhausto. Trat¨® de edificar sin saltarse pasos y propici¨® con esa estrategia la defensa del rival. Busc¨® a Fari?a y a Lucas P¨¦rez, pero encontr¨® a Cavaleiro, que siempre aparece, pero no est¨¢ claro que lo haga donde debe. Futbolista industrioso, este agitador luso brilla m¨¢s cuanto menos toques le d¨¦ al bal¨®n y lo hace m¨¢s en el espacio m¨¢s que en la combinaci¨®n. Que la pelota pasase por ¨¦l y no por Fari?a alertaba sobre una falta de claridad que fue estigma deportivista durante largos minutos. Sin estar a punto f¨ªsicamente, el argentino ofrece un punto diferencial que siempre se agradece en partidos tan cerrados, busc¨® alguna salida ante el jerogl¨ªfico que ten¨ªa delante, pero pareci¨® desconectado, como Lucas, que no acab¨® de encontrarse c¨®modo cuando tuvo que evolucionar ca¨ªdo al costado. La ¨²nica vez que consigui¨® enlazar una pared con Fari?a generaron una opci¨®n de gol. Pero no hubo continuidad en esa v¨ªa y el Espanyol no sufri¨®, se agrup¨® con oficio y aunque no encontr¨® la profundidad hasta el final supo gestionar el partido y sembrar alarmas en el bal¨®n parado, que domin¨® con claridad en las dos ¨¢reas.

A dos minutos del final un grupo de aficionados se alzaron para pedir a voz en grito la dimisi¨®n del presidente Tino Fern¨¢ndez

En un partido de cero a cero la b¨²squeda de alternativas fortaleci¨® al Espanyol. Entr¨® Salomao, in¨¦dito por lesi¨®n desde hace m¨¢s de un a?o, se peg¨® a la cal y con dos carreras pareci¨® imprimir otra velocidad para un partido demasiado parado. Monta?¨¦s le dio un punto m¨¢s al Espanyol, que necesitaba ruptura si ambicionaba llevarse los puntos. Los pudo encontrar por el camino en el que ya anticipaba problemas para el Deportivo, un saque de esquina prolongado en el primer palo con una clamorosa falta sobre Lopo acab¨® a pies de Javi L¨®pez, que estamp¨® la pelota en el larguero. El miedo atraves¨® Riazor como una daga, el Espanyol sinti¨® que tras ochenta minutos de contenci¨®n el partido pod¨ªa ser suyo.

A dos minutos del final, con el Deportivo boqueando contra las cuerdas, mientras el rival se preparaba para ejecutar un libre directo en el que pod¨ªa encerrarse buena parte de las opciones de salvaci¨®n de su equipo, un grupo de aficionados desde los aleda?os de la grada que ocupan habitualmente los Riazor Blues, en esta ocasi¨®n de nueva vac¨ªa por decisi¨®n propia, se alzaron para pedir a voz en grito la dimisi¨®n del presidente Tino Fern¨¢ndez. Fueron acallados, as¨ª sucedi¨® varias veces durante la ma?ana, por los silbidos de la mayor¨ªa del estadio. ¡°No era el mejor ambiente para jugar¡±, resumi¨® V¨ªctor Fern¨¢ndez, al que tampoco se le escapa otro detalle: ¡°Nosotros tenemos que resolver los problemas que hay dentro del campo¡±. Presi¨®n, nervios, el silencio y los reproches al palco del sector que m¨¢s anima al equipo, la contestaci¨®n del resto de aficionados que creen que el foco debe estar en el f¨²tbol y la ausencia de ¨¦ste sobre el c¨¦sped. Si cuando acabe el campeonato el Deportivo sigue en Primera la empresa habr¨¢ sido tit¨¢nica.