Mathieu entra en la ecuaci¨®n

El ¨¢rea deportiva del Barcelona se plante¨® hace dos a?os fichar a un central porque no sab¨ªan c¨®mo evolucionar¨ªa la rodilla de Puyol ¡ªahora retirado¡ª y quer¨ªan tener a cuatro jugadores de plenas garant¨ªas en el puesto. Era, adem¨¢s, una exigencia de la grada. Ocurri¨® que el expresidente Sandro Rosell decidi¨® por su cuenta que el que mejor le ven¨ªa al equipo era David Luiz, entonces en el Chelsea. ¡°Pero no tiene ese equilibrio que requiere el puesto de central en el Barcelona porque en ocasiones te sale de extremo, a veces pega un pelotazo a la grada y pierde la posici¨®n a menudo¡­¡±, le razonaron desde el ¨¢rea deportiva. Unos argumentos que no convencieron a Rosell y que antepuso su fichaje a cualquier otro. No era del gusto del ¨¢rea deportiva, que prefer¨ªa a Agger (Liverpool) por su salida del bal¨®n e incluso a Mathieu porque era como Abidal, reconvertible tambi¨¦n al lateral. Y ya cuando negociaron con David Luiz no hab¨ªa dinero ¡ªinvertido en Neymar¡ª ni las ganas del jugador a venir. As¨ª que no vino nadie.

En el pasado verano la prioridad, descartada la vieja ambici¨®n de Thiago Silva, fue Marquinhos (ambos del PSG). Pero el club parisino se neg¨® en redondo a negociar y lleg¨® Mathieu [por 20 millones y no por 12 como pod¨ªan haberlo fichado en el a?o anterior; aunque el jugador se rebaj¨® la ficha], adem¨¢s de un Vermaelen que lo hizo lesionado y sigue sin debutar con el primer equipo. Se quedaron en la secretar¨ªa t¨¦cnica, en cualquier caso, con las ganas de seguir las evoluciones de John Stones, central del Everton.

Los informes del club dec¨ªan que el futbolista no era genial en nada, pero bueno en casi todo

¡°La defensa siempre ha sido un debate en Can Bar?a y exist¨ªa una falsa prioridad por fichar. Pero si miras la zaga que gan¨® en Wembley [final de la Champions conquistada ante el Manchester United], tres de los cuatro habituales son los mismos¡±, reflexiona un jugador del equipo. ¡°Adem¨¢s sigue Bartra, que nunca falla, y Mathieu, que est¨¢ dando un gran rendimiento¡±, abunda otro futbolista del Barcelona. ¡°Esa era la idea con Mathieu¡±, recogen el testigo desde el club. Resulta que los informes del ¨¢rea t¨¦cnica evidenciaban que el futbolista no era excelente en nada, pero s¨ª que era bueno en casi todo. ¡°Dijeron que se adaptaba a las caracter¨ªsticas de los otros centrales¡±, cuentan del club; ¡°que su velocidad y capacidad de correcci¨®n, adem¨¢s de cent¨ªmetros, se adaptar¨ªan a la salida de bal¨®n de Piqu¨¦, al sentido t¨¢ctico y anticipaci¨®n de Mascherano y a la agresividad de Bartra¡±.

De momento, el franc¨¦s les da la raz¨®n, fenomenal en el juego a¨¦reo, veloz en la carrera hacia atr¨¢s y hasta atinado en el remate con dianas capitales ante el Madrid en el Camp Nou y el pasado fin de semana frente al Celta. ¡°Los goles son lo que menos le pod¨ªamos pedir en un principio¡±, se?al¨® ayer Luis Enrique; ¡°m¨¢s bien le fichamos para que los evitara y para sacar el bal¨®n. Yo juzgo a J¨¦r¨¦my por su rendimiento desde el principio de la temporada y es m¨¢s que bueno para ser el primero¡±. Y, en lo que ya es habitual en el entrenador, record¨® a quienes le ficharon, ahora despedidos: ¡°Este a?o en la direcci¨®n deportiva ha hecho un gran trabajo¡±.

¡°A J¨¦r¨¦my lo que menos le pod¨ªamos pedir era que marcara tantos¡±, explica Luis Enrique

Ocurre que en el mercado actual no hay muchos equipos que tengan centrales de plenas garant¨ªas. El PSG, por ejemplo, pag¨® 50 millones por David Luiz, por m¨¢s que tienen a Thiago Silva y Marquinhos, los preferidos del Bar?a. El Manchester City abon¨® 40 millones por Mangala, que no juega en beneficio del veterano Demichelis. El Chelsea persiste con Terry, al que renuevan a cada temporada por rendimiento, adem¨¢s de Cahill y el joven Zouma que apenas cuenta para Mourinho. ¡°Son f¨ªsicos, pero no cumplen con el requisito de sacar el bal¨®n¡±, exponen desde el club. En el Manchester United es m¨¢s de lo mismo con Smalling, Jones y Evans, adem¨¢s de Rojo, fichado por 20 millones al Sporting de Portugal. ¡°Son centrales que no encajar¨ªan en el Barcelona por la exigente forma de jugar que tenemos¡±, resuelven. En el Liverpool, lesionado Skrtel, juega ahora Emre Can, un mediocentro reconvertido y el desbravado Kolo Tour¨¦. Y el Bayern pag¨® 28 millones por Benatia ¡ªdescartado en el Bar?a porque le cuesta jugar con espacios a su espalda¡ª, que s¨®lo ha disputado 13 partidos entre lesiones y rotaciones de un Guardiola que sigue confiando en Boateng y Dante. La Juve tiene a Bonucci y Chiellini, jugadores perfectos para la Serie A, del mismo modo que el Atl¨¦tico tiene en Miranda, God¨ªn y Gim¨¦nez a tres centrales id¨®neos para su juego. Y el Madrid ¡ª¡°ellos s¨ª¡±, entienden desde el club¡ª encuentra en Ramos, Pepe y Varane futbolistas de gran calidad.

Y el Bar?a se qued¨® con Mathieu, futbolista que no sabe mentir ¡ªdesvel¨® la bronca del t¨¦cnico con Messi, se sorprendi¨® por jugar de lateral ante el Madrid en el Bernab¨¦u y reconoci¨® que ante el Celta jugaron su peor primera parte¡ª y que junto a Piqu¨¦ (suman 15 partidos juntos y s¨®lo han concedido un empate y dos derrotas) parece encontrarse de lo m¨¢s c¨®modo. Ocurre que ante el Almer¨ªa es posible que uno de los dos descanse para dar cabida a Bartra, ya que Mascherano presumiblemente ocupar¨¢ la medular ante la sanci¨®n de Busquets. Cambios que no repercuten en el Barcelona, que tan s¨®lo ha encajado 17 goles en la Liga (a 0,58 por partido). ¡°Es un dato que me gusta. Es mejorable, pero habla bien de todo el equipo, no solo de la defensa¡±, reflexion¨® Luis Enrique. Tambi¨¦n de Mathieu.